Semana Santa 2024: 7 propuestas para el finde súper largo que se viene

Victoria es una ciudad con aires coloniales y sorpresas para descubrir. No dejes de recorrer a pie el centro histórico. Te vas a maravillar con la artesanía que hay en las rejas y arquitectura locales. Otro punto interesante es la Abadía del Niño Dios, el primer monasterio benedictino de Hispanoamérica. Adentro, se pueden comprar los famosos productos elaborados por los monjes: miel, licores y mermeladas. Muy cerca está el Cerro de la Matanza y el Monte de los Ombúes, un sitio histórico y un espacio verde con un paisaje divino. Pero el atractivo principal es el complejo termal Victoria del Agua, con aguas de salinidad equivalentes a las del mar y gran variedad de componentes minerales naturales. Una oportunidad para lograr el bienestar general y renovar energías.

Cómo llegar: en auto desde CABA. 4 horas por ruta nacional 9 y cruzar el Puente Rosario-Victoria.

Dónde dormir: Hotel Termas Victoria (@hoteltermasvictoria) ofrece relax y descanso de alta categoría, en un marco natural. Desde $130.900.

Dónde comer: El Balcón de Pedro (@ elbalcondepedro) ofrece cocina tradicional y productos regionales. 

El dato: si te gusta el vino, Border Río (@ borderio_bodega) organiza almuerzos y degustaciones en su bodega y plantaciones. 

Un destino poco explorado con uno de los escenarios naturales más imponentes de la Argentina. El atractivo principal es la Ruta de los Seismiles, un camino plagado de paisajes impensados con montañas que superan los 6000 metros de altura (de allí su nombre). Se inicia el circuito en el paso fronterizo San Francisco. Desde ahí, se hace un recorrido de 200 kilómetros con volcanes que muestran sus figuras como llamas, guanacos, vicuñas y flamencos andinos. Se puede hacer noche en el hotel Las Cortaderas y tener una experiencia de conexión con el entorno. Vas a descubrir el Monte Pissis, el volcán inactivo más alto del mundo, y Ojos del Salado, el volcán activo de mayor altura. En el balcón de Pissis están las mejores vistas panorámicas, aunque para llegar hay que hacer 55 kilómetros de ripio y se recomienda hacerlo con guía. A la altura de Tinogasta, sobre la ruta 60, te recomendamos visitar la Bodega Veralma. Vas a conocer el proceso de producción de vinos con uvas de la zona. Cerca de este lugar también están las Dunas del Tatón, un desierto de arena blanca poco conocido donde se pueden realizar paseos en 4x4 y sandboard. 

Cómo llegar: hay vuelos Buenos Aires-San Fernando del Valle de Catamarca, desde $250.000. Luego, se sigue durante 3 horas en auto por RN60 hasta Tinogasta.

Dónde dormir: Casa Grande Hotel de Adobe (@ casagrandehoteladobe) tiene todas las comodidades para una estadía placentera. Desde $76.000 la noche.

Dónde comer: en Finca La Sala (@fincalasala) encontrás la mejor cocina regional.

El dato: muy cerquita están las Termas de Fiambalá, un oasis natural.

Lo primero que pensamos al hablar de Madryn es en el avistaje de ballenas y fauna marina. Pero la ciudad es reconocida a nivel mundial por su gran atractivo de Semana Santa: la celebración del Vía Crucis Submarino, un evento único en el mundo en el que parte de la procesión se hace bajo el agua. Con una cruz adaptada para la inmersión, kayakistas, buzos profesionales y deportivos acompañan al sacerdote o laico consagrado que relata el camino de la cruz desde abajo del agua, a través de un hidrófono. La procesión finaliza con la salida a la playa del grupo de submarinistas que acompañan la cruz, donde el público los espera en un silencio emotivo, portando velas. ¡Una experiencia única! Además, es temporada de orcas en Península Valdés. En la Reserva Punta Norte y Caleta Valdés podés ver cómo se varan en la playa para alimentarse. También se pueden observar delfines y aves marinas desde las costas de Madryn.

Cómo llegar: vuelo Buenos Aires-Puerto Madryn, desde $75.000.

Dónde dormir: Hotel Territorio (@hotelterritorio) cuenta con habitaciones familiares y restaurante. Desde $120.000 la noche 

Dónde comer: la Feria de Pescadores Artesanales, un festival gastronómico del mar único.

El dato: animate a hacer snorkeling con lobos marinos en Punta Loma. Hay excursiones en @buceahoy.

Al igual que en carnaval, la provincia de Jujuy tiene importantes celebraciones de Semana Santa. Cada año surgen en las localidades de la Quebrada de Humahuaca distintas expresiones de espiritualidad, como las ermitas. Esta tradición religiosa consiste en exponer 14 cuadros, realizados por las familias del lugar con elementos naturales que representan las estaciones del Vía Crucis. Un acontecimiento que vale la pena presenciar al menos una vez en la vida. En este marco cultural, aprovechá para explorar la Quebrada de Humahuaca con sus bellezas paisajísticas: el Cerro de los 7 Colores en Purmamarca, Salinas Grandes, la Paleta del Pintor en Maimará, el Hornocal en Humahuaca. Si te gusta la gastronomía, este es tu destino. Además de los típicos platos regionales, Jujuy se destaca por sus vinos de altura. No dejes de probar los vinos de alta gama que allí produce la chef Florencia Rodríguez, de El Nuevo Progreso, ganadora del Prix Baron B de cuisine. Está ubicado en Tilcara y es un imperdible de la localidad. 

Cómo llegar: vuelo a San Salvador de Jujuy, desde $190.000. Conviene alquilar un auto para recorrer tranquilos.

Dónde dormir: Las Marías Hotel Boutique (@ lasmarias.hotel), con piscina al aire libre y spa. Desde $110.000 la noche. 

Dónde comer: El Nuevo Progreso (@ elnuevoprogreso), con los más ricos platos de autor.

El dato: Yacoraite (@yacoraitevinos) inauguró su wine bar en Uquía.

Las islas del Delta son el destino perfecto si querés entrar en un modo de calma, silencio y relajación, en contacto con la naturaleza y a muy pocos kilómetros de la ciudad. También podés llevarte provisiones o moverte a través de las embarcaciones en la búsqueda de un lugar para almorzar o cenar. Un gran plan puede ser visitar Isla El Descanso, un enorme parque repleto de obras de arte de artistas consagrados y un restaurante con platos de primera calidad. Si estás más en mood movimiento, se ofrecen recorridos guiados por los puentes y jardines.

Cómo llegar: en auto o en tren a Tigre. Luego, en lancha colectiva o lancha taxi.

Dónde dormir: si querés amanecer en una reserva natural y de diseño sustentable, está Isla La Rosana (@islalarosana). Desde $50.000 la noche.

Dónde comer: Los Pecanes (@los.pecanes), para pasar el día y almorzar con vistas al río.

El dato: Vero (@ entre_muelles) crea experiencias para vivenciar la belleza isleña.

Un destino con un magnetismo muy particular. Sus contrastes y variedad de propuestas la convierten en un lugar para el descanso y la aventura en contacto con la naturaleza, a pocas horas de la vibrante Río de Janeiro. Las calles son de barro o de adoquín y no circulan autos. La isla posee un entorno selvático y más de 100 playas con distintas características, además de cascadas y ruinas históricas. Los senderos te llevan a distintos puntos, subiendo morros, cruzando ríos, planicies, caminando junto al mar por la playa y atravesando comunidades nativas para descubrirla a fondo. Entre las playas imperdibles, está Lopez Mendes. A ella se llega después de una caminata de dos horas y media o tomando una lancha hasta Pouso para luego hacer unos 20 minutos de trilha. Vas a encontrar una playa virgen de arena blanca de más de 3 kilómetros, considerada una de las más lindas de Brasil. Otra playita recomendada es Dois Rios, a la que solo se puede acceder caminando. Los atardeceres más lindos se pueden ver desde el bar del hostel Che Lagarto. 

Cómo llegar: en avión a Río de Janeiro, (desde US$350) y lancha desde Mangaratiba. 

Dónde dormir: Posada Pitanga tiene habitaciones equipadas y cocina compartida. Desde US$70. Más info: Pitangailhagrande.com.

Dónde comer: cocina de mar en Canoas (@canoasilhagrande), con platos para compartir.

El dato: para explorar varias playitas, lo mejor es hacer excursiones en barco.

Kilómetros de playas vírgenes, áreas protegidas, dunas, palmares, lagunas. El litoral rochense es un atractivo imperdible para quienes buscan tranquilidad y un ambiente rústico. La Pedrera, Valizas y Punta del Diablo son las localidades costeras más visitadas por sus playas de arena blanca y mar azul profundo, y su oferta hotelera y gastronómica. No dejes de visitar Cabo Polonio, un pueblo marítimo en el que no hay luz ni agua corriente. Desde el faro se aprecia la colonia de lobos marinos repartidos en las piedras y en las playas. Más allá, encontramos los Palmares de Rocha, de unas 70 mil hectáreas. 

Cómo llegar: a Montevideo por Buquebus ($240.000 con bodega) y 3 horas y media en auto hasta La Pedrera.

Dónde dormir: Buenavida (@ buenavida.pedrera), con jardín y huerta. Desde $29.000. 

Dónde comer: Petisco (@petisco_lapedrera) es el lugar para platitos.

El dato: en la laguna está Cocina de la Barra (@ cocinadelabarra), con una propuesta gastronómica comunitaria, impulsada por un grupo de madres.