Test de personalidad: el símbolo que elijas revelará si sos una persona amable

La prueba es sencilla: solo tenés que ver los símbolos presentados a continuación, elegir el que más llame tu atención y buscar los resultados. Los mismos te van a revelar no solo aspectos de tu carácter, sino también de cómo te vinculás con otras personas.

Si elegiste el símbolo del infinito…

Sos una persona con un alto nivel de amabilidad, siempre dispuesta a ayudar a quien sea que lo necesite, sin importar si es una persona cercana o no. Tu espíritu cálido y empático te convierte en un amigo confiable y compañero y quienes te conocen disfrutan a pleno de compartir tiempo con vos, ya que logras construir un ambiente de comodidad y distención. Tu compasión y generosidad son admirables y son justamente los rasgos que hacen que quienes te rodean se vean inspirados a ser mejores personas.

Si elegiste el ojo…

Sos una persona amable, pero tendes a ser más determinante al momento de marcar los límites. No sos de personalidad abierta y extremadamente amigable, ya que entre tus prioridades se encuentra el cuidar tus espacios, tu tranquilidad y tu bienestar, aunque no dudas al momento de darle una mano a alguien si precisa tu apoyo. En ese sentido, te destacas por tu capacidad de mantener el equilibrio ayudando a los demás sin sacrificar tu bienestar o tu salud mental en el proceso.

Si elegiste la pluma…

De forma casi segura se puede afirmar que la amabilidad no está entre tus principales virtudes. Esto no significa que seas una persona fría o insensible, sino que la empatía hacia los demás no es una de tus fortalezas. Esto se debe a tu ambición y tu determinación a la hora de trabajar en tu desarrollo personal y profesional, ya que a veces esta misma pasión es la que te lleva a desatender las necesidades de quienes te rodean. Lo más importante es que no te falta empatía y podés entrenarla intentando ser más atento hacia las necesidades emocionales de tus seres queridos.

Si elegiste el león...

Tu sensibilidad hacia las necesidades y emociones de los demás es bastante baja. Debido a tu personalidad práctica y analítica, tendes a pasar por alto las pequeñas señales que los demás emiten cuando necesitan ayuda o apoyo. Es por eso que se te dificulta actuar con amabilidad en algunas situaciones. Esto no quiere decir que tengas malas intenciones o que no te importe lo que le sucede a los demás, pero si quisieras modificar este aspecto de tu persona, lo recomendable es que trabajes y entrenes la escucha activa y el interés genuino por las emociones de tus seres queridos, para así poder desarrollar tu lado más empático.