Megan Fox contó que sufre dismorfia corporal: “Nunca hubo un momento en mi vida en el que amara mi cuerpo, nunca jamás”
La actriz habló de su lucha contra la dismorfia corporal, un trastorno mental por el cual nunca logró amar su cuerpo y sentirse bella.
16 de mayo de 2023 • 15:25
Megan Fox contó que sufre dismorfia corporal: “Nunca hubo un momento en mi vida en el que amara mi cuerpo, nunca jamás”. - Créditos: Getty.
Después de saltar a la fama internacional con su papel en la saga de Transformers, Megan Fox fue votada en 2008 como la mujer más sexy del mundo, según una encuesta de la revista FHM Online. Sin embargo, ella nunca se sintió realmente bella. “Nunca me veo como me ven los demás. Nunca hubo un momento en mi vida en el que amara mi cuerpo, nunca jamás”, dijo la actriz en una entrevista con Sports Illustrated, donde contó – visiblemente conmovida – que sufría dismorfia corporal.
Megan Fox contó que sufre dismorfia corporal
Megan Fox en Transformers. - Créditos: Getty.
Durante la entrevista, la actriz de 37 años contó que hace muchos años sufre de dismorfia corporal. ¿Qué es? Un trastorno mental por el cual la persona no puede evitar preocuparse obsesivamente por un defecto percibido en su cuerpo o su apariencia, y que por lo general, puede ser no visto por los demás.
A través de esa enfermedad, Megan Fox aseguró que desde hace muchos años lucha contra ella como si fuera “un viaje sin fin” para aprender a “amarse a sí misma”, ya que nunca pudo lograr hacerlo.
Quien interpretó a Mikaela Banes, el papel por el cual recibió varias nominaciones a los premios Teen Choice Awards, se ha sometido a distintas cirugías a lo largo de los años: implantes de senos, rinoplastia, bótox, párpados, y demás intervenciones quirúrgicas, que rondan en total los 60 mil dólares.
“Podemos mirar a alguien y pensar: ‘Esa persona es tan guapa. Su vida debe de ser muy fácil’. Lo más probable es que esa persona no se sienta así consigo misma”.
Megan Fox.
“Nunca fui la chica hermosa de mi escuela (…) tenía frenillos y teñí mi cabello de naranja. No era la chica popular. Siempre fui la solitaria”, contó Megan en la entrevista, donde también agregó lo difícil que fue para ella no sentirse parte de ningún sitio: “No encajaba bien, por mucho tiempo no viví mi vida siendo yo misma”.
Con esas palabras, la actriz explicó que por muchos años atravesó momentos oscuros en soledad, porque creía que el mundo no la iba a aceptar y tampoco se sentía digna de recibir halagos “era un desperdicio o una mala actriz”.