Instagram: 4 marcas para comprar ropa vintage por redes
Comprando vintage podemos alargar el ciclo de vida de las prendas y reducir su impacto ambiental. De paso, darle onda a nuestro placard con poca plata.
7 de agosto de 2022 • 00:01
Sacos de Miel Feria. - Créditos: Instagram.
A medida que nos volvemos más conscientes del efecto que tenemos en el medio ambiente, empezamos a buscar formas más sustentables de hacer las cosas. Y, entre ellas, vestirnos.
Entre mis amigas y compañeras de trabajo estoy viendo que, cada vez más, estamos empezando a pensar en comprar menos cosas, pero las elegimos de buena calidad para que duren más. Buscamos marcas que nos representen y que, si se puede, que sepamos que brinda buenas condiciones de trabajo a sus empleados. Y, también, nos agarra emoción ante la idea de encontrar algún tesoro oculto en una feria vintage: una prenda de otra época, en buenísimas condiciones, lista para volver a nuestros looks más interesantes.
Probablemente no te sobre el tiempo para revisar ferias americanas en busca de alguna gema, pero he aquí la solución. Estas marcas de emprendedoras se toman el tiempo de hacer una buena selección, reacondicionar o intervenir las prendas, y te las acercan por Instagram o por sus tiendas online:
The Black Hanger
Tiene ropa actual usada, de segunda mano, aunque a veces hay algunas cosas nuevas, con etiqueta. Podés vender lo que ya no usás y encontrar qué ponerte cada vez que tu placard pide una refrescadita. Malu, su creadora, modela por IG looks buenísimos con las prendas a la venta y te dan ganas de copiárselos de la cabeza hasta los pies.
Manto Buenos Aires
La premisa de Manto: darle más valor a lo que ya existe. Por eso, eligen prendas vintage de calidad y las hacen intervenir por artistas, logrando tesoros únicos. Nadie va a tener tu mismo abrigo, te lo prometo.
Cisne Vintage
Lupe persigue gemas, la reacondiciona, y las publica en el IG de Cisne con precio, talle y todo. La primera que comenta se la lleva, así que te tenés que agendar las “tandas” y estar atenta, pero vale la pena porque de verdad son prendas espectaculares a precios ridículos. El año pasado llegué a un saquito turquesa de cachemir irlandés, impecable, y lo pagué algo así como $2.500.
Miel
Un día llegué temprano a @juntasferiaok y vi gente haciendo cola cual película hollywoodense, para hacerse con algo de Miel. Solo venden los días de ferias (y hay ferias online). No reservan. Y ojo con entrar a su Instagram porque querés todo.
Sabemos que la industria de la moda rápida genera alrededor de 100 miles de millones de prendas cada año, y que es una de las industrias que más contamina. Y comprar vintage no solo es una forma de alargar el ciclo de vida de las prendas y reducir un poco su impacto ambiental, sino que también es una buena forma de invertir nuestra plata, ya que por lo general podemos conseguir lo que necesitamos a precios mucho menores que los del shopping. Elegí bien, amalo y que te dure.
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