Los 5 sentidos y su relación con la felicidad: ideas para vivir tu revolución sensorial

Inmersión visual: algunas experiencias de arte inmersivas como la de van Gogh y Frida Kahlo son un éxito mundial. Se enfocan en el estímulo visual, donde toda la información ingresa a través de los ojos. Ahora, en San Telmo podés participar de Alververás, donde gracias a la tecnología del mapping 360° las paredes de un convento cobran vida entre formas y colores.   
Más info: @alververas.

Realidad virtual: el metaverso y la realidad virtual cobran cada vez más fuerza. Nos permiten vivir una serie de cosas, que sin unos Oculus no podríamos conocer. En Buenos Aires está Metapark, un parque de realidad virtual para que vivas experiencias diferentes, sin irte muy lejos. Ideal para ir con amigas. Hay sucursales en CABA, La Plata y Bariloche.
Más info: @metaparkok.

Arte urbano: a veces, para entrenar un poco más el ojo basta con salir a la calle. Graffiti Mundo es una ONG arty que ofrece tours guiados por Colegiales y Palermo, para que puedas aprender todo sobre la larga tradición de arte en el espacio público y la escena de arte urbano local, que nació de ella.
Más info: @graffitimundo.

Tocá fidget toys: La moda de los fidget toys tiene que ver con la estimulación de este sistema. El nombre proviene del inglés y es un verbo que significa "estar inquieto". Son juguetes que nacieron para autorregular el estrés y la ansiedad de los niños, pero cada vez son más usados por los adultos. Estos objetos incitan a la manipulación: se estrujan, presionan, giran, se estiran, procurando un bienestar táctil. A través de presión con los dedos ayudan a prestar atención, bajar la ansiedad, tolerar la frustración o el aburrimiento. Son discretos, para ponerlos en la mochila, el estuche, el bolsillo y vienen de diferentes motivos y colores.

Taller de cerámica: el contacto con la arcilla te relaja y además te permite crear objetos lindísimos. En Fango dan talleres de alfarería y otras técnicas durante todo el año. Desde el primer encuentro se usa el torno y se producen las primeras piezas, que luego se irán retrabajando en las clases. 
Más info: @fangotaller.

Masajes: con un buen masaje, el cortisol (la hormona del estrés) puede caer hasta un 30%, así como también se puede reducir la depresión y mejorar la función inmunológica. En Gaia Spa, podés probar un masaje natural, que se realiza con cañas, piedras y aceite de coco. 
Más info: www.gaiaspa.com.ar 

Focalización hot: renová tu experiencia sexual con el sentido del tacto. Esta focalización tiene tres fases y todas se componen de caricias. En la primera, serán en todo el cuerpo, evitando las zonas obvias: genitales y pechos. En la segunda, se incorporan esas zonas, pero con la misma dedicación o energía que el resto del cuerpo. Y en la última, sí, las caricias se enfocan en las áreas más hot. ¡A explorar!

Degustación en pasos: A Fuego Fuerte es el restaurante a puertas cerradas de 17 pasos que se convirtió en uno de los mejores de Buenos Aires, según Trip Advisor. Liderado por el chef Julio Lunghi, los comensales solo tienen una consigna y es dejarse llevar. Si bien se destacan las presentaciones de los platos, originales y sorprendentes (a la vista, tal vez no entendés bien lo que vas a comer), el verdadero viaje se da al probar sus nuevas mezclas de texturas y sabores. Es una experiencia que vale la pena. Para reservar mesa, podés entrar acá: afuegofuerte.meitre.com.

Gustos exóticos: podés ir a Alchemy, la heladería con gustos exóticos de Buenos Aires, y probar helados de remolacha, de calabaza y hasta de roquefort y otros quesos. Animate a que tus papilas gustativas exploten con nuevos sabores.  
Más info: @alchemy.ba

Cocina experimental: otra idea para experimentar con el gusto es hacer un taller de cocina. Cocina escondida propone un espacio de encuentros y experiencias para disfrutar de los buenos momentos de la vida. Podés aprender y degustar comida mexicana, tailandesa, italiana o adentrarte en los sabores regionales de nuestro país.
Más info: @cocina.escondida.

Tour de café: si sos fanática del café, podés hacer un recorrido turístico por cafeterías de especialidad. Desde bebidas clásicas a base de espresso, cócteles a base de café y postres, hasta innovaciones en café fríos y métodos no tradicionales de hacer y tomar café. Para explotar el gusto y conocer la historia detrás de cada taza de café. 
Más info: airbnb.com.ar/experiences.

Teatro ciego: es una experiencia en la que se bloquea el sentido de la vista para elevar los otros, especialmente el del oído. Con actores no-videntes, cuentan historias en absoluta oscuridad, y te invitan a una nueva percepción de la realidad. Vas a salir a pura inspiración de esta nueva experiencia. 
Más info: teatrociego.org. 
 

Sanación sonora: en este tipo de terapia, se utiliza la resonancia del sonido de un instrumento o varios, con el objetivo de equilibrar el cuerpo físico y los cuerpos sutiles a través de la vibración que emiten. Es una suerte de “masaje interno”, con el que todos los órganos del cuerpo reaccionan al instrumento y pueden producir una inesperada transformación interna.
Más info: @sol.wais.

Música en la oscuridad: para quienes disfrutan de la música en su máxima expresión, el Konex acerca este ciclo que permite vibrar con los mejores discos de Pink Floyd, The Beatles, Soda Stereo, Queen o Daft Punk, en total oscuridad para exacerbar el oído. Hay funciones todas las semanas.
Más info: cckonex.org.

Entrená la escucha activa:  En el episodio "Escucha activa" del podcast Milpuntocero, Den Muchnik (colaboradora de OHLALÁ!) entrevista a Iaru Trujillo, psicóloga y Health Coach. Iaru nos cuenta que no es lo mismo oír que escuchar. ¿Cuál es la diferencia? Oír es el acto biológico de percibir auditivamente sonidos. Escuchar, en cambio, es percibir e interpretar. Cuando escuchamos, percibimos más que palabras: por ejemplo, la emoción con que las expresa el otro. Para empezar a escuchar mejor es importante comenzar por nosotras mismas. Todos aplicamos nuestra impronta a lo que escuchamos, desde tu historia, tus vivencias y tu mirada del mundo. Y saber esto es fundamental para conectar con el otro. Podés escucharlo acá.

Hacé una experiencia olfativa lúdica: Melina Napolitano es creativa olfativa. Su fuerte pasión por oler fue el motor para la creación de su propio emprendimiento: Smell Me. Busca despertar la creatividad sensorial a través de experiencias olfativas lúdicas e interactivas. Su objetivo es convocar siempre la conexión emocional de los participantes. Realiza desde workshops creativos para individuos hasta instalaciones inmersivas para marcas. "Cada aroma puede tener una identidad en nuestra vida", señala y nos invita a fortalecer este sentido. 

Más info: @ smellmexperience.

Cata de vinos: ¿sabías que un vino puede tener entre 12 y 40 olores diferentes aproximadamente? Para aprender a reconocer diferentes aromas y desarrollar tu olfato, el Centro Argentino de Vinos y Espirituosos ofrece cursos para quienes que quieran iniciarse en el mundo del vino.
Más info: @cavearg.

Nariz detective: un lindo juego para realizar en familia es preparar distintos envases con aromas fuertes e identificables (pueden ser especias, flores, algodón con algún perfume) y, con los ojos cerrados, buscar identificar cada uno. El objetivo es resaltar la importancia del olfato mediante la ausencia de la vista y favorecer el trabajo en equipo, de forma lúdica.

Escritura sensorial: si los aromas nos conectan con la memoria, un buen ejercicio de escritura es recuperar esos olores de la infancia y bajarlos a palabras. Con cuaderno y lapicera en mano, el olfato es la puerta de entrada a la creatividad. ¿A qué te hace acordar el perfume del chicle Bubaloo? ¿Qué recuerdos te traen los jazmines? ¿Y el olorcito del pan recién salido del horno?