10 cosas que tenés que hacer sí o sí si viajás a Nueva York

Si vas en temporada cálida, es un clásico comprarte un bagel con salmón en Zabar’s y descalzarte sobre el pasto del espacio verde más grande de NY. Frente al parque hay otras opciones para el pícnic. Mi elegido: el patio de comida Whole Foods, un súper orgánico en Columbus Circle.

Hay muchas opciones cool que van a encontrar en la guía, pero un clásico más turístico puede ser subir al Sixty Bar, Rainbow Room, en el 65° piso, que tiene la misma vista que en el mirador del Rockefeller. La entrada es por 30th Rockefeller Center St.

Esta zona con los mejores grafitis crece día a día. Almorzá riquísimo en Grimaldi’s Pizza y usalo de punto de partida para perderte por este barrio que no puede más de la onda.

En Williamsburg encontrás los mejores lugares vintage, buenos bares y, definitivamente, los mejores brunchs. El mejor plan es llegar en ferry desde Dumbo y caminar por Bedford y alrededores. El mejor lugar de brunch de NY: Sunday in Brooklyn, que abre todos los días y tiene riquísimas avocado toasts, carrot bread y pancakes. Además, sus cocktails son ricos y súper instagrameables.

Una tarea más que difícil es recomendar qué y cuál. Depende del idioma, los gustos musicales, tiempos y presupuestos. Si te da lo mismo cualquiera, bajo las escaleras rojas de Times Square podés conseguir tickets con descuento en el día.

Correr o caminar... o llevarte algo rico que comer en Chelsea Market y sentarte a ver el río y la gente pasar. Es un parque aéreo construido en lo que eran las vías del ferrocarril abandonado, en donde montan obras artísticas al aire libre.

Si buscás gangas, caminá por Broadway desde Houston hasta Canal St.; y si preferís diseño, metete en las callecitas por adentro, entre West Broadway (ojo, que es otra calle) y Lafayette. ¡Hay de todo! Además, podés aprovechar y comer en La Esquina.

Si vas con poco tiempo y vas a elegir un solo mirador, este es mi preferido. Es el más alto (sin vidrio) y con 360° de visión panorámica. Subí hasta un piso más arriba de lo que te deja el ascensor. Si podés, andá al atardecer así lo ves de día y de noche.

La entrada a la terraza del Met está un poquito escondida, pero cuando la descubras, ¡no vas a poder creer esa vista!. No la tenés desde ningún otro mirador, porque la perspectiva es única desde el Central Park hacia la ciudad.

Hacelo desde Brooklyn hacia Manhattan porque cambia 100% la visión. Puede ser el cierre después de un día completo en Brooklyn. El cruce a pie te lleva aproximadamente media hora, sin contar las veces que vas a parar por las fotos.

Fiestas + NYC es una combinación muy mágica. La ciudad se llena de gente y la nieve lo hace todo más lindo.

Los mercados navideños son ideales para encontrar ese detalle que hace la diferencia. Además, si te gusta cocinar o preparar canastas, vas a volverte loca con la oferta de ingredientes de estación para el banquete de Nochebuena.

Fotos con Santa. La tienda de decoración ABC CARPET & HOME suele armar un photo opportunity para sacarte fotos temáticas, y en el jardín de invierno del World Financial Center hay un escenario fantástico con elfos y renos. Suele haber filas y cupos limitados, por lo que te recomiendo que chequees horarios en las webs y vayas tranquila a buscar el souvenir.