¿Quién fue Pepita “La Pistolera”, la criminal más famosa de Argentina, que protagonizará Luisana Lopilato?
Antes de su llegada a la pantalla de la mano de Luisana Lopilato, te contamos todo sobre Margarita Di Tullio, la delincuente y madama marplatense que se volvió leyenda como Pepita "La Pistolera".
19 de septiembre de 2024
Luisana Lopilato será Pepita La Pistolera. - Créditos: Archivo LN
Hay historias que merecen ser contadas y la de Pepita “La Pistolera” es una de ellas. La vida de Margarita Di Tullio, la mujer del hampa marplatense que se convirtió en la criminal más famosa de la argentina, comenzará a rodarse a principios de 2025 bajo la dirección de Lucía Puenzo y la actuación de Luisana Lopilato.
“Me entusiasma mucho meterme en la piel de una mujer con tantos matices, es un desafío actoral muy grande para mí”, expresó la actriz -que también oficiará de productora ejecutiva del film- en una reciente entrevista con LA NACION.
Luisana Lopilato encarnará a Pepita "La pistolera" en la pantalla
Las primeras imágenes de ella en personaje (está irreconocible) anticipan lo que será la trama de La pistolera, la leyenda de Pepita que narrará desde los primeros pasos de esta mujer como ladrona profesional hasta convertirse en leyenda luego de un triple crimen en defensa de su familia. A su vez, hará foco en su rol de madama y en cómo revolucionó el negocio de la prostitución al rescatar y empoderar a mujeres víctimas de trata.
¿Quién fue Pepita “La Pistolera”?
En 1985, su nombre saltó a la fama por ser esa madre de un recién nacido que mató a tres delincuentes que irrumpieron en su casa. De hecho, a partir de entonces, esta marplatense dejó de ser Margarita para pasar a ser Pepita, “La pistolera”; apodo que surgió de una crónica publicada por el diario La Capital y escrita por el periodista Heberto Calabrese, quien aseguraba que esa corajuda que mató “en defensa personal” era la misma mujer que 16 años atrás había sido detenida por asaltar a turistas en la costa.
Este seudónimo que Di Tullio odiaba surgió de una canción mexicana de 1959 interpretada por Ana María Cachito. “Pues ya llego la fiera, Pepita La Pistolera/Andele manito, que quieren con eso matones, que las mujeres también matamos”, decía parte de la letra que, según el periodista, reflejaba a la perfección las andanzas de esta mujer que con el tiempo demostraría que tenía muy poco de inocente y vulnerable, ocupando así las principales páginas de policiales.
Una maestra del engaño
Margarita Di Tullio fue una de las delincuentes más famosas de Mar del Plata - Créditos: Archivo LN
Nacida el 15 de junio de 1948 en Mar del Plata, Margarita Graziana Di Tullio tuvo una infancia difícil. Su padre esperaba un varón en su lugar por lo que no dudó en tratarla como tal. La hizo tomar clases de boxeo, le enseñó a manejar armas y la anotó en cuanta pelea existiera con el único objetivo de ganar dinero.
Fue debido a este contexto de violencia en el que creció que Margarita encontró en el delito un estilo de vida. ¿Sus primeras víctimas? Los fieles de Nuestra Señora de Lourdes a los que les robaba las limosnas que dejaban en las misas o las monedas que tiraban en la gruta. Luego, Di Tullio fue por los turistas que disfrutaban de la playa o los paisajes de “la feliz”.
A mediados de la década del ’60, esta delincuente de la zona del puerto cayó presa por primera vez tras el robo de un auto. Lejos de redimirse, a su salida sumó las casas y los departamentos de los veraneantes. Hasta que volvió tras las rejas otra vez.
Pepita La Pistolera, la madama de la costa
Luego de separarse de su primer marido (un suboficial de la Armada), Pepita “La pistolera” empezó a trabajar en la noche marplatense como copera en un cabaret. ¿Su función? Lograr que los clientes beban lo más posible, ya que se llevaba un porcentaje por cada consumición.
Hizo tan bien su trabajo que Di Tullio logró tener sus propios boliches. Fue con su cuarto esposo y padre de sus hijos menores, el pescador Guillermo Schelling (antes tuvo un hijo con Guillermo Cabrera y otro con Horacio Triviño) que regenteó Neisis, un club nocturno ubicado en la calle 12 de octubre. Con el tiempo, llegó Rumba.
Fue en esta nueva labor de madama marplatense que Marga (así le decían sus seres queridos) conoció a Alejandro “El Tarta” Lozada. Este hombre -que tenía negocios con su marido- se convirtió en el custodio de sus locales. Una noche (se desconocen los motivos), la dueña del cabaret decidió prescindir de sus servicios y le pagó una suma de dinero a modo de indemnización. Lo que Margarita nunca imaginó es que este hampón volvería para vengarse.
La noche en que perdió su anonimato
Fue en la madrugada del 20 de agosto de 1985 que Lozada (junto a su hermano Mariano y su amigo Américo Córdoba) irrumpió en su casa en busca de “lo que le correspondía”. Tras amenazarla con violarla a ella y a sus hijos, Di Tullio tomó el arma calibre 38 que siempre guardaba bajo su almohada y disparó. El saldo final: dos de los matones cayeron muertos y otro logró escapar.
Tras este hecho, Margarita volvió a la cárcel (un lugar del que entraba y salía con frecuencia) sin embargo, esta vez, la sentencia fue más benévola: tres años de prisión en suspenso por exceso en legítima defensa.
Esta historia, que le valió el apodo de Pepita “La pistolera”, terminó con su anonimato para siempre. Fue así como Marga pasó por el detector de mentiras de Chiche Gelblung y por la mesa de Mirtha Legrand, donde contó su acto heroico con lujo de detalles. Desde entonces, se volvió habitué de la sección de policiales de los principales medios debido a la lluvia de denuncias por explotación sexual y venta de drogas.
Luisana Lopilato, Lucía Puenzo y Pepita La Pistolera. - Créditos: Archivo LN
El 25 de enero de 1997, cuando mataron al fotógrafo José Luis Cabezas, su nombre y el de su pareja de ese entonces (Pedro Villegas) fueron la cuartada perfecta para resolver el caso rápidamente. Sin embargo, esta vez no tenían nada que ver. Hasta comprobar su inocencia, Pepita volvió a pasar una estadía en la cárcel de Dolores.
Su figura volvió a escena cuando se produjo el robo al Banco Río en 2006. Si bien ella tampoco tuvo que ver con esta emboscada millonaria, su hermana Alicia era la mujer de uno de los asaltantes (Alberto De la Torre) y la que lo denunció luego de descubrir que éste la estaba engañando con otra mujer. Por ella, a quién Pepita llamó “buchona”, cayó toda la banda.
¿Cuándo murió Pepita “La Pistolera”?
En sus últimos años de vida, Pepita “La pistolera” enfrentó algunos golpes que pusieron a prueba su entereza. En 2002, su nueva pareja -Rubén Darío Cortés- falleció en un accidente automovilístico, haciendo que una vez más Margarita pase al bando de las viudas. Sin embargo, la mayor pena de su vida llegó con la muerte de su primer hijo Guillermito Cabrera en 2007.
Dos años después, más precisamente en julio de 2009, Pepita se encontraba en la provincia de San Juan (donde dicen que tenía un nuevo amor) cuando sufrió un derrame cerebral. Inmediatamente fue trasladada en un avión sanitario al Hospital Privado de la Comunidad de Mar del Plata, donde estuvo internada hasta el día de su muerte, el 30 de noviembre. Tenía 61 años.
“Cuando muera, quiero que brinden con champagne y escuchen cumbia. No los quiero tristes porque los voy a estar mirando”, habría dicho años atrás. Por supuesto que sus deseos eran órdenes y el velorio fue una verdadera fiesta. Con música de Sandro sonando de fondo, el cortejo fúnebre se paseó por toda la zona del puerto hasta llegar a la puerta de su cabaret. “Sus chicas” lloraban mientras los vecinos aplaudían y los barcos dejaban sus banderas a media asta para despedir a esta marplatense que, a pesar de su costado oscuro y criminal, se convirtió en leyenda y pasó a la historia de los policiales.
Cynthia Caccia Egresada de la carrera Ciencias de la Comunicación de la UBA. Se destaca en temas de actualidad, espectáculos, historias de vida y diversidad.
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