Carrie Bradshaw rescata uno de los vestidos más icónicos de Sex and the City

Hay momentos de la historia del cine y de las series que no vamos a olvidar jamás. Ojalá pudiéramos decir que nos quedó grabada la escena en la que Carrie Bradshaw elegía entre un montón, el vestido increíble de Vivienne Westwood junto a sus tres amigas, vestido que según Carrie "podría sacarle una lágrima a la más escéptica de todas las mujeres".

Pero no: lo que nos quedó para siempre en la memoria fue la escena en la que envuelta en la furia de una novia que fue plantada en el altar, le revolea su ramo a Mr Big que, nervioso, no llegó a tiempo para la boda.  El amor después del amor quiso que finalmente se casara con un traje que aunque le quedaba divino, no era de ningún diseñador de renombre, en una ceremonia íntima que se celebró en una oficina newyorkina.