El trágico final de Jean Tatlock, el gran amor de Oppenheimer
Oppenheimer está batiendo récords taquilleros esta semana. Te contamos quién fue Jean Tatlock, quien cautivó el corazón del padre de la "bomba atómica" y por qué tuvo un final de vida trágico y misterioso.
27 de julio de 2023
Florence Pugh interpreta a Jean Tatlock, una psiquiatra y médica estadounidense que se involucró sentimentalmente con Oppenheimer. - Créditos: Archivo LN
Cerca de 174 millones de dólares recaudó hasta hoy la película Oppenheimer en todo el mundo. Este fin de semana, en los cines argentinos la disputa fue entre este film y el de Barbie.
Sabemos que Cillian Murphy se mete en la piel de J. Robert Oppenheimer, pero repasemos brevemente el argumento de esta apuesta dirigida por Christopher Nolan: se trata de la historia del físico y desarrollador de la primera bomba atómica quien, luego de perpetrarse los ataques a Hiroshima y Nagasaki, se replanteó su propia moral. Sin embargo, en la película aparece una persona inesperada que forma parte de la vida de Oppenheimer: Jean Tatlock.
¿Qué rol juega en esta biopic? Interpretada por Florence Pugh, Jean Tatlock fue la doctora y gran amor de Oppemheimer.
Con Jean Tatlock se conocieron con Oppenheimer en la Universidad de Berkeley, en California, cuando él ejercía como profesor de Física y ella cursaba la carrera de Medicina; luego se especializaría en el campo de la Psiquiatría.
Ella era simpatizante del partido comunista, sufría de depresión y, en más de una oportunidad, rechazó el pedido de matrimonio de Oppenheimer. Se separaron, pero siempre, de una u otra forma volvían a reencontrarse. En la última oportunidad que se los vio juntos, lo hicieron a escondidas cuando él ya se encontraba dirigiendo el “Proyecto Manhattan” -el desarrollo de la bomba atómica- y el gobierno no estaba cómodo con la filiación comunista de ella.
Hasta que sucedió el fatídico desenlace que marcó un antes y un después para Oppenheimer: Jean Tatlock, de 29 años, fue encontrada muerta en su bañadera, con una carta de despedida. Sin embargo, el padre de Tatlock jamás creyó el hecho e investigó a fondo las evidencias: llegó a la conclusión de que su hija había sido asesinada.
Durante casi 100 años, la teoría de la conspiración sobre el supuesto asesinato de Tatlock sigue vigente pese a que su padre logró comprobarla.
¿Y Oppenheimer? Quedó devastado. Su vida no fue igual.
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