NSYNC se reunió para premiar a Taylor Swift en los VMAs: así están hoy

La noche de los VMAs estuvo llena de sucesos que enloquecieron al público y que, como resultado, invadieron por completo las redes sociales. Desde el incómodo intercambio entre Peso Pluma y Doja Cat hasta la divertida reacción de Taylor Swift al show de Shakira. 

Pero, si hay un momento que descolocó por completo a la audiencia -especialmente a aquellas personas que crecieron en la década de los 90 y los 2000- fue la inesperada aparición de NSYNC (si, el grupo entero incluido Justin Timberlake), que subió al escenario para entregarle el premio de Mejor Video Pop a Taylor Swift.
 

Acá viene una aclaración para las lectoras que no tienen ni idea de qué es NSYNC: es una de las boy band referente de la música pop de finales de los noventa y que, a lo largo de los siete años que trabajaron juntos, estuvieron nominados a ocho Grammys, trabajaron con legendarios nombres de la música como Elton John y rompieron incontables récords de ventas con cada álbum que sacaron. 

También fue histórica por su brusca separación ya que, después de lanzar un exitosísimo álbum en el 2001, anunciaron una “pausa” pensada para que Timberlake trabajara como solista, la cual culminó en una disolución absoluta que tomó por sorpresa a los mismos compañeros del intérprete de “Mirrors”. 
 

Y, para quienes crecieron entre paredes empapeladas con posters de Lance Bass y Joey Fatone y que, seguramente, sufrieron el polémico quiebre de la banda, así está hoy cada uno de los integrantes:

Justin Timberlake, quizás el más conocido de todos los integrantes de la boy band, creció considerablemente como solista, se introdujo en el mundo del cine y se volvió una aclamada figura de Hollywood.

Lance Bass, una vez disuelta la banda, hizo todo lo posible para cumplir su sueño de ser astronauta. Sin embargo y a pesar de que pudo conseguir las acreditaciones y certificados de la NASA, nunca alcanzó su objetivo porque no logró pagar los 20 millones de dólares necesarios para sumarse a la misión rusa que lo llevaría al espacio.

Después de ese frustrado intento intergaláctico, continuó su vida como participante recurrente de realitys y se convirtió en una de las caras de la defensa de los derechos de la comunidad LGBTIQ+ en Estados Unidos. 

Chris Kirkpatrick luchó por mantener su lugar en la industria de la música. Después de NSYNC creó un par de boy bands más que no llegaron a buen puerto –o que ni siquiera zarparon-. Finalmente, después de pasar por la pantalla chica como integrante de serie de realitys que buscaban revivir celebridades del pasado, encontró su camino en las redes sociales. 

Joey Fatone quiso explorar el mundo actoral. Debutó en Mi gran casamiento griego, pero cambió los estudios de grabación por los escenarios de Broadway y, después de un par de obras, se dedicó por completo a la conducción de programas de juegos.

Último y no menos importante viene JC Chasez, quien era el más tímido y menos afecto a la fama de todos sus compañeros. Después de pasar al detrás de bambalinas escribiendo temas para otros cantantes, optó por desaparecer del ambiente público y es visto en raras ocasiones.