Ola de calor: 5 consejos para mantener tu casa fresca durante el verano

Al amanecer o en las últimas horas del día suelen ser los momentos ideales para abrir puertas y ventanas y recambiar el aire (caliente) que quedó almacenado en tu casa luego de un día caluroso. A su vez, es recomendable cerrar en las horas de mayor calor todas las habitaciones y ambientes que tengan poco uso durante el día para que el aire fresco de la mañana quede concentrado el mayor posible allí. A su vez, bajar persianas, cerrar cortinas y bajar toldos (si tenés) para las horas de mayor sol son acciones obligadas.  

Cuando optas por las bombillas LED, además de cuidar el planeta y gastar menos electricidad en la factura mensual de luz, bajás la temperatura en tu casa. Un dato que quizás no conocías: las luces incandescentes gastan un 90% de su energía en el calor que desprenden. A su vez, se trata de bombillas mucho más seguras que reducen la posibilidad de sufrir algún accidente doméstico al funcionar mediante corriente continua de baja tensión. 

Ellas nos pueden proteger de las altas temperaturas aportando frescura al ambiente, además de decorar ambientes y acercarnos a la naturaleza especialmente a aquellos que viven en grandes urbes y para acceder a un espacio verde tienen que tomar el ascensor.

Como te contamos en varias ocasiones, las plantas son grandes aliadas para absorber el calor y regular la temperatura del ambiente. Algunas ideas: las enredaderas crecen fácilmente y se expanden rápidamente por el balcón, terraza o entradas a tu casa formando una barrera contra el sol. Para interiores, el helecho o la bromelia (entre muchas más).

Todo aquello que en nuestra cama nos aporte calor hay que reemplazarlo por opciones más frescas: quitar las mantas de pelo y lana, guardarlas hasta que regrese el frio y sustituirlas por otra de material sintético o de algodón, puede ser un buen primer paso. Si además retirás las alfombras peludas y priorizar los colores claros, mucho mejor.

Los aparatos eléctricos como el lavavajillas o la lavadora desprenden mucha energía y, por lo tanto, aumentan la temperatura del ambiente. Si se puede activarlos únicamente de noche, o al menos cuando el sol esté dejando el día durante las horas menos calurosas del día, mucho mejor. Por ejemplo, el lavavajillas puede aumentar la temperatura hasta 2ºC. No parece tanto pero cuando hace calor, todo suma.