Cho Nam-joo publicó su nueva novela, Lo que sabe la señorita Kim

Conocida por ser la autora que impulsó el movimiento #MeToo en Corea del Sur, Cho Nam-joo empezó su carrera como guionista de televisión y dejó este trabajo después de convertirse en mamá. La experiencia de intentar volver al ámbito laboral y no poder fue lo que la inspiró a crear la falso biografía de una mujer coreana que empieza a sufrir problemáticas de salud mental después de ser mamá, historia que publicó bajo el título Kim Ji-young, nacida en 1982 y que se convirtió en un best seller mundial. Después de esa novela, publicó Saha Mansion (2019), Her Name is (2021) y Miss Kim Knows and Other Stories (2023), libro que finalmente es editado y publicado en Argentina bajo el título Lo que sabe la señorita Kim.

Lo que sabe la señorita Kim de Cho Nam-joo es una compilación de cuentos cortos y, cada uno de ellos, está protagonizado por una mujer en una edad completamente diferente. Pero la narrativa brillante de la autora une cada una de estas dos historias con dos elementos demoledores: el primero es el machismo siempre presente y acechando a cada una de las protagonistas (desde en lo laboral hasta en lo familiar y la amistad) y el segundo es que construye la idea de que son intercambiables entre sí, eliminando toda capacidad de individualismo y singularidad. "[Se convierten] todas en una anónima señorita Kim, el apellido más común del país: un personaje fantasmagórico y omnipresente que carga con todas las injusticias que pesan sobre las mujeres en la sociedad contemporánea", explican desde el sitio oficial de Alfaguara, la editorial que publicó el libro en Argentina.

Tanto si conoces la literatura de Cho Nam-joo o si nunca leíste nada de ella, Lo que sabe la señorita Kim es un excelente libro para empezar a meterse la literatura asiática y, más particularmente, en la literatura coreana. Con una narrativa pausada, detallista y a veces asfixiante, sus años como guionista de televisión le dieron herramientas para, también, ser extremadamente visual con sus relatos. Al tratarse de cuentos cortos pero, de alguna manera, unidos, la lectura gana muchísimo dinamismo y tiene la capacidad de envolvernos con una historia tremendamente localista pero que -sin lugar a dudas- tiene el poder universal y de conectarnos con experiencias muy propias.