Florencia Bertotti:"Encontré al mejor hombre de todos, Fede es lo más"
La rompe en Guapas, después de varios años de ser mamá full time y emprendedora de sus propios sueños. Habla del amor después del amor y del disfrute como motor de vida
24 de junio de 2014 • 00:20
Blusa (Carolina Müller, Consultar precio)
"Genuina", respondés cuando te preguntan por ella después de conocerla. En Flor Bertotti coinciden su imagen con su relato y, a cuatro años de su última nota en OHLALÁ!, se la observa aun más consistente en su mensaje de disfrutar cada día y trabajar los vínculos desde la generosidad. Y aunque una escarbe en sus debilidades, ella tendrá la respuesta: "Elijo ver el vaso medio lleno". Entrevistarla –o leerla, en este caso– es una oportunidad también para pensarnos desde un espacio más luminoso, donde hay tiempo para elegir qué queremos.
Hace cuatro años que fuiste tapa de OHLALÁ!, ¿qué sentiste que cambió en este tiempo, que estuviste alejada?
Fue un momento de introspección, de volver a ocuparme de mi casa y de dejar de delegar, fue un crecimiento enorme. Empecé mi relación con Fede (Amador), que fue un nacimiento divino. Si hoy miro hacia atrás, siento que toda la vida fue así, no sé cómo era antes. Es como cuando tenés un hijo, que decís: "¿Y antes cómo era?".
¿Sentís que te apoderaste de nuevo de las cosas?
Creo que sí, cuando estás tapada de trabajo, te perdés de disfrutar porque no tenés ese margen para decir qué querés, qué te gusta, qué no te gusta. Y volví a estar todo el día en mi casa. Yo soy muy hiperquinética, pero descubrí que quería hacer todo desde mi casa, y ahí empecé con Pancha, que es mi marca de ropa para chicos. Armé una oficina en casa, y dije: "No me sacás más de acá adentro". Hacía todo con tiempo, ya no tenía que hacer las compras por internet a las 12 de la noche, sino que podía ir yo al supermercado, elegir qué quería con calma.
¿Y no tenías miedo de que la actriz desapareciera?
No. Además, no sé si quiero actuar toda la vida. Me parece que lo que sí quiero es sentirme motivada o realizada. Hoy, lo disfruto y me encanta, pero sigo sintiendo que es mucho tiempo fuera de casa. Una va descubriendo sus pasiones a medida que va creciendo, y le van cambiando las prioridades... Hoy, mis prioridades son mi familia, mi marido, mi hijo. Y cuando siento que me falta algo, es una señal que indica que hay algo para cambiar.
Hoy sos madre full time...
Full time. Romeo era muy chiquitito cuando yo hice Niní y fue una experiencia medio negativa trabajar con él tan chiquito. Entonces, me dije: "Está bien, aprendí, me pasó, pero no me pasa más". Y recién ahora hice Guapas, porque él empezaba doble turno. Pero aun así pedí poder llegar a buscar a mi hijo al jardín y tener una tarde libre por semana.
Estaba el prejuicio de que porque eran mujeres se iban a llevar mal, ¡revirtieron esa idea! Es ridículo, nosotras somos una redacción principalmente de mujeres y nos llevamos bien.
Cierto, aunque nos amalgamamos desde el primer día, existía la idea de que cinco minas –cada una con toda su mochila de lo que prefiere y lo que no prefiere– nos íbamos a pelear. Y nosotras decíamos: "Pará, está bien, no es normal que te mates en un elenco, no tiene por qué pasar". Y la verdad es que empezamos a grabar y era todo muy fluido, muy tranquilo, y para mí eso es lo más importante. Si después es un éxito o no, no me hace una diferencia. En cambio, la clave es trabajar bien, hacer cosas buenas y pasar un buen momento.
Y vos, que tuviste pantalla desde muy chica, ¿cómo manejás el éxito? Porque además tuviste mucha exposición con tu separación...
¿Qué tiene que ver la separación?
Te expone... Cambiaste de pareja (se separó de Guido Kaczka) con un chico chiquito.
Sí, es cierto, pero eso no tiene que ver con el éxito o no, sino con el medio. Cualquier cosa que dé para hablar está a la orden del día, es un precio un poco alto, pero...
Que se paga por estar ahí...
Sí. Yo nunca fui partícipe de exponerme, entonces, cuando me tocó una exposición que no elegí, no me sentí responsable, porque yo no la alimenté. Además, no lo padecí porque no consumía antes, no consumí en ese momento y no consumo ahora ese tipo de información. No me interesa, no me construye ni me motiva, entonces no le doy relevancia.
¿No te molesta que se hable de vos?
Si yo no me entero, no me molesta, porque no leo, no compro. Preferiría que no me conociera nadie, pasar desapercibida; no disfruto de la exposición, de la fama, de los beneficios. Prefiero toda la vida que no me conozca nadie y que nadie me diga nada, que nadie me mire.
¿Qué sentís que te funcionó para surfear el escandalete que armaron?
Eso es parte del pasado, y no me interesa aclarar ni desaclarar. Estoy parada en otro lugar, ¡fue hace 4 años! Obviamente, una llega con el tiempo, con el camino y si es consecuente con lo que quiere y con lo que busca, pero me parece que no da para mucho más seguir linkeando desde ahí. El presente es lo más lindo que tengo, soy feliz donde estoy.
O sea que encontraste un buen hombre, básicamente...
Es el mejor, no quiero deprimirlas, chicas, pero yo encontré al mejor, para mi punto de vista, es lo más... No lo busqué, apareció, fue como un regalo.
¿Se van a casar?
¡Sí! Para mí, ya es mi marido, pero yo quiero todo. Creo en el matrimonio...
¿Cómo se llevan como familia ensamblada?
No es una familia ensamblada, sino una gran familia: no hay "los tuyos, los míos, los nuestros", somos familia. Los fines de semana los chicos se esperan, se disfrutan, juegan y se llevan re bien, así que es un placer.
Batade toalla (Caro Cuore, $650)
¿Y te costó ser "madrastra"?
No, para nada. "Madrastra", igual, tiene una connotación negativa. Y en mi caso es todo lo contrario. Los hijos de Fede son un amor, nos llevamos bárbaro desde que ellos eran muy chiquititos, entonces es como que hay un vínculo muy físico, de cuidado, de contención. Yo tengo un varón también de las mismas edades y entonces es un placer. Fue todo muy fluido, muy natural, no hubo nada raro, todo se dio como por un tubo.
Además, todos varones…
Y sí, hacen un quilombo bárbaro.
A vos que hacés ropa, ¿te gustaría una nena?
¡Me encantaría, estoy a punto de vestirlos de rosa a ellos! En los locales de ropa de chicos, el denominador común es que de varón hay un perchero ¡y de mujer hay cinco! Siendo víctima de esa diferencia, en Pancha tenemos bastante variedad para varones.
¿Y querés tener un hijo pronto, y colgar de nuevo la actuación?
Sí, ¡en cuanto pueda desaparezco! Es más, me gustaría lo del hijo para el año que viene, ese es mi objetivo principal, queremos tener mil hijos...
Te tomaste un buen tiempo, porque hace cuatro años que están juntos.
Sí, lo que pasa es que teníamos mucho trabajo al principio y también estábamos disfrutando de nuestro noviazgo, nuestro tiempo.
Conociéndose…
Sí; igual, fue como si nos conociéramos de toda la vida, fue como visceral, así que más que nada fue disfrutarnos.
Izq: Vestido con vuelo (Carolina Müller, Consultar precio). Der: Camisa (Paula Cahen D’Anvers, $880), Pantalón patchwork (María Cher, $1600), cinturón doble (Lazaro $328), Stillettos de gamuza (Sofi Martiré, $1495)
Qué bueno... ¿Y con el casamiento tienen ese mismo plan?
No tenemos algo planificado aún, vamos viendo y buscando los espacios que se vayan abriendo para concretar las cosas que queremos.
¿Y tienen momentos para estar solos? Porque cuando una está separada, los hijos algunos días se van con su papá, ¿no?
Sí, al principio fue durísimo, cuando él se iba con el papá, era como un vacío..., pero bueno, aprendés a convivir con eso, y tiene de bueno que a veces encontrás espacios que de la otra manera no tendrías. Había fines de semana que estábamos solos y era como un fin de semana de luna de miel, y está buenísimo. Además, si ponés el ojo en el disfrute y no en lo que te está faltando, tenés un premio, tenemos esta lunita de miel, esta perlita.
¿Y pudiste encontrar el método de crianza con el papá de Romeo aunque estén separados?
Todos los padres pensamos en los chicos y el objetivo es el bienestar, la tranquilidad y la armonía. La verdad es que somos muy pro niño, no tenemos egoísmos. Tenemos un súper buen vínculo y estamos muy enfocados en que las cosas fluyan y que no haya incomodidad de ninguna parte. En nuestro caso, no hay motivos para eso, estamos bien todos. Por suerte, todos ya tenemos nuestra familia armada, somos felices, es un disfrute verdadero, de estar pensando qué hace falta para los chicos.
Para vos es muy importante el disfrute y eso lo transmitís en tu forma de ser, tu imagen es de una chica súper alegre.
Sí, pero no el pasarla bien desde un lugar liviano, sino que para mí pasarla bien es estar bien; es estar bien con mi entorno, con mi gente, sentirme a gusto, que lo que haga me represente, me identifique, me enorgullezca.
Claro, ser positiva lleva trabajo, no es algo que sucede solo.
Hay que dedicarse, por supuesto. Es estar pendiente, y es el trabajo más lindo para mí, es el que más me enorgullece. Para lograrlo, no tengo una rutina. ¿Viste que hay gente que te dice: "Yo me levanto, hago mis meditaciones..."? Yo trato siempre de mirar el vaso medio lleno. Me pasan y me pasaron un montón de cosas en la vida de las que me podría lamentar, victimizarme o estigmatizarme: desde la muerte de mi papá cuando era muy chica u otros dolores muy grandes. Pero tomo todo lo que se me va dando, naturalizo mis circunstancias, las acepto, no las discuto y las trato de transformar de la mejor manera. Porque lo que toca toca, por algo toca. Y hay que "aparecerse", como dice Fede. Hay que poner el cuerpo y buena onda, porque si no, la pasamos todos mal. Viste que es una cadena, ¿no? Estamos todos atados, si yo me tiro para acá, te tiro a vos para acá, si vos te vas para atrás, yo me voy para atrás. Queramos o no, estamos vinculados.
La generosidad pareciera ser un gran tema para vos.
Si el otro está contento, yo estoy contenta. A veces me digo: "Mi alegría, ¿por dónde pasa?". Y tiene que ver con darle al otro, no porque me hago la generosa, sino que soy medio geisha en eso, en la pareja y con los chicos.
¿Sin después pasar facturas estilo "che, estoy haciendo todo el tiempo cosas por vos"?
No, eso es una truchada total. Yo realmente disfruto de dar.
Camisa bordada (De la Ostia, $920)
¿Y la Flor sexy? Siempre te dan personajes medio inocentones, pero debe de haber algo oculto con el bombonazo que te levantaste...
Lo guardo más para mí que para explotar, no me gusta la mujer puesta en ese lugar de bomba. Me encanta para mirar, pero no sé si para yo ocuparlo. Sí lo ocupo en mi vida íntima. Es un lugar que es mío y que me encanta, pero es privado. Con relación a los personajes, quizá quedé en el inconsciente colectivo como la niña eterna con Floricienta. Es como ahora, por ejemplo, que soy como una Floricienta de grande... La virgen, que no fuma, no toma, no se emborracha, no se equivoca.
¿Querrías cambiar eso, que te reconozcan como actriz dramática?
No me parece que no se me reconozca como actriz o que se minimice mi trabajo porque esté más ligado a la comedia. Por suerte, he recibido muchos halagos con relación a mi profesión y no siento que me falte algo.
¿A quien recurrís cuando sentís que no podés, que no das más?
Soy bastante fatalista, exagero y, cuando me pasa algo que no me gusta, soy muy dependiente de Fede, porque me tranquiliza. Me hace bajar y no sacar conclusiones o tomar decisiones en ese estado. Entonces, no me dejo llevar por la emoción primera de alguna angustia.
Sabemos que estás preparando un disco, ¿cómo va eso?
Tengo un disco ahí, tengo todas las canciones, y no grabé nada todavía. Me encanta escribir, es otra posibilidad, otro camino. Por eso no me gusta cerrarme a nada. Supongo que el año que viene será una posibilidad lanzarlo, pero, si bien me gusta el costado de compositora y me encanta cantar, no sé si exponerme tanto.
No te gusta estar muy expuesta, pero trabajás en algo que naturalmente te expone, es una contradicción, ¿cómo la vivís?
Es una contradicción, yo disfruto de grabar, de hacer las escenas, pero la exposición es lo que menos elegiría. Si pudiera actuar con una careta puesta, lo haría. Pero también una piensa que ya está, ¡que nunca se van a olvidar de tu cara!, y cuando no estás en el aire con una tira, la gente te mira, pero no saben si te conocen del barrio o de alguna otra parte y listo, dejan de mirarte. Lo comprobé en estos cuatro años y lo re disfruté. Y la verdad es que ya está, ya me conocen, entonces se alimenta o se descomprime, así que lo tomo como una alternativa para manejarlo de acuerdo con lo que vaya queriendo hacer.
Fotos de Juampi Bonino. Producción de Cin Palacio
Producción de locación: Micaela Bendersky.
Maquilló Fernanda Escobar para Guerlain.
Peinó Nacho López Fegalde para Estudio H.
Agradecemos la colaboración de Paula Marinangeli, Teatro 25 de Mayo, El Cultural San Martín y a su equipo de producción por su colaboración en esta nota.
Los precios pueden tener modificaciones.
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