Hacer compost en casa: qué cosas tener en cuenta durante el verano

Controlar de la humedad y la temperatura del compost. Durante el verano es fácil que la temperatura del compost suba más allá de los 50º-60º (que es la temperatura recomendada); así que tanto si estás compostando en pila como en una compostera, es recomendable realizar un seguimiento de la temperatura. Si supera los 70º C, los restos orgánicos no se compostan correctamente, dando lugar a una combustión. ¿Cómo resolverlo? Podés reducir la temperatura mojándolo o añadiendo más restos húmedos e incorporándolos con un aireador de compost. También es fundamental la ubicación del compostador y elegir lugares en donde haya sombra o que puedas cubrirlo con alguna tela o mediasombra.

Mantener el equilibrio entre materiales húmedos y secos. La humedad es un punto clave en el proceso de compostaje y por eso en verano tenemos  prestarle especial atención. En este punto la regal es simple: cuanto menos agua, más se seca y más aumenta la temperatura; y por eso lo ideal es mantener siempre un equilibrio entre los materiales secos y húmedos. Por otra parte, el calor nos permite conseguir materiales que pueden secarse de manera natural. ¿Algunos consejos dentro de esto?

- Si tenés la chance, mantené en un contenedor aparte los restos de poda, de césped y las hojas o flores que se secan para aportarlos siempre que añadamos restos húmedos. Si no podés, agregá papel de diario o cartón desmenuzado.

- Si tu compostera o tu pila están al aire libre, no es raro que reciban agua de más debido a las típicas tormentas de verano. El problema con esto es que si está demasiado húmedo, el agua ocupa los espacios donde debería haber aire y -por tanto- el oxígeno que facilita el proceso de compostaje. Esto es lo que genera la aparición de malos olores y que el compost se pudra. Podés evitarlo cubriéndolo con una lona impermeable en caso de lluvia.

Insectos en el compost durante el verano. Las bacterias, insectos, larvas y lombrices, intervienen durante el proceso de compostaje y por eso son parte integral de hacer compost. Sin embargo, durante el verano es más probable la aparición de moscas y mosquitos. Uno de los más habituales es la mosca del vinagre o mosquita de la fruta. Se alimenta de frutas en descomposición Las hembras depositan sus huevos en lugares así, lo que provoca no solo la presencia de moscas, sino de larvas. Es importante no utilizar ningún tipo de insecticida sobre el compost. Podemos alejarlos de allí utilizando una trampa con vinagre de manzana. Y si aparecen larvas o pupas en el compostador, estas no ponen en peligro el compost ni el proceso de compostaje.

Lo mejor es que, para evitar su aparición, cubrir las nuevas aportaciones al compost con materia orgánica seca. Pueden ser hojas de árboles, papel de periódico o restos de la trituradora de jardín