Plantas tropicales: 4 buenas opciones para tu casa

Esta planta de origen japonés con hojas en forma de boina se volvió muy popular en los últimos años tanto para ambientar jardines, terrazas y balcones como espacios de interior. Pueden vivir y desarrollarse sin problemas en una maceta, ya que suelen tener un tamaño de hasta 90 centímetros de alto y ancho.

En relación al sol, hay que tener presente que con sol directo sus hojas pueden marchitarse, por eso será mejor ubicarla en espacios con luz indirecta. Con el riego también hay que tener presente que prefiere la humedad siempre y cuando las raíces no sufran de encharcamiento, porque en ese caso, se pudren con facilidad.

La Monstera deliciosa, también conocida como “costilla de Adán”, es una de las plantas más fáciles de cuidar que han crecido en popularidad especialmente en ámbitos de diseño de interiores y decoración. Procedente de las selvas tropicales mexicanas es una planta trepadora que si tiene el espacio adecuado se desarrolla de manera saludable de forma rápida.

Necesita contar con buena luz, aunque de manera indirecta para evitar que sus hojas se quemen y de un riego moderado, una o dos veces por semana en verano y cada quince días en los meses de frío. Y una advertencia: esta planta es sumamente tóxica tanto para perros como para gatos. Y no solo en lo que respecta a sus hojas, también a sus raíces y tallos.

Esta planta es oriunda del centro y sur de América, amante del sol y sensible al frío. En los meses de calor necesita de un riego abundante para sobreponerse a la sequía: Ella necesita de ambientes húmedos para crecer de manera sana y continua. También es importante que sepas que, si mantenés sus hojas limpias la ayudás a estar sana.

Con respecto a la luz que demanda, necesitará al menos 6 horas diarias de luz de sol, aunque no de manera directa para evitar que se quemen sus hojas. En caso contrario, si no recibe la cantidad de luminosidad sus tallos se caerán como signo de debilidad.

Esta planta herbácea es oriunda de Asia y de la cuenca Mediterránea, tiene un metro de altura aproximadamente, fácil de cuidar y muy resistente. Esta planta necesita un terreno permeable, pero sin que se encharque con facilidad. Si bien es una planta que se adapta bien a los climas secos, cuando se cuida que el sustrato este ligeramente húmedo y el riego es regular, crecerá en total plenitud.

En relación a la luz le encanta el sol y lo soporta bien de forma directa. También crece en espacios de semisombra o con luz indirecta. Es una planta dócil y fácil de cuidar, además de bellísima.