El thriller psicológico que deberías mirar si te gustó Saltburn
Antes de Saltburn, Rosamund Pike protagonizó Perdida, un oscuro thriller psicológico dirigido por David Fincher, donde comparte pantalla y matrimonio con Ben Affleck.
1 de marzo de 2024
Rosamund Pike es la protagonista de Perdida. - Créditos: 20th Century Studios
Desde que descubrió las posibilidades de Netflix y el streaming, David Fincher comenzó a alternar sus proyectos cinematográficos y televisivos, al punto de que nos hace desear cada nuevo estreno de la pantalla grande. Después de Red social –para muchos, su mejor película–, el realizador regresó a las fuentes: los thrillers psicológicos cargados de misterio que quedan impregnados en la retina. Primero, con la versión estadounidense de La chica del dragón tatuado, y después, con la adaptación de Perdida, el bestseller de Gillian Flynn.
Rosamund Pike no era una desconocida para los cinéfilos de una década atrás, pero terminó de saltar a la fama gracias al oscuro personaje de Amy Elliott Dunne que, seamos sinceros, no tiene nada que enviarle a la Elspeth Catton de Saltburn. Si te enganchaste con el estreno de Prime Video y necesitás otra dosis de Pike, no dejes de ver este drama de suspenso, que también nos mantiene al borde del asiento.
¿Cuál es la historia?
Nick y Amy en tiempos más felices. - Créditos: 20th Century Studios
Amy Dunne (Pike) desaparece sin dejar rastro el día de su quinto aniversario. A medida que pasan los días y las semanas descubrimos que su matrimonio no es, precisamente, un lecho de rosas, y así todas las sospechas empiezan a recaer sobre el apesadumbrado marido, Nick Dunne (Ben Affleck), que no parece tan preocupado por encontrar a su esposa. El resto nos lo guardamos porque la historia de Flynn está cargada de giros y sorpresas, aunque ella misma se apuró a aclarar que la trama se desvía del material original y no se desarrolla de la misma manera que en papel.
El sexo no tan débil
Amy, un estereotipo revisionado de las femme fatale de la década del ochenta. - Créditos: 20th Century Studios
Amy Dunne es, en parte, heredera de la Alex Forrest (Glenn Close) de Atracción fatal: hermosa, manipuladora y un poco psicópata; un estereotipo revisionado de las femme fatale de la década del ochenta, aunque con un plan vengativo muchísimo más elaborado. Desde la publicación de la novela en 2012, a Flynn se la acusó de ser una de las autoras más misóginas (¿?), como si a las mujeres no se les permitiera ser malvadas protagonistas; un elemento recurrente en sus trabajos, si también sumamos Sharp Objects, adaptada para la miniserie de HBO.
Rosamund asusta a todos por igual en su papel de ‘víctima’ convertida en victimario, tan aburrida de la monotonía de su matrimonio –y de su vida, en general–, que decide ponerle un poco de picante para avivar las cosas, sin sospechar (ni medir) los sorprendentes resultados. Si algo demuestra la dupla Amy-Nick es que los opuestos se atraen, pero también hay un morbo enfermizo que une a la infeliz pareja.
Con la idea fija
Ben Affleck se luce en Perdida. - Créditos: 20th Century Studios
Así como ocurrió con la fallida adaptación de Los hombres que no amaban a las mujeres, Fincher resultó ser el director más idóneo para hacerse cargo de llevar a la pantalla grande el bestseller de Flynn. Este thriller psicológico, que también suma nombres como Neil Patrick Harris, Carrie Coon y Tyler Perry, tiene todos esos elementos que el perfeccionista realizador tanto adora y sabe resaltar: una trama retorcida, personajes aún más retorcidos, la posibilidad de plasmar los desgastes del matrimonio, los problemas financieros, el frenesí de los medios por una exclusiva y, por supuesto, una gran trama policial y llena de suspenso que le dieron tanta buena fama al comienzo de su carrera.
¿Dónde la podés ver?
Podés encontrar Perdida en el catálogo de Netflix y sumarte al fan club de Rosamund Pike.