Predicciones 2025: ¿qué te depara el próximo año según tu signo ascendente?

Tu planeta regente, Marte, va a pasar la primera parte del año volviendo sobre los grados que ya recorrió en 2024: esto significa que es necesario tomar impulso y mirar hacia atrás antes de avanzar, especialmente en temas relacionados con tu pasado, tus orígenes, tu familia, tus hijos y tu vida creativa. Una vez que todo esté bien trabajado y asimilado, el foco cambia y a partir del 16 de junio podés dedicarte a las cuestiones laborales, donde puede haber novedades e inicios. Un año para entrenar la paciencia. El desafío: que la melancolía no te gane.

Desde comienzos de marzo hasta mediados de abril, tu planeta regente Venus va a retrogradar en tu zona de las amistades, los grupos y tu mundo privado, marcando la importancia de balancear la vida social con cierto tiempo a solas. Más allá de eso, el resto del año el movimiento es directo, y la segunda mitad está marcada por la influencia benévola de Júpiter, que desde Cáncer te va a proponer crecer y comunicar tu crecimiento con alegría. Gran año para mudanzas, viajes y tiempo compartido con las personas cercanas. El desafío: la primera mitad del año, que va a ser movidita (pero va a darte muchas satisfacciones).

Sos uno de los signos ascendentes beneficiados por el generoso tránsito de Júpiter, que va a acompañarte hasta el 9 de junio. Es como tener la carta de la suerte: cuando necesites que te salvaguarden, este planeta va al rescate. Eso sí: no tomes esto como excusa, porque va a ser necesario trabajar y mucho. Si hacés las cosas a conciencia durante la primera mitad del año, en la segunda vas a poder disfrutar de muchas recompensas económicas y financieras, además de crecer enormemente en tu autovaloración. El desafío: no confiarse de más.

El 9 de junio, Júpiter, el planeta al que llamamos el benéfico mayor, entra en tu signo Ascendente y te propone una de esas buenas rachas que no se dan todos los días. Más precisamente, esta oportunidad en particular se da cada doce años, así que podés dedicar la primera mitad del año a diseñar exactamente lo que querés ver reflejado. Es tu oportunidad de abocarte a tu crecimiento personal en la forma que quieras: objetivos con respecto a tu salud, tu carrera, tus relaciones, tu economía… Va a requerir mucho trabajo, pero va a reportarte inmensos beneficios. El desafío: puede ser difícil ponerte en primer lugar.

Aunque por pocos días, el año comienza con la retrogradación de Marte en tu signo y eso, en cierta forma, condiciona el tono de los primeros meses. Vas a ver volver temas de la última parte de 2024, y si sabés tomarlos como una oportunidad te darán la chance de corregir lo que te hubiese gustado hacer distinto. Por otra parte, los planetas transpersonales pasan este año a signos de aire y fuego, por lo que tendrán mayor afinidad con tu energía. Es el primer paso de un largo recorrido por tu zona de parejas, socios y dinámicas vinculares, así que prestá especial atención a cómo se desarrolla. El desafío: no mentirte a vos misma cuando ves algo que no te gusta.

En la segunda mitad del año, tu signo ascendente recibe la influencia positiva de Júpiter, el gran benéfico, desde tu zona de los amigos, los grupos y la vida social. También puede reflejar un buen momento para trabajar en equipo, compartir proyectos y generar dinero a lo grande si trabajás de manera independiente o tenés un emprendimiento. Estás comenzando un viaje que te va a llevar a cambiar muchas cosas en tu mundo laboral, y el objetivo es que sea más liviano, llevadero, divertido e innovador. El desafío: no apegarte a lo malo conocido y dejar fuera lo bueno por conocer.

Va a haber un mes y medio, entre comienzos de marzo y mediados de abril, en que tu planeta regente Venus esté en retrogradación en tu zona de la pareja, los hábitos y la vida cotidiana. Esto se hace extensivo también a tu socio o socia, si tenés, y la vida laboral. Si dejás la timidez de lado y te animás a mirar el tema sin tabúes, te puede sorprender lo que te revele. Por otra parte, Júpiter desde Géminis te ayuda en la primera mitad del año a crecer y concretar tus metas, especialmente las de estudio, viajes y contacto con otras culturas. El desafío: animarte para no quedarte con ganas de más.

Te estás acomodando a una perspectiva novedosa y extraña (en el sentido de que nunca la habías vivido con la intensidad con la que llega en 2025): tu planeta regente Plutón se asentó en la energía acuariana a mediados de noviembre y, a pesar de haberte dado varios previews en los meses anteriores, te sorprendió con una mirada más abierta, inclusiva y necesitada de estímulo y diversidad. Esto marca el inicio de un largo viaje en el que vas a revisar a fondo las bases de tu vida, revolucionando lo que te haga falta revolucionar para llegar a ser más libre. El desafío: impedir que el miedo te paralice o te haga apegar a las viejas estructuras.

Tu planeta regente, Júpiter, pasa la primera parte del año en tu zona de parejas, socios y dinámicas vinculares: el otro como tema que te puede ayudar a desarrollarte en lo personal. Hay oportunidades de crecimiento si comprendés la necesidad de dejar de ser una y hacés lugarcito para ser dos. A partir del 9 de junio, tu zona beneficiada es la de lo terapéutico, lo misterioso, la transmutación y la sexualidad. Después de haber puesto la mirada en las relaciones, llega el momento de encontrar las raíces profundas de lo que te pasa. Las sesiones de terapia van a ser más fructíferas que nunca. El desafío: tenerle miedo a descubrir lo que este viaje te puede mostrar.

Después de dos años y medio en las arenosas aguas piscianas, tu planeta regente, Saturno, ingresa el 25 de mayo en Aries, donde se quedará hasta abril de 2028. Es un buen momento para volver la mirada atrás, particularmente a marzo de 2023, y pensar qué se modificó en tu vida en general, pero particularmente en tu estilo de comunicación, en tu manera de pensar y en tus interacciones con tu entorno cercano. Desde Aries, Saturno te propone madurar en temas de tu familia, tu casa, tu pasado y tus raíces. El desafío: no volverte demasiado rígida.

Tus dos planetas regentes cambian de signo en 2025, y no: esta yuxtaposición no es frecuente. De energías introspectivas, sensibles y reservadas, Urano y Saturno pasan a otras extrovertidas, sociales y activas, mucho más afines a tu acuariana búsqueda: la de Géminis y la de Aries, respectivamente. Desde allí, van a impactar en tu zona de la creatividad y de la comunicación, para mostrarte cómo podés inspirar a los demás con tu mensaje y, en el camino, descubrir una versión tuya más auténtica. Esto divide tu año en dos, siendo julio cuando se pone más dinámico. El desafío: no creerte que te las sabés todas.

Tus dos planetas regentes cambian de signo en 2025: Neptuno cambia el 30 de marzo de Piscis a Aries, es decir, de tu zona del Yo a tu área del dinero, los bienes y los valores, y Júpiter pasa a Cáncer el 9 de junio: la oportunidad para reclamar tu voz propia en temas creativos, autoexpresivos y recreativos. Si te dedicás a algo artístico o que ponga en juego tu invención, preparate para ver una hermosa repercusión de lo que hacés en quienes te rodean. Se trata de dejar de lado la timidez y mostrar lo que sos capaz de generar. Neptuno estuvo en tu signo desde 2011, haciendo un arduo y paciente trabajo de disolución del ego más dañino. El desafío: amoldarte a la dinámica agitada de este año.