Mercurio retrógrado: cómo impacta su tránsito en Capricornio

Las energías zodiacales más afines son, claro, la de Capricornio mismo, y también las de los otros signos de tierra: Tauro y Virgo, así como las de aquellos con los que Capricornio hace sextil: Escorpio y Piscis. Estos signos se beneficiarán de este tránsito en cuanto a la facilidad con la que intercambiarán información y realizarán transacciones comerciales. Su agilidad mental estará especialmente afilada.

Por otra parte, los otros signos cardinales (Aries, Libra y Cáncer) recibirán de Mercurio aspectos inarmónicos: cuadraturas en el caso de los dos primeros, y oposición en el caso del último. La comunicación y los procesos mentales se tensarán durante este período, y deberán poner particular atención porque se verán expuestos a posibles deshonestidades, malos acuerdos comerciales y charlatanería. En su estado de ánimo, puede aparecer un creciente nerviosismo e inquietud. Es importante saber que estas dificultades son transitorias.

Géminis, Leo, Sagitario y Acuario no se relacionan en aspectos mayores con Capricornio, por lo que sentirán el influjo de este tránsito de manera suavizada o más bien neutra, aunque puede encender la chispa de la ambición en sus inquietudes comerciales y vinculares y el pragmatismo y la prudencia en su manera de comunicarse y de pensar.

La conjunción de Mercurio con Venus, de larga data, va a terminar en esta temporada, porque cuando Mercurio entre en retrogradación va a alejarse del planeta del bienestar y el amor. Pero, hasta el 4 de enero, seguirán caminando juntos y potenciando las cualidades intelectuales y comunicativas desde una propuesta de armonía y convivencia pacífica.

Los otros contactos más significativos serán con los planetas más lentos. Se trata de relaciones armónicas, lo cual es un buen augurio: Urano, con quien, acompañado de la Luna en Virgo, hará un Gran Trígono de tierra el 15 de diciembre; Neptuno, con quien entrará en sextil el día 20; Júpiter, con quien también entrará en sextil una semana más tarde, el 27 y, por último pero no menos importante, Plutón, a quien conjuntará desde el 23 de diciembre en un contacto neutro.

Entonces, la practicidad que propone Mercurio en Capricornio se alineará de manera positiva y fructífera con el factor sorpresa que aporta Urano, con la inspiración y la capacidad de soñar de Neptuno y con la abundancia y la expansión jupiterianas, mientras que Plutón habilita nuestro empoderamiento a través de nuestras herramientas mentales. 

Es una etapa para concretar, con paciencia y dedicación, los últimos objetivos que nos planteamos para 2022. Pero sin presión: al retrogradar, nos dará la chance de una recalibración durante enero, por lo tanto, lo que no lleguemos a hacer podrá reanudarse entonces.

Durante su retrogradación, entre el 29 de diciembre y el 23 de enero, va a volver a hacer todos estos contactos planetarios, porque recorrerá los grados 24 a 8 de Capricornio. Además, hará conjunción con el Sol del 3 al 12 de enero: esto potencia la energía vital.  Tendremos una segunda oportunidad de formular lo vivido en diciembre ya más tranquilas, con el ritmo veraniego y sin presiones del primer mes del año.