Agua marina en tu rutina de skincare: ¿cuáles son sus beneficios para la piel?
El plasma marino es un ingrediente que puede traerle muchos beneficios a tu piel. Te contamos cómo incorporar el agua de mar en tu rutina de skincare y aprovechar sus minerales para cuidarla.
20 de agosto de 2024
Conocé los beneficios de sumar el agua marina a tu ritual de skincare. - Créditos: Getty Images
En la antigüedad, los griegos, egipcios y romanos conocían sus bondades y practicaban la hidroterapia, la balneoterapia (aguas termales y medicinales) y, especialmente, la talasoterapia (agua de mar) para el cuidado personal. Pero no fue hasta mediados del siglo XVIII cuando estudios médicos empezaron a recomendar los baños de mar como remedio medicinal.
Algo muy curioso de lo que debería tenerse en cuenta en estos días, fue el descubrimiento del científico francés René Quinton (1867-1925). Demostró la similitud de la composición del plasma sanguíneo con la del agua de mar. Logró reducir la concentración de sales del agua marina y aproximarla a la de la sangre. De esta manera consiguió un plasma marino con el que curó a miles de personas de enfermedades como dermatitis, cólera, tifus, entre otras enfermedades, en una época en la que no había antibióticos.
El plasma marino actúa como un todo sanador, capaz de aprovechar la sinergia de los minerales y catalizar el metabolismo, conduciendo hacia un equilibrio mineral del organismo. Te contamos cómo podés incorporarlo a tu rutina de skincare y cuidar la salud de tu piel.
¿Qué es el agua de mar y para qué sirve?
El agua de mar es una disolución formada por agua y sales, en una proporción de un 96,5% de agua y un 3,5% de sales como; magnesio, potasio, bromo, yodo, cloro, silicio, cobre, entre otros. Está enriquecida con elementos vitales, vitaminas y oligoelementos.
Estas propiedades terapéuticas las podemos aprovechar en nuestros días incorporando el agua de mar en nuestro ritual de cuidado personal en simples pasos. Pero antes, te cuento algunas de las propiedades terapéuticas del agua de mar. Las más destacadas son:
Acelerar el proceso détox en la piel, tiene efecto drenante.
Capacidad de aliviar las pieles dañadas e irritadas.
Limpia las mucosas y proporciona una perfecta revitalización celular.
Reduce la inflamación y ayuda a reducir los síntomas de enfermedades de la piel como la dermatitis atópica, la psoriasis o el eczema.
Tiene propiedades nutritivas, favoreciendo la nutrición de la piel por su alto contenido en minerales, como, por ejemplo, el magnesio mejora su hidratación.
Es antiséptica por lo que es muy útil en la curación de heridas menores, cortes, erupciones y abrasiones.
Claves para tener en cuenta si vas a la playa
Si estás en contacto con el mar, podés usar sus propiedades para mejorar tu piel. - Créditos: Getty Images
Es ideal combinar el agua de mar, con la exposición solar en horas donde la radiación solar es menor, con el descanso que tiene un efecto antiestrés y si es en zonas donde hay humedad ambiental, es el círculo perfecto para equilibrar nuestro cuerpo físico, energético y emocional.
Los baños en el mar contribuyen a desinfectar heridas e infecciones y también a cicatrizarlas más rápido. Al mismo tiempo, es un buen tratamiento para los talones agrietados y las callosidades. Estos últimos, en combinación con la acción de la arena, actúa en sinergia con el agua de mar, colaborando como un gran exfoliante natural.
¿Cómo incorporar el agua de mar en tu rutina de skincare?
No tenemos que esperar para ir a la playa para recibir estos beneficios, ya que podés recrear un tratamiento con agua de mar e incorporarlo fácilmente en tu ritual diario de skincare. ¿Cómo lograrlo?
1
En primer lugar, te recomiendo conseguir agua de mar microfiltrada para eliminar bacterias e impurezas, garantizando la salubridad y naturalidad del producto. Que no contenga conservantes, ni ningún otro aditivo, 100% agua de mar. Fijate también que esté libre de Bisfenol A y Ftalatos.
2
Una vez que tengas el agua de mar se debe aplicar sobre la piel limpia. Podés utilizarla embebiendo discos de algodón o reutilizables de algodón y topicando suavemente por rostro, cuello y escote. Podés realizar suaves masajes con la piel humedecida con el agua marina. No dejar más de 5 minutos y lavar con agua templada. Posteriormente, utilizar una crema emoliente rica en ceramidas, descongestivos, antioxidantes y humectantes.
Claves que no deberías olvidarte sobre la limpieza de tu piel. - Créditos: Getty Images
Este procedimiento se puede realizar día y noche. Por las noches es fundamental que utilices cosméticos con ingredientes naturales libres de parafinas, parabenos, siliconas, perfumes y sustancias sintéticas, para no anular todo el trabajo que estás realizado en tu piel con el agua de mar.
El uso tópico (externo) del agua de mar, también puede emplearse para el lavado de cicatrices, problemas cutáneos, acné, vitíligo, rosácea, psoriasis, micosis, prurito, dermatitis atópicas, entre otros. El agua de mar es una gran alternativa con altísimos beneficios, ya sean preventivos, como para tratamientos en pieles que requieren de manera urgente lograr retornar a su equilibrio perdido.
Te invito a que te animes a conectarte con las propiedades que nos aporta la naturaleza del mar y vivenciar sus beneficios.
Fernanda Castro Fernanda Castro es experta en el cuidado de la piel de manera integrativa y asesora a mujeres que quieren autogestionar su cuidado personal de manera no invasiva. Es emprendedora hace más de 12 años, autora del libro "Cosmetología de las Diosas" y especialista de cosmética consciente, amorosa con el equilibrio de la piel y responsable con el medioambiente.
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