Redes sociales: qué hacer cuando tu jefe te empieza a seguir
Vivimos en una era pública donde todo lo que publicamos deja una huella digital; por eso te compartimos cuáles son los caminos que podemos tomar y cómo conviene movernos en esta situación.
22 de octubre de 2022
¿Qué hacer si tu jefe te empieza a seguir en redes? - Créditos: Canva.
Hay redes que son espacios de potenciales choques y encuentros entre nuestra vida personal y profesional debido a que los límites son difusos. Ya sabemos que Linkedin es la red laboral por excelencia, para conectar y también para compartir cosas que van más allá de nuestro ser profesional. Desde que estalló la pandemia, el trabajo entró en nuestras casas y las personas empezaron a compartir temas más personales en dicha red.
La red social Instagram se vincula más al ocio, a conectar con amigos o a descubrir cosas nuevas y, de pronto, aparece una notificación que te indica que tu jefe o jefa quiere seguirte. ¿Qué es lo recomendable?, ¿lo aceptamos o no?, ¿cómo conviene movernos en las redes?
¿Es conveniente agregar a tu jefe a tus redes sociales?
Depende de vos. Hay que tener en cuenta que las redes son la vía perfecta para que conozcan qué haces dentro y fuera de la empresa, siempre y cuando, tengas un perfil social activo. Sin embargo, agregar o no a alguien, siempre será una decisión personal.
Qué pasa si lo agregas: lo primero que tenés que tener en cuenta es que existen implicaciones de por medio. Tendrías que cuidar tu imagen personal y profesional, tener cuidado con lo que publicas, lo que decís y cómo lo decís. Y también tener en cuenta qué dejas que los demás compartan sobre vos. Sería conveniente prestar atención que lo que compartas no tenga un conflicto de interés con nuestro rol profesional. Asimismo, si tu jefe te sigue en redes, tenés que saber que se puede limitar lo que este pueda ver de vos.
Qué pasa si no lo agregas: una opción sería darle una explicación a tu jefe. Podrías decirle que esperas que tu perfil sea íntimo y privado, que mejor se pueden seguir en otras redes, como por ejemplo Linkedin. Por otro lado, podés crear otro perfil donde controles tus publicaciones de manera específica, así podrás agregar a gente de tu vida laboral. Aunque, claramente, esto es desgastante ya que da un doble trabajo.
Consejos para cuando decidas (o no) agregar a tu jefe en las redes sociales
1
Poné límites. Lo ideal sería mantener líneas divisorias en las redes sociales entre la vida profesional y la personal. Claramente hay excepciones en vínculos donde hay una amistad y donde hay grupos de trabajo que cofundaron una organización. Aunque no hay que perder de vista que todo lo que uno muestre o comparta puede ser utilizado por parte de los jefes, mediante el poder como fuente de información, estrés o manipulación.
2
Conciencia profesional. Los jefes tendrían que saber que, muy a menudo, los empleados se sienten incómodos al tener que aceptar a un superior en una red social no profesional. Ya que siempre hay riesgos y oportunidades en estas decisiones. Muchas veces los empleados tienen que renunciar a todo lo que publica solo por miedo a que su jefe lo vea, ni exponerse del todo por el riesgo de que accedan a ello.
3
Criterio organizacional. Las organizaciones tendrían que promover políticas que impidan el uso de información personal publicada en las redes sociales para decisiones profesionales o de extorsión por parte de un superior. Es sabido que los empleados son embajadores de la marca empleadora y muchas veces tienen roles de exposición pública, firman acuerdos de ética y de privacidad donde tienen que velar por su imagen pública y cuidar la de la organización. Asimismo, muchas veces en los procesos de selección de personas, las redes sociales de los futuros candidatos a esa vacante puede ser un factor decisorio para que la persona sea elegida o no.
4
Cuidá tu reputación profesional. Preguntarnos si diríamos en la cara de alguien o en una sala llena de personas lo que publicamos de manera online. Por eso la prudencia, la coherencia y la asertividad de lo que se comparte es fundamental. Cuanta más actividad tenemos en las redes, más información estamos publicando sobre lo que hacemos y pensamos, y eso va conformando nuestra imagen externa.
Recordá que todo lo que hagas con tu perfil siempre va a ser tu elección. Las redes son la voz de nuestra marca personal y todo lo que compartimos deja huella.