La lengua: funciones que no conocías de este órgano poderoso y sensible
5 de abril de 2020 • 14:56
Créditos: Getty Images.
Para el ayurveda, la lengua no solo es un órgano fundamental en la digestión y el habla, sino una herramienta diagnóstica muy poderosa. Es la primera línea de defensa del sistema inmunológico. Es un órgano de vital importancia en la salud bucal, pero también, en la general. Situada entre el mundo interior y el exterior, tiene una conexión directa con nuestro sistema digestivo y, mediante su función sensorial, detecta el sabor de todos los nutrientes que ingerimos.
Al entrar en contacto con los alimentos, las señales nerviosas de las distintas áreas de la lengua viajan al cerebro e inician el proceso digestivo. Al dormir, el organismo elimina las toxinas del cuerpo y las deposita sobre la superficie de la lengua. Una lengua poco sana es producto de la acumulación de una gran cantidad de residuos, toxinas y bacterias. Esto puede generar desde mal aliento hasta malestar de la salud en general.
Herramienta diagnóstica
Para la medicina ayurveda, la medicina tradicional de la India, la potencia del agni (el fuego digestivo) extrae los nutrientes de la comida. Si hay malos hábitos alimenticios y fuego digestivo débil, tiende a acumularse ama (una sustancia mórbida sin digerir, conocida como "saburra lingual" en odontología) y bloquear los canales del cuerpo, lo que causa una variedad de síntomas y alteraciones en la salud. En la lengua se ven algunos de los primeros signos de este proceso. Por eso, su inspección visual es considerada una de las herramientas diagnósticas más rápidas y efectivas.
Mirar la lengua permite recabar información acerca del estado de salud y del funcionamiento de los órganos internos. Todo el organismo se ve reflejado en ella. Según dónde hay más ama en la lengua, se puede evaluar qué parte del cuerpo está más comprometida. Cabe aclarar que para un diagnóstico completo no basta solo con mirar la lengua, pero hay lesiones típicas que permiten evidenciar enfermedades inflamatorias, gastritis, deficiencias vitamínicas, síndromes de malabsorción, úlceras gástricas y duodenales, entre otras.
¿Qué dice tu lengua?
Observar la lengua no solo permite conocer el estado físico y mental de una persona, sino también su digestión. Si tu lengua tiene una cobertura blanquecina, amarronada o amarillenta, habla de una digestión alterada. En este caso, habría que revisar los hábitos alimenticios desde la calidad de los alimentos hasta los horarios de las comidas. Tené en cuenta:
- Cuando la digestión está desregularizada, se observa sequedad, grietas, fisuras.
- Si la digestión es lenta, se ve una capa blanquecina junto con producción excesiva de saliva.
- Si es exacerbada, se percibe acidez, aftas, sed excesiva y olor desagradable.
- Cuando está equilibrada, la lengua se nota rosada, liviana, fresca, sin mal olor.
Cómo cuidarla
El ayurveda tiene algunas rutinas diarias para ayudar con la salud de la lengua. Es una práctica común limpiar la boca a primera hora de la mañana. Además de cepillarte los dientes, se recomienda el raspado de lengua con un raspador de borde romo hecho de acero inoxidable.
Los beneficios de raspar el recubrimiento acumulado van más allá de la higiene oral. Evita que las toxinas se reabsorban en el cuerpo y refuerza las funciones inmunológicas. También reduce las bacterias en la boca que pueden comprometer las encías y los dientes, y ayuda con el mal aliento, al cambiar la microflora en la boca y minimizar la putrefacción. Si esta saburra no se elimina, las papilas gustativas pueden bloquearse, lo que provoca falso deseo de comer y la incapacidad de reconocer los seis sabores. Esto afecta la digestión y provoca la acumulación de ama.
Hábitos saludables
Seguro escuchaste sobre el "reloj biológico" o los ritmos internos. La liberación circadiana de hormonas y sustancias internas regula nuestro metabolismo. Este reloj se asocia a la cantidad de luz solar que recibimos. De día nos nutrimos de alimento, de noche descansamos y nos desintoxicamos naturalmente. En este sentido, el ayurveda propone tener horarios fijos de comidas. El desayuno y la cena deberían ser livianos en comparación con el almuerzo, que es el momento del día en el que tenemos mayor capacidad intelectual o de trabajo, que coincide con el horario de mayor capacidad digestiva. El fuego interno va de la mano del fuego de la naturaleza, cuando el sol está alto en el firmamento. Además, para una alimentación adecuada, incluí los seis sabores (dulce, salado, agrio, picante, amargo y astringente), ya que cada uno cumple su función. Por ejemplo, los sabores ácido, salado y picante ayudan a encender la capacidad digestiva y estimulan la secreción de ácido gástrico y de saliva en la boca. ¿Cómo sumarlos? Comé un trocito de jengibre fresco, con una pizca de sal y unas gotitas de jugo de limón, y masticalo unos 15 minutos antes de la comida. Así vas a preparar el aparato digestivo para el alimento que viene.
Todos estos hábitos, sumados al ejercicio físico y una buena higiene, van a ayudar con la salud de tu lengua y, en definitiva, de tu cuerpo en general. •
La lengua y los desequilibrios energéticos
En nuestro organismo existen tres bioenergías que se encargan del funcionamiento del cuerpo y la mente. Se llaman vata (encargada del movimiento en general), pitta (se ocupa del metabolismo, la transformación) y kapha (responsable de la estructura, lubricación). Cuando estas tres funcionan adecuadamente hay salud, pero si alguna se desequilibra, aparecen alteraciones.
- Una coloración amarronada de la lengua nos habla de desequilibrio del dosha vata. Se trata de una tendencia a formar gas, digestión irregular, sequedad del cuerpo.
- Un color amarillento nos habla de desequilibrio de pitta, lo que se relaciona con cuadros inflamatorios, indigestión, acidez, reflujo.
- Una coloración blanquecina nos habla de una digestión más enlentecida, pesada, que se asocia a la formación de mucosidad y congestión en el cuerpo.
Ritual matutino
Desde el ayurveda se recomienda toda una rutina previa a la ingesta de alimentos:
- Lavate los dientes con pastas naturales que tengan sabores amargo, picante y astringente, que tienen propiedades antibióticas. Evitá el exceso de flúor y parabenos.
- Raspá tu lengua. Luego podés hacer gárgaras y buches con aceite de sésamo y masajear las encías. Esto ayuda a nutrir la mucosa de la boca, mejora la voz y evita retracción de encías.
- Hacé ejercicio físico acorde a tu capacidad: movimientos aeróbicos, estiramientos y posturas de yoga.
- Practicá técnicas de respiración y meditación para aquietar tu mente.
- Desayuná una vez finalizada esta rutina. Preferentemente, antes de las 10 de la mañana para seguir el ritmo de la naturaleza.
Si querés saber más sobre la rutina Dinacharya, podés tomar el taller "La Rutina del Bienestar" de la Sri Sri Tattva School of Ayurveda. aprendeayurveda.com.ar
Experto consultado: Dr. Harvey José. Médico ayurveda. @jose.a.harvey.
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