Estas fueron las 10 mejores películas que estrenaron en 2023: dónde las podés ver

Esta mitad del fenómeno Barbenheimer conquistó a la crítica y al público por partes iguales, y ya se perfila como una de las favoritas de la temporada de premios. La última película de Christopher Nolan nos mete en la intrincada cabecita de J. Robert Oppenheimer (Cillian Murphy), un brillante físico teórico que cambió el destino del mundo al convertirse en el ‘padre de la bomba atómica’. En 1942, la ciencia y los conflictos políticos confluyen en el llamado Proyecto Manhattan: nombre clave que se le dio al desarrollo de esta arma de destrucción masiva. Oppenheimer nunca se arrepintió públicamente por la tragedia que provocó su invención en Hiroshima y Nagasaki, pero cargó con el peso de la culpa y dedicó el resto de su vida a militar en contra la proliferación de armas nucleares.

El cine de Aki Kaurismäki es profundamente humanista, absurdo y sincero como sus personajes. Su oscuro sentido del humor también se hace notar en esta historia romántica ambientada en la ciudad de Helsinki, en un presente muy tangible y alejado de todo idealismo. Ansa (Alma Pöysti) y Holappa (Jussi Vatanen) son dos almas solitarias que se cruzan y conectan en un bar de karaoke, pero la relación –y su camino hacia la felicidad– se ve plagado de numerosos obstáculos que parecen confabular contra ellos. Ambos se la rebuscan para vivir, saltando de un trabajo mal pagado al siguiente. El alcoholismo de Holappa tampoco ayuda, pero el destino hará su magia para darles un final de película.

Cuando se trata de las películas de Wes Anderson, nunca hay términos medios: caemos o no caemos bajo los influjos de los universos mágicos que nos propone el realizador; esta vez, un viaje a la década del cincuenta (su imaginativa y peculiar década del cincuenta), donde un grupo de genios adolescentes y sus familias pasan unos días en la ciudad del título asistiendo a una accidentada convención de ciencias para jóvenes astrónomos. Mucha metatextualidad, una obra dentro de la obra, sucesos extraños y personajes tan bizarros como entrañables, de esos que nunca faltan en las historias de Wes.

La gran ganadora del último Festival de Cannes es un thriller fascinante que no solo nos invita a descubrir la verdad detrás de una muerte dudosa; ante todo, es una examinación de la relación de pareja y cómo la vida de una mujer puede ser diseccionada hasta el último detalle sin ninguna reserva. La película francesa dirigida por Justine Triet arranca cuando el marido de Sandra (Sandra Hüller), una escritora alemana, muere en circunstancias misteriosas. Ella es arrestada en Francia y el único testigo es el hijo casi ciego de la pareja. Sandra debe demostrar su inocencia durante un juicio que intentará exponer la realidad de este matrimonio y sus secretos.

La realizadora coreano-canadiense Celine Song escribe, dirige y debuta en la pantalla grande con este drama romántico centrado en Nora (Greta Lee) y Hae Sung (Teo Yoo), dos amigos de la infancia que supieron ser profundamente unidos, pero se separaron cuando la familia de ella emigró de Corea del Sur a Canadá. Veinte años después se vuelven a juntar en la ciudad de Nueva York, y durante una semana de paseos y remembranza se enfrentan al destino, reflexionando sobre sus vidas, sus anhelos, la relación que no pudo ser y el amor. La película chiquita –¿y perfecta? – que busca colarse en la carrera por el Oscar.

Past lives fue una verdadera sensación en el Festival de Cine de Sundance 2023, pero el debut de A.V. Rockwell se llevó el premio mayor. Otra cineasta debutante que deja todo en la pantalla a partir de la historia de Inez (Teyana Taylor), una joven madre soltera que acaba de salir de la cárcel y vuelve a las calles de Brooklyn para reencontrarse con su pequeño hijo Terry, al cuidado de los servicios sociales. Es 1994 y, en medio de la desesperación, Inez no tiene mejor idea que secuestrar al nen y mudarse al cambiante barrio de Harlem para intentar formar una familia y darle a su hijo todo aquello que ella no tuvo durante su infancia.

El género coming of age nos regaló algunas de las mejores historias adolescentes de la pantalla grande. Relatos llenos de empatía con los que cualquiera se puede identificar, como la adaptación de la novela homónima de Judy Blume, que nos lleva de paseo por la soñada década de 1970. Margaret Simon tiene apenas once años, pero su vida da un vuelco inesperado cuando su familia se muda de la intensa Nueva York a los suburbios de Nueva Jersey. Sus padres no son religiosos –su mamá es cristiana y su papá judío–, pero ella trata de encontrar en la fe algún tipo de guía o consuelo para atravesar su incipiente pubertad, los nuevos amigos, las presiones de grupo, los cambios de su cuerpo y la atracción por el sexo opuesto.

Inspirados en un hecho real, el director Todd Haynes y el guionista Samy Burch redefinen el drama familiar con esta historia que va a dar de qué hablar. Veinte años atrás, Gracie (Julianne Moore) y Joe (Charles Melton) llenaron los titulares con su escandaloso ‘romance’ y su gran disparidad de edad. Hoy, casados y con tres hijos adolescentes, su relación vuelve a ponerse bajo la lupa cuando la actriz Elizabeth Berry (Natalie Portman) llega de visita para hurgar en sus vidas y su presente, mientras investiga para protagonizar una película sobre los hechos del pasados.

En Sundance también se estrenó la última película de Ira Sachs, dramedia romántica que pone en el centro a Tomas (Franz Rogowski), director que acaba de terminar de filmar su última película –Passages– y en medio de los festejos tiene un amorío con Agathe (Adèle Exarchopoulos). Hay que aclarar que Tommy está casado con Martin (Ben Whishaw) y esta fue su primera relación heterosexual. El affair no cae bien en la pareja, cuya relación empieza a resquebrajarse bajo las incertidumbres, los celos e inseguridades de Tomas, cuyo egocentrismo no le permite medir las consecuencias de sus actos y cómo afecta a los demás.

Las chicas también pueden ser irreverentes, así lo demuestra la segunda película de Emma Seligman: una comedia que rompe con todos los estereotipos y se ríe (mucho) y subvierte los lugares comunes del género. PJ (Rachel Sennott) y Josie (Ayo Edebiri) son dos mejores amigas, lesbianas y las losers de la escuela. Todo lo que quieren es conquistar a las chicas de sus sueños –dos porristas– y poder tener relaciones sexuales antes de terminar la secundaria. Su idea: crear un ‘club de la pelea’, mejor dicho, de defensa personal para empoderar a sus compañeras.