Incendios en Argentina: según el Ministerio de Ambiente, un 95% son intencionales

Nicki Becker analiza la problemática de los incendios forestales y cuál es su impacto en el medioambiente.

por

Nicki Becker

8 de septiembre de 2022

Incendios en Argentina. - Créditos: Archivo/LA NACION.

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En 2011 cuando yo tenía 10 años se estrenó por el Trece “El puntero” en la cual la letra de su cortina musical hecha por Bomba Estéreo era muy pegadiza y decía “Mantenlo prendido, fuego. No lo dejes apagar. Y grita, fuego. Mantenlo prendido, fuego”. Parece que nos tomamos muy literal la letra de la canción en Argentina: desde comienzos del mes pasado volvieron los incendios en el Delta del Paraná y Rosario se llenó de humo al igual que en los últimos 3 años. Por suerte, el Gobierno informó tras varias semanas que están contenidos y controlados.

Según la Comisión Nacional de Actividades Espaciales se quemaron 95.000 hectáreas en Entre Ríos y Santa Fe. Para que se den una idea: en dos años y medio se quemaron el equivalente a 42 veces la Ciudad de Buenos Aires.

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¿Por qué se incendia?

Lo primero que tenes que saber es que según el Ministerio de Ambiente un 95% de los fuegos son intencionales. Las quemas son una práctica histórica que usan productores con la finalidad de la renovación de pasturas a finales del invierno. Para que esta práctica sea legal, se le debe pedir permiso al Estado. A esto se le suma el fenómeno de la niña que provoca la bajante del río Paraná y acarrea sequías que se incrementan por el cambio climático, lo que tiene como consecuencia que haya muy poca humedad ambiente. Por lo cual los humedales de la zona están muy secos y con alta disponibilidad de biomasa y material combustible. Estos factores concatenados son un caldo de cultivo para que se den incendios que no se puedan controlar. Por estas razones tanto en Entre Ríos como Santa Fe las quemas están prohibidas hace tiempo, es decir que cualquier quema que se lleve a cabo ahora son ilegales.

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La Facultad de Ciencias Médicas (FCM) de la Universidad Nacional de Rosario (UNR) advirtió que la quema de humedales en el Delta del Paraná genera “graves consecuencias para la salud de la población” y que se multiplicaron las consultas vinculadas a problemas respiratorios. Entre los principales síntomas se encuentran la tos, dificultad para respirar, silbidos en el pecho y ardor de ojos.

¿Cómo debería ser una mejor gestión de los fuegos?

El sistema nacional de manejo del fuego tiene que mejorar su estructura y recursos como medida de adaptación al cambio climático. Esto implica más aviones y helicópteros y aumentar la gente en territorio para prevenirlos.
Por otro lado, hay que tener un mejor control para poder identificar al responsable y tipificar el delito. El Ministerio de Ambiente instaló en el Delta Faros de conservación que tienen sensores que detectan cambios de la temperatura del suelo para identificar a quienes empezaron con el fuego. Desde el Gobierno nacional presentaron una denuncia ante la Justicia con pruebas de videos tomados por estos faros. Aunque hubo siete detenidos, todos ellos fueron liberados.
Sancionar una Ley de humedales para proteger a esta serie de ecosistemas que están siendo dañados con estas quemas. La ley propone regular la producción por encima de los humedales y realizar un inventario a nivel nacional.