Urano se pone directo: qué significa y cómo nos impacta su energía

Audaz, osado, desafiante y, desde ese lugar, temido, porque sus fauces hambrientas pueden morder en lugares imprevistos. Su hambre es de conocimiento y novedad.  Es el viento que empuja a las sociedades a avanzar, dejando momentáneamente a un lado su costado emocional y sentimental, y basadas en lo puramente racional, en pos del bien común y de los adelantos. Es el “avanza diez casilleros”, la rebeldía bien entendida, la iluminación que aparece en nuestra mente después de buscar una respuesta durante semanas, tan clara e innegable como inasible nos resultaba antes. 

 

Es feroz y puede ser brillante, pero también cruel. Si se fanatiza con una idea, puede ser inflexible e intolerante. También, tiene una brusquedad que no siempre se corresponde con la situación o el momento, y que puede resultar desestabilizante porque la insumisión sin un objetivo concreto no es constructiva.  Por eso, y por lo poderoso de sus manifestaciones, debe cuidar sus impulsos y regular sus reacciones, sin olvidar nunca que enarbola una bandera colectiva y que el mejor escenario para todos los involucrados es su interés último.

 

Urano llegó al grado 23° de Tauro y ahí comenzó su retrogradación el 23 de agosto de 2023. Como se mueve muy lentamente, llegó al grado 19° de Tauro y es desde ese grado que va a volver a “caminar directo” (aunque, recordemos, la retrogradación es un fenómeno aparente: así es como percibimos el tránsito de este planeta desde la Tierra).

La taurina es una energía de tierra fija. Es decir, está ocupada en temas materiales, como el cuerpo, el dinero, las finanzas, los bienes, las propiedades, las tierras y la naturaleza. Su fijeza hace que busque asegurarlos y consolidarlos y que valore la estabilidad y la seguridad. Entonces, que Urano se esté ocupando de estos temas nos asegura cuestiones inesperadas, como la sequía que asoló a Argentina en las últimas temporadas y los imprevistos climáticos a nivel mundial. Lo mismo sucede, por supuesto, con lo financiero y lo económico.

Aunque no es lo mismo un planeta que un signo, las similitudes entre Urano y la energía que rige, es decir, la de Acuario, son innegables. Acabamos de comenzar la temporada acuariana el sábado 20, y ese mismo día comenzó el tránsito del poderoso Plutón por el mismo signo: que Urano se ponga directo solamente va a darle más énfasis al clima de cambios, rebeldía y espíritu colectivo que se refleja por estos días.

En abril, Júpiter y Urano se encuentran en Tauro: la energía jupiteriana, que todo lo maximiza, ayudará a irradiar aún con más fuerza el uranazo, que sin duda será el clima protagónico del año.

Son los ascendentes Aries y Libra quienes tienen este tránsito en sus casas del dinero: el eje II-VIII.  Mientras tanto, los ascendentes Leo (con casa X en Tauro) pueden cambiar de rumbo en sus metas laborales y de crecimiento profesional, y los Ascendentes Sagitario pueden conocer nuevas oportunidades de trabajo o un cambio dentro del que tienen. 

Los ascendentes Virgo, por su parte, pueden encontrarse con viajes, becas y oportunidades académicas.

Los signos de tierra (Tauro, Virgo y Capricornio) y aquellos con los que Tauro hace sextil (Piscis y Cáncer) son los que resultarán más beneficiados a largo plazo. Por supuesto, no se trata de saltar a la pileta sin verificar antes que haya agua, pero podemos decir que, en general, las innovaciones y modificaciones les van a impactar positivamente.

Recordemos que todos tenemos todas las energías presentes en nuestra vida, independientemente de que algunas sean más preponderantes que otras. Entonces, si no tenés ningún planeta en estos signos, no significa que no vayas a sentir los efectos de Urano: buscando en tu carta natal la casa en la que tenés a Tauro podrás encontrar el área de vida en el que va a impactar. 

Dicho esto, los signos que enfrentarán un desafío serán Leo, Escorpio y Acuario. Esto no significa que no puedan resultar beneficiados, sino simplemente que deberán hacer un trabajo consciente para salir de su zona de confort siempre y cuando valga la pena, porque puede presentarles una buena oportunidad.

La clave para ellos será trazar metas claras y realizables y darse a sostenerlas en el tiempo con una mentalidad práctica, paciente y humilde. Aries, Géminis y Libra sentirán este tránsito de manera más indirecta, de acuerdo a la casa en la que suceda en sus cartas natales.  Por su parte, Acuario, regido por Urano, tendrá la oportunidad de ponerse a trabajar en pos de dar un volantazo, pero siempre teniendo en mente la importancia de pisar sobre seguro.