Anitta: la carta astral de la superestrella brasilera que conquista el mundo

Larissa de Macedo Machado nació el 30 de marzo de 1993 a las 22.45 en un barrio industrial de Río de Janeiro pegado a la favela. Desde los 8 años cantaba en una Iglesia los domingos. Hoy es una de las artistas más exitosas de América, con siete canciones suyas alcanzando más de 300 millones de reproducciones en YouTube. Además, cosechó hasta el momento seis premios Grammy latinos y siete premios MTV Europe Music. Y es la primera artista latina en tener un tema líder en el ranking de Spotify por uno de sus hits Envolver.

Analicemos su Sol. Es de Aries, signo de pioneros, de guerreros, de luchadores, de emprendedores. Claro que es una ariana súper especial, con un corazoncito tierno y familiero (a lo Shakira, ya que las dos tienen Luna en Cáncer), y un destino de gran empresaria ligado a su Ascendente en Capricornio. Como buena ariana le encanta la adrenalina de la competencia, ponerse al mando, imponer su voluntad. Lo interesante es que su arma de guerra es la seducción, el “envolver” al otro (como el título de su tema más famoso). Este poder se lo da Venus en Aries, pegadita a su Sol. Lo dice casi textualmente en su primera canción famosa “Meiga e abusada”. La canción empieza así: “Yo puedo conquistar todo lo que quiero/ fue tan fácil controlarte/ haciéndome la nena juguetona/ la fórmula perfecta para poderte mandar…”

Todos conocemos nuestro signo solar, nuestra cara visible, la identidad que proyectamos al mundo. Pero la contracara astrológica del Sol es la Luna, nuestro niño o niña interior, el yo emocional, nuestro mundo privado y secreto.

En el documental Anitta: Made In Honório, la cantante cuenta que a los 14 años un novio la violó y esa experiencia traumática fue la que la llevo a construir un personaje de sí misma, una especie de escudo contra el sufrimiento, contra su propia fragilidad. "Para todos los que se preguntan de dónde salió el nombre Anitta, nació de eso. De mi voluntad y necesidad de ser una mujer corajuda, a la que nadie más pudiese herir, a la que nadie pudiese hacer llorar. Fue por eso que creé este personaje".

En estas líneas la cantante sintetiza de un modo brillante la tensión entre su Luna en Cáncer (la mujer-niña sensible, desprotegida, algo ingenua y con cierta timidez), con su Sol en Aries (la competitiva, la guerrera, la que toma las riendas y se arriesga, la que avanza para que no la avancen).

Pero a su vez, en otra vuelta de tuerca, al revelar lo que le sucedió en la pubertad, se une implícitamente a esa inmensa marea de mujeres en el mundo que dicen basta a la violencia en forma activa, ya sin esconder, ya sin temer. Su Sol en Aries defiende a su Luna en Cáncer y, al hacerlo, defiende a todas las demás.

La carta natal es como un rompecabezas. Todos estamos compuestos por múltiples facetas que se combinan. Una de esas facetas es el Sol, nuestra cara pública, otra es la Luna, nuestro mundo privado ¿Y el Ascendente? Bueno, el Ascendente es la misión, lo que vinimos a aprender en esta vida, el desafío, el camino. Para calcular el Ascendente necesitamos saber la hora de nacimiento. En el caso de Anitta tenemos la suerte de saber la hora y por eso pudimos calcularlo. Ese Ascendente es Capricornio, el padre, el patrón, el modelo, el anciano sabio.

Efectivamente Anitta se crió sin padre, le faltó ese modelo, esa figura de autoridad que la sostenga y aconseje. Y de la carencia nació la fuerza porque gracias a esa falta inicial tuvo que transformarse en padre de sí misma, que endurecerse. Y, de hecho, sostiene a su familia, ya que su hermano mayor trabaja con ella.

Su madre fue padre y madre a la vez, y tal vez ella misma siga ese mismo destino, en un futuro no muy lejano. Pero lo cierto es que está cumpliendo cabalmente su destino, ya que además de artista es empresaria y acepta el reto capricorniano de trabajar seriamente, de sol a sol, para llegar a la cima.

Estudió muchísimo para lograrlo: varios idiomas, baile, canto, administración, incluso protocolo. Es responsable, laboriosa, eficiente, severa y según cuentan) una dura negociadora a la hora de los contratos, también como Capricornio manda. Incluso en ese propósito capricorniano de transformarse en modelo de otros, da cursos en una Universidad de Río de Janeiro sobre negocios, innovación y marketing. Si el destino de su ascendente es tener éxito, llegar a lo más alto de la montaña como las cabras… ¡Anitta, con más de 63 millones de seguidores en Instagram, ya lo cumplió! Aunque probablemente eso no la frene y en los próximos años siga y siga el mandato del destino, es decir siga peleando un primer puesto como buena ariana y como Ascendente Capricornio sencillamente siga ascendiendo.