Victor Chang: quién fue y por qué Google lo homenajeó en su doodle

Víctor Chang nació en China, pero creció en Australia. Su primer contacto con el mundo de la medicina fue a los 12 años cuando su mamá falleció a causa de un cáncer de mamá. Ese terrible dolor Chang supo transformarlo en un valioso motor para convertirse en médico y no solo eso, sino para pasar a la historia como uno de los cirujanos más destacados y talentosos de toda Australia.

Al recibirse de médico en la Universidad de Sydney, Chang realizó una pasantía en el Hospital St Vincent, que lo llevó a capacitarse en Londres. Allí, comenzó su formación en el área de la cirugía cardiotorácica.

Después de seis años, donde dos los realizó en los Estados Unidos, Chang regresó a Australia con un gran propósito: formar parte del staff del primer hospital que lo recibió.

Chang es destacado y celebrado en el mundo de la medicina por ser el artífice del desarrollo de la válvula cardíaca artificial de San Vicente, artefacto que se distinguía de los entonces disponibles por ser más económico. Ello significó un gran avance: permitió que sea accesible y se eleve el número de vidas salvadas. Entre 1984 y 1990, el equipo médico dirigido por Chang en Australia realizó más de 197 trasplantes de corazón y pulmón.

A su vez, el cirujano fue quien realizó en 1984 el trasplante de corazón a la paciente australiana más joven, Fiona Coote, que en ese entonces tenía solo 14 años. A los dos años de la cirugía, Coote volvió a atravesar la misma operación. Hoy, es la persona que más tiempo sobrevivió con este tipo de diagnóstico en su país.

El 4 de julio de 1991, Chang fue interceptado por dos hombres mientras manejaba su auto. Los delincuentes le exigieron una suma de dinero que se negó a dar. Se generó una discusión, Chang recibió dos disparos y murió. Tenía 55 años. Su cuerpo fue encontrado en una alcantarilla junto a su auto. Sus restos fueron incinerados y sus cenizas arrojadas en el parque frente al Hospital St Vicent.

Chew Seng Liew y Choon Tee Lim fueron identificados como los autores del crimen del reconocido médico. El primero recibió una pena de 26 años de prisión tras confesar el hecho. El segundo, pese a que negó saber que iba a cometerse el asesinato, recibió una pena de 18 a 24 años. Ambos ya recuperaron la libertad.

A modo de homenaje, y por sus grandes aportes a la medicina moderna, se creó el Instituto de Investigación Cardíaca Victor Chang.