Seguro viste nuestros posteos en redes pidiéndoles a las rosarinas que nos recomendaran lugares para visitar en esta increíble ciudad. Ellas se re coparon y nos tiraron un montón de datos con los que armamos la hoja de ruta de este recorrido, que fue llevado a cabo de la mano de otras dos rosarinas (periodista y fotógrafa) que sumaron su mirada local.
Y además convocamos a dos de las blogueras de moda más importantes de Rosario, que nos aportaron su data fashion. Así que, si tenés ganas de escaparte un fin de semana y hacer un paseo urbano pero a la vez tranquilo, confiá en que nuestra selección de lugares fue hecha ¡con mucho amor!
Lo mejor de esta ciudad es que no se necesita auto, porque la mayoría de los puntos de interés están cerca y se puede recorrer caminando. Eso ya te obliga a bajar un cambio y moverte a tu propio ritmo. Además, está de cara al río y tiene muchos parques; los rosarinos tienen la proporción perfecta de verde y gris. ¡Te invitamos a enamorarte de Rosario!
Mercado del Patio: para pasear y comprar
El mercado del patio es uno de los lugares más nuevos de Rosario - Créditos: PECU CARBALLADA
Este mercado minorista abrió sus puertas hace poco más de un mes. Aloja a más de cuarenta productores locales que ofrecen desde verduras orgánicas y pastas hasta vinos, miel y flores. Abre sus puertas de martes a domingo, de 9 a 21.
Lo mejor: los alfajores santafesinos caseros del bar De Mi Tierra.
El dato: al lado hay un parque para armar un pícnic con lo que compres.
Cuánto: para almorzar, desde $60; los alfajores cuestan $75 (6 unid.).
El punto de encuentro tradicional de los rosarinos - Créditos: PECU CARBALLADA
No podés pasar por Rosario y no tomarte un helado de San Remo. Esta es una de las heladerías más tradicionales de la ciudad. Abrió en 1973 y hoy sigue siendo atendida por sus dueños, que fabrican los helados ahí mismo. Los gustos son riquísimos y es bien de barrio. Además, es famosa porque te bañan el cucurucho con chocolate gratis.
El sabor que más sale: GranizadoMapsanremo, que está hecho con pasta de bombones Ferrero Rocher.
El dato: cada diciembre, San Remo participa de la fiesta del helado artesanal que se hace en la ciudad.
Al final del famoso Boulevard Oroño y en el corazón del histórico barrio de Pichincha está el Mercado Retro de Rosario. Tocadiscos, vinilos, juguetes, anteojos, carteras, camperas, jeans, máquinas de escribir y cámaras fotográficas son algunos de los objetos antiguos que podés encontrar ahí. Pegada a este mercado, está la Feria de Artesanos del Boulevard. Ambos lugares están abiertos sábados, domingos y feriados, de 10 a 19, siempre que no llueva.
Lo mejor: los precios de la ropa y la variedad. Además, si estás buscando algo en particular, los puesteros te lo consiguen.
El dato: para comprar, es mejor los sábados porque está el stock completo. Para pasear los domingos, hay más movimiento.
Parada obligada: el puestito de Chipá Porá que conecta la feria retro con la de artesanos. Son los mejores de la ciudad.
Cuánto: la ropa, desde $50. Los chipás, $60 la media docena.
Para comer y pasar un lindo rato a la noche - Créditos: PECU CARBALLADA
La mejor opción para salir a tomar algo es “Basqui”, como le dicen los locales. El bar tributo al artista Jean-Michel Basquiat la rompe. La deco tiene mucha onda: hay neones, grafitis y arte por todos lados. Además hay juegos de arcade y un sótano donde tocan bandas. Para comer, hay tapas, sándwiches y una hamburguesa veggie exquisita.
Lo mejor: las porciones son grandes, la coctelería es rica; la música, bien arriba, y el lugar, cancherísimo.
El dato: los sábados tienen un ciclo en el que tocan distintas mujeres DJ de la ciudad. Todos los meses hay una muestra de arte diferente.
Cuánto: hamburguesa veggie, $150; la pinta de cerveza, $80.
Objetos de deco exquisitos en Las Patronas - Créditos: PECU CARBALLADA
Moni y Andy son amigas desde hace más de 40 años y para celebrarlo decidieron abrir un local de decoración en una casona antigua de Rosario. El lugar es hermoso y los objetos que venden también. Podés encontrar muebles nuevos y restaurados, lámparas muy copadas y todo lo que se te ocurra para hacer de tu casa un hogar.
Lo mejor: las dueñas son súper simpáticas y te tratan como a una reina. También tienen un patio divino con un Buda gigante y unos silloncitos para descansar las piernas.
El dato: hacen cosas a pedido, según lo que necesite cada cliente.
Cuánto: las lámparas, desde $1500; los muebles, desde $1900.
Este bar tiene toda la onda y una terraza espectacular para aprovechar el sol. Además, está muy bien ubicado, porque queda cerca del centro y a una cuadra del río. La carta es variada y cuenta con buenas tablas para compartir con amigas, muchas ensaladas, jugos naturales, sándwiches y también pescados de río.
Lo mejor: la ensalada de alcauciles rebozados, que viene con hojas verdes, champiñones, tomates asados, tiras de zanahorias, chips de ajo y camote y mayonesa verde. ¡Es exquisita!
El dato: los lunes hay happy hour de mujeres, tiene menú ejecutivo y opciones sin gluten y es pet-friendly.
Cuánto: las ensaladas arrancan en $165. Limonada a $30.
Si te gustan los edificios antiguos, no te pierdas esta galería peatonal. Tiene dos entradas: Córdoba 954 y Santa Fe 955. Ahí vas a encontrar desde arquitectos, artesanos y escritores hasta luthiers y tatuadores. Está ahí nomás del histórico cine El Cairo, donde pasan pelis independientes (Santa Fe 1120).
Moka: para tomar el té
Leti es la primera barista de la ciudad y la dueña de este barcito esquinero del centro rosarino. Está puesto en una calle llena de árboles, con muchas plantas colgantes, y tiene un cartel en la entrada en el que siempre hay alguna frase escrita que se encarga de robarte una sonrisa. La atmósfera es muy acogedora y las mesitas son tan lindas que se vuelve prácticamente imposible no querer sentarte a tomar un café, disfrutar de una buena torta y hablar hasta por los codos con tus amigas.
Lo mejor: la pastelería, que es toda casera. Se destacan la cheesecake de maracuyá y los rolls de canela, que son una delicia.
El dato: los sábados tienen un menú especial para festejar el fin de semana. El bar es bike-friendly.
Cuánto: las meriendas arrancan en $70 e incluyen café.
Caro y Manu son los dueños de LA librería rosarina. Ella es del palo del arte y él viene de una familia de libreros, y juntos tienen la mejor selección de libros-objeto. También encontrás vinilos, obras de arte y juguetes muy originales.
Lo mejor: dentro de la librería hay un espacio de trabajo colectivo. Los que lo atienden tienen toda la onda, los precios son muy accesibles y las impresiones son gratis.
El dato: todos los jueves se reúnen a editar Wikipedia. Además, cuentan con una agenda de eventos que van desde talleres, expos de arte y jams de poesía hasta cosas más bizarras (hace poco le hicieron un funeral a la ex revista rosarina Atypica).
Cuánto: libros, hay de todos los precios. El turno de tres horas de coworking cuesta $55.
Florencia Virgilio, 31 años, abogada y mamá de Feli y Juani: “Lo que más me copa de Rosario es que, si bien es una ciudad chica, tiene muchas opciones, sobre todo para ir con chicos. Los domingos está la calle recreativa en Boulevard Oroño, donde se puede andar en bicicleta. Además, todo queda cerca y hay muchos espacios verdes para disfrutar”.
Créditos: PECU CARBALLADA
Carmen Asenjo , 29 años, Lic. en Administración de empresas y bloguera: “Me encanta cómo se mezclan los paisajes naturales con los urbanos, salir de la oficina y relajarme unos minutos enfrente del río. Es una ciudad con un tamaño ideal, suficientemente grande para desarrollarse en cualquier aspecto y suficientemente chica para sentirse en casa”.