Ringo. Gloria y muerte: Delfina Chaves nos cuenta todo sobre su personaje en la biopic de este ídolo del boxeo

Delfina Chaves viaja al pasado para personificar a la mujer más importante de Ringo. Gloria y muerte. Dora Raffa de Bonavena es fuerte y determinada, un personaje con convicciones que pelea por tener un lugar significativo en la vida de su esposo. Es su gran consejera y apoyo, pero la fama y carrera deportiva de Ringo contribuyen al fracaso de este matrimonio. A pesar de la separación, el vínculo se mantiene intacto hasta el final: como amigos, confidentes y amantes. Esto nos contó la actriz sobre la serie, Dora y su relación con el ídolo caído en desgracia.

¿Cómo llegaste al proyecto? ¿Qué es lo que más te atrajo al momento de sumarte?

Me pareció súper interesante, sobre todo la historia que se estaba contando y el personaje de Dora. Cuando me avisaron que había quedado seleccionada para el papel, empezamos el trabajo de investigación. La verdad, yo no conocía la historia, conocía muy poco: lo que me había comentado mi familia o las referencias con respecto a las frases más célebres de Oscar, que hoy siguen resonando y son parte de la cultura popular. Así que fue una gran oportunidad para poder conocer su historia, que es interesantísima.

 

¿Qué nos podés contar sobre Dora? ¿Cómo es tu versión del personaje?

A pesar de que Dora es una mujer que existe, que está, hay grandes licencias que nos tomamos con respecto a su personaje. Yo tuve la oportunidad de conocerla y es una mujer que me conmovió muchísimo por su nivel de fortaleza y, al mismo tiempo, por su sensibilidad, su humildad para poder hablar de ciertos temas… y, sobre todo, al abrirme las puertas de su hogar.

Ringo. Gloria y muerte es parte biopic y parte thriller. También es una serie sobre boxeo, que es como un género en sí mismo, muy relacionado con el ascenso y la caída de un ídolo. ¿Cómo te llevás con este tipo de historias?

Me conmueve y me emociona muchísimo, y me acerca a la persona real. Es lo que sucede con estos grandes personajes. Sobre todo en esa época donde había otro tipo de prensa y se los conocía de una forma muy diferente. Esta es una manera de ver cómo fue su vida desde adentro. Me pareció súper interesante la propuesta de contar las dos líneas paralelas: conocer tanto el ascenso como la caída que vino después.

No solo la pelea con [Muhammad] Ali, todo lo que Ringo tuvo que hacer en el camino, cómo se autogestionó; Ringo fue el primer influencer. Su manera de hablar con la prensa… les decía exactamente lo que necesitaba para hacer ruido en los diarios. Él se armó su propio marketing, construyó su propia base e hizo que hablaran de él porque sabía que de esa forma iba a llegar al pueblo. El día que falleció Ringo fue de las primeras multitudes que salieron a la calle a despedir a un ídolo.

A pesar de ser una historia muy masculina, Dora tiene una presencia constante en la vida de Ringo. ¿Cómo definirías esta relación?

No hay que olvidarse de que Ringo pudo hacer todo lo que hizo porque había alguien en la casa que se ocupaba de los chicos. El volvía y tenía una familia que funcionaba, una familia que lo esperaba con ese calor. Ringo siempre la llamaba [a Dora] y ella estaba ahí para escucharlo. Los sacrificios que Dora tuvo que hacer... Ella estaba estudiando abogacía y, de repente, la prioridad pasó a ser Ringo y su carrera. Mientras él viajaba, ella se tenía que quedar con los chicos y hacer malabares para poder criarlos y mantener a flote una casa. Y bancarse todo lo que se bancó.

Cuando uno tiene que interpretar a un personaje de la vida real, sobre todo uno que sigue con vida, existe cierta presión y responsabilidad…

Nunca había personificado, valga la redundancia, a una persona real. Nunca me había pasado. Cuando tomé dimensión de eso y la responsabilidad que eso conlleva… Tuve la oportunidad de conocerla y me conmoví muchísimo. Es una mujer que perdió al padre de sus hijos y a un gran amor, se tuvo que quedar con todo eso y la necesidad de hacer justicia. Fue un honor inmenso. Si bien –esto que decíamos antes– hay muchas licencias en la serie y demás, fue un gran honor y una gran responsabilidad que transité con muchísimo respeto.

¿Cómo fue la experiencia de recrear las décadas del sesenta y setenta? ¿Te divierte esto de “viajar en el tiempo” o preferís las historias más modernas?

Mi familia y mis amigos se ríen porque yo siempre interpreto personas de otra época. Creo que hice más personajes de otra época que personajes modernos. Para mí es súper interesante. Mi parte preferida del trabajo es la investigación previa, conocer, pensar, sumergirme en ese mundo; y hay décadas súper ricas. Argentina tiene una historia de mucho dolor, de mucha tortura, de mucho sacrificio, pero más allá de eso hay mucha historia para contar. Es una oportunidad para poder conocer la historia de Argentina, qué estaba pasando con la economía, cómo estaba  constituida esta familia, qué papel jugaba la madre, qué papel jugaba el padre… armar todo ese mundo es mi parte favorita, me encanta, me despierta mucho la creatividad y la imaginación.

¿Hay algún elemento del vestuario o los peinados que quisiste conservar o adoptar como tendencia?

Me encantaba que a Dorita todos los días le pintaban las uñas de un color distinto. Usar lentes de contacto también fue todo un desafío. Veía las escenas y decía, soy otra persona, o sea, no me reconocía. Es impresionante cómo estaba vestida, cómo tenía el pelo, cómo tenía el flequillo, los ojos, la piel… fue muy interesante verme en ese lugar.

Volviendo a la serie, ¿cómo la definirías?

Primero, decir que es un thriller; es importante saber desde dónde se está contando. Y esto que hablábamos antes del primer influencer, un hombre que se autogestionó su propia carrera, llegó hasta ese lugar no solo por cómo peleaba, por cómo encaraba el deporte, sino por cómo encaraba la vida. Un visionario de su época. Y también toda esa parte de que llegó a lo que siempre soñó, y el intento de volver a ese lugar de una forma desesperada.

¿Cómo te gustaría que esta historia resuene en el público, más allá de los hechos reales y lo ficcional?

Que puedan conocer el trabajo que hizo esta gente desde sus propios medios y de sus recursos para poder llegar hasta donde llegaron, ser visionarios, poder escalar y tener más. Lo ambiciosa que era esta familia pero, sobre todo, que Ringo nunca se olvidó de la parte humana, nunca se olvidó de Argentina, nunca se olvidó del pueblo, nunca se olvidó de dónde venía. Me parece que fue una persona que nunca se olvidó de quién era, cuáles eran sus valores. Fue un tipo que nunca se vendió y cuando se dio cuenta de que lo estaban manejando, ahí fue cuando cometió el más grave error.

Ringo. Gloria y muerte llega a Star+ este viernes 24 de marzo, justo para aprovechar la maratón de fin de semana largo. ¿Ya viste este adelanto cargado de épica y drama?