Los 10 jardines botánicos más impactantes del mundo
Plantas, árboles y muchas flores. Los jardínes botánicos son una atracción turística que no te podés perder.
24 de octubre de 2022
El Jardín Botánico de Montreal es uno de los más impresionantes del mundo. - Créditos: Flickr.
La mejor parte de viajar es conocer lo típico del lugar, eso incluye la comida, el paisaje y, por qué no, la flora local. Una muy buena opción para disfrutar de la naturaleza es visitar los espacios verdes de la región en la que estés. Alrededor del mundo, hay jardines botánicos bellísimos que vale la pena conocer, en esta nota te compartimos nuestro top 10.
1. Jardín Botánico de Montreal, Canadá
Uno de los jardínes botánicos más lindos del mundo se encuentra en Montreal, una de las ciudades más grandes de Canadá. El atractivo de este parque son sus 11 invernaderos en los que hay una gran variedad de especies. También tiene sectores temáticos dedicados a las plantas nativas, las rosas, un jardín chino y otro japonés. Si vas a visitar este lugar mágico te recomendamos hacerlo entre septiembre y octubre, ya que en esa fecha se celebra el festival de las linternas.
El festival de las linternas se celebra en el otoño canadiense - Créditos: Wikipedia Commons
2. Jardín Botánico de Singapur y Gardens by the Bay
Para los amantes de la naturaleza y la tecnología, Singapur es una excelente opción de vacaciones. La ciudad estado tiene dos parques bellisimos para visitar: El jardín botánico y Gardens by the Bay. El primero es un recorrido por distintos senderos con plantas tropicales y un sector dedicado a más de 3.000 especies de orquídeas. En cuanto a Gardens by the Bay, allí paseas por pasarelas rodeadas de paneles verticales llenos de vegetación y una fuente que cae desde el techo. De noche el jardín también es alucinante, toda la zona se ilumina y sentís que estás dentro de un cuento de hadas.
Gardens by the Bay visto desde las alturas - Créditos: @gardensbythebay
3. Royal Botanic Gardens, Inglaterra
El Royal Botanic Gardens, más conocido como Jardín de Kew, se encuentra al sur de la capital inglesa y tiene mucho que ofrecer. Lo que recomendamos no perderte son la Casa de la Palmera y la Casa templada, dos invernaderos de estilo victoriano dedicados a las plantas exóticas. También vale la pena visitar el sector de las rosas y el de las plantas carnívoras. Frutilla del postre: sacate una selfie con la pagoda (torre de arquitectura china) de fondo.
La Casa de la palmera es un invernadero de estilo victoriano que aloja plantas exóticas - Créditos: Pexels
4. Jardín Botánico Culiacán, México
En las diez hectáreas que pertenecen al Jardín Botánico de Culiacán se encuentran más de mil especies de plantas, de las cuales un tercio está en peligro de extinción. Además del paisaje lleno de verde y las distintas aves que vuelan por ahí, los visitantes pueden disfrutar de un recorrido que incluye obras de arte contemporáneas y edificios que se integran con la naturaleza.
Jardín botánico de Culiacán - Créditos: Wikipedia Commons
5. Jardín tropical Nong Nooch, Tailandia
Nong Nooch es una de las paradas obligatorias para los turistas que visitan Tailandia. Pasear por ahí es meterte en caminos llenos de color y formas geométricas. Lo más atrayente del parque es el jardín tropical con esculturas y arreglos florales que cambian cada temporada. También hay otros sectores temáticos y un pequeño zoológico con animales de la zona.
Jardín botánico Nong Noch - Créditos: Wikipedia Commons
6. Jardín Botánico de Río de Janeiro, Brasil
Si andas por Río de Janeiro tenés que reservarte unas horas para recorrer el jardín botánico. Por este parque se pueden ver árboles centenarios, flores exóticas y nenúfares gigantes del Amazonas. Además, encontrás varios edificios históricos que te transportan a la época colonial. También podés aprovechar para sacarte una foto en su famosa pasarela de palmeras imperiales.
Jardín Botánico de Río de Janeiro - Créditos: Flickr
7. Jardín botánico de Koishikawa, Japón
El Jardín botánico de Koishikawa es uno de los más antiguos del mundo. Fundado en 1684 para cultivar plantas medicinales, hoy es una de las mayores atracciones de Tokio. Ahí se preservan miles de especies que se esparcen por el paisaje típico de un jardín japonés. Las mejores épocas para visitarlo son primavera y otoño ya que es cuando el parque está más colorido. ¿Lo que no te podés perder? subir al mirador y quedarte horas admirando los cerezos en flor.
Koishikawa Botanical Garden - Créditos: Wikipedia Commons
8. Jardín botánico Villa d’Este, Italia
Si el paisajismo te atrae tanto como la arquitectura, el Jardín botánico Villa d’Este es tu paraíso en la tierra. Ubicado en Tívoli, a menos de una hora de viaje desde Roma, en este parque encontrarás edificios de fachadas lujosas, esculturas renacentistas y mucho verde. ¿Lo mejor? está lleno de cascadas y fuentes que te roban el aliento. Lo ideal es ir con tiempo porque el espacio es enorme y hay muchas atracciones para disfrutar.
Jardín botánico Villa d’Este - Créditos: Flickr
9. Jardín Botánico de Kirstenbosch, Sudáfrica
En las 528 hectáreas que forman parte del Jardín Botánico de Kirstenbosch está la colección de plantas autóctonas más grande de África. Por sus laderas se pueden ver miles de especies, incluida la protea (flor nacional de Sudáfrica), y varios animales típicos de la zona. Para recorrerlo podés elegir entre varios senderos, uno de los favoritos del público es Boomslang Canopy Trail, una pasarela que está a la altura de la copa de los árboles.
Jardín Botánico de Kirstenbosch, Sudáfrica - Créditos: Wikipedia Commons
10. Jardín botánico Carlos Thays, Argentina
¿Quién dijo que el pasto es más verde del otro lado? El jardín botánico de Buenos Aires no tiene nada que envidiarle a los que están en otros países. Ubicado en el corazón de Palermo, las siete hectáreas que conforman el parque son un refugio del ruido y el movimiento de la ciudad. Una vez que pasas el portón de hierro te encontrás con caminos de piedras rojas en los que se ven plantas de todas partes del mundo, invernaderos, esculturas y un estanque. Es el paseo perfecto para los que quieren escapar del caos porteño y conectar con la naturaleza.
La casona es el edificio central del jardín, allí vivió el paisajista Carlos Thays - Créditos: @buenosairesjardin