4 consejos de Marie Kondo para ordenar la alacena

Descartá alimentos vencidos o en mal estado:

Vaciá tu alacena, aprovechá para limpiar cajones y estantes y revisá producto por producto para poder identificar los que estén vencidos o en mal estado. Aprovechá la oportunidad para identificar cuáles son tus patrones de compra, de consumo y de almacenamiento. Los que están al límite podés evaluar si podés consumirlos en el plazo restante o preferís donarlos antes de que se venzan.  

Preguntate si te da alegría:

Esta pregunta representa la columna vertical del Método de Marie Kondo, que utiliza el orden como una herramienta para ayudarnos a diseñar la vida que queremos vivir.

¿Cómo saber si un alimento te da alegría? Pensá en el tipo de alimentación que querés tener y en las comidas que podés preparar con los productos que tenés en tu alacena. ¿Sirven para preparar tu comida favorita? ¿Son los ideales para tu plan de alimentación saludable? Es el momento ideal para poder reflexionar sobre tus hábitos de compra y de alimentación y poder hacer ajustes en sintonía con el tipo de alimentación que querés tener.

Guardá los alimentos en forma vertical y por categorías:

Antes de comenzar a guardar lo que quedó en el mismo lugar que estaba; vale la pena aprovechar a observar la alacena vacía y evaluar la ubicación más eficiente para los alimentos. Lo ideal es que al abrir la puerta de la alacena o un cajón sea posible, de un vistazo, poder ver todo lo que tenés. Para esto Marie Kondo recomienda priorizar el guardado en forma vertical, siempre que los paquetes lo permitan, y agrupar los alimentos por sub-categorías.

Las sub-categorías básicas son:

Condimentos 

Alimentos secos.

Carbohidratos secos

Enlatados

Dulces

Pan

Suplementos

Ordená por fecha de vencimiento (lo nuevo que vas comprando siempre va al fondo) y separá los alimentos abiertos de los cerrados. Esta disposición facilita la organización de las compras y el control de las fechas de vencimiento. Reemplazar los paquetes de los alimentos abiertos por frascos de vidrio etiquetados ayuda a que todo se vea más prolijo y más lindo. 

Ocupate también de la heladera:

Tener ordenada la heladera y poder encontrar las cosas a simple vista te va a permitir ahorrar energía. Al igual que con la alacena, descartá lo que está vencido o en mal estado. Y elegí quedarte con los alimentos que hacen un buen aporte a tu alimentación ideal. Organizá en forma vertical y ubicá los productos más altos detrás de los más bajos.

Marie Kondo recomienda mantener la heladera a un 70% de su capacidad para asegurarte tener lugar para guardar los recipientes con las sobras de alguna comida.