Ola de calor: ¿cómo cuidar a los más chicos?

Para responder a estas preguntas OHLALÁ! consultó a las médicas pediatras Mónica Giraudo (MG) y Mabel Carosella (MC). Esto nos respondieron.

-¿Qué es el golpe de calor?

-(MG): Estamos hablando del golpe de calor en estos días, que se da por un exceso de calor en el cuerpo. Se da por estar expuestos a las altas temperaturas o hacer esfuerzos físicos en medio de estas temperaturas elevadas.

-(MC): La ola de calor es un período de tiempo sostenido, de al menos tres días consecutivos, con temperaturas mucho más altas de las habituales para una época del año. Ante una ola de calor aumentan las posibilidades de la insolación, frecuentemente llamada “golpe de calor”.

-¿Los niños y niñas son población de riesgo?

-(MG): Sí, es más frecuente, afecta más a niños pequeños. También, a adultos mayores y personas con discapacidad física.

-(MC): Si bien la situación es molesta para la mayoría de las personas, ciertos grupos son mucho más propensos a sufrir algunas complicaciones como la deshidratación y, entre ellos, se encuentran los bebés y niños y niñas menores de 5 años, quienes muchas veces, al no poder comunicar su malestar, lo hacen en forma de llanto “inexplicable”.

-¿Cómo se lo trata?

(MG): -En la población de riesgo se trata de una urgencia extrema. Puede darse en 1 a 6 horas y llega a causar la muerte. Por eso es muy importante detectarlo a tiempo y prevenirlo.

(MC): -Es muy importante adelantarse a las posibles consecuencias, y ofrecer líquidos para la hidratación antes de que aparezca la sed.

En bebés menores de seis meses la hidratación será sólo con lactancia materna o fórmula y a los mayores puede ofrecerse agua segura, ya sea potable o mineral fresca en forma frecuente.

Las comidas podrán ser frescas y no muy abundantes. Es muy importante el consumo de frutas y verduras que también aportan agua.

En lo posible se recomienda evitar salir de la casa durante las horas de mayor calor (entre las 11 y 17) y reducir la actividad física al sol, prefiriendo sombra o lugares acondicionados.

El uso de ropa adecuada (liviana, de algodón, que no sea ajustada al cuerpo) y gorro para proteger a la cabeza del sol son medidas muy importantes.

Refrescar el cuerpo con baños o mojarlos con frecuencia ayuda a bajar la temperatura corporal.

-¿Cuáles son los síntomas más frecuentes?

(MG): -Temperatura alta (39 o más), piel roja, caliente, seca, agitación, dolor de cabeza, vértigo, desorientación, delirio, confusión con pérdida de conocimiento y hasta convulsiones.

Ante cualquiera de estos síntomas es importante llevarlo a un centro de emergencias. Hay que poner al niño o niña en un lugar fresco, ventilado, sacarle la ropa y refrescarlo tratando de mojarlo en agua fría.

Es importante prevenir. En estos días: mucha agua, evitar estar al sol o al aire libre en los horarios de 10 a 16, usar ropa clara y fresca, elegir comidas como frutas y verduras, evitar comidas copiosas, mojarse frecuentemente y tratar de mantenerse resguardado del calor.

Las bebidas lo mejor es darles agua a los chicos. Evitar bebidas con cafeína o azúcar en exceso. Y lo recomendable es tomar bebidas frescas, pero no heladas. Tomar más líquido del habitual y más sal de lo habitual.

A los bebés chiquitos, ofrecerles el pecho mucho más seguido que en los días normales. Bañarlos, mojarles el cuerpo y hacer actividades tranquilas. Si van al sol: protección solar, gorro y siempre garantizar una sombra en el lugar adonde se vaya.

Si hay presencia de fiebre no hay que dar medicamentos antifebriles, sino bajar la temperatura corporal. Esa es la prioridad.

-(MC): En un niño o niña que ha sufrido insolación notaremos aumento de la temperatura corporal a más de 38°, piel roja, boca seca, alteración del nivel de la conciencia con decaimiento, somnolencia o irritabilidad, agitación y aumento de la frecuencia cardíaca, sudoración, dolor de cabeza, náuseas y vómitos.

-¿Cómo diferenciarlo de la fiebre por Covid?

(MG): -Hay que diferenciarlo del agotamiento por calor, de la insolación y también de la fiebre por Covid. No es tan sencillo porque con la variante ómicron hay más casos de niños con la enfermedad. Los síntomas son fiebre alta dos o tres días, vómitos, cefaleas, mareos, dolor de cuerpo. Son síntomas muy parecidos. Es muy difícil diferenciarlo en esta época, sobre todo si hay otros casos en la familia, por eso lo que conviene es tomar medidas preventivas en ambos casos. Lo primero que tenemos que descartar es el golpe de calor y tratar de prevenirlo siempre y si eso se descarta podemos ver la posibilidad de Covid.

En el caso de fiebre por Covid sí se trata con antitérmicos. Pueden ayudar los medios físicos, pero sobre todo la consulta médica para ver cómo se sigue.

El golpe de calor es muy abrupto y puede llevar a la muerte rápidamente. La insolación puede dar un malestar por horas o días. El Covid se controla con antitérmicos.

Lo importante estas semanas es intensificar la prevención.

(MC): Todos los síntomas del golpe de calor son muy difíciles de diferenciar de las manifestaciones clínicas que produce la enfermedad Covid-19 en niños, niñas o bebés.

Si se sospecha que se trata de una insolación, además de comunicarse con sus pediatras, se recomienda dejar al niño en un lugar fresco y a la sombra, quitarle el exceso de ropa, enfriar el cuerpo con agua fresca o paños y si está consciente ofrecerle agua para hidratarlo.

Estar atentos a que el malestar puede durar varios días y la prevención es lo más importante.