Me separé: aprendizajes después de una ruptura
Separarse es tomar la decisión de dejar de estar al lado de una persona que por unos años fue con quien decidiste compartir parte de tu vida. Se abre un tiempo de incertidumbre, pero se sale con saberes aprendidos.
7 de julio de 2022 • 00:09
Me separé y esto aprendí después de mi ruptura - Créditos: Getty
Separarse es tomar la decisión de dejar de estar al lado de una persona que por unos años fue con quien decidiste compartir parte de tu vida.
Cuando te crías en una familia que te enseña que el amor es para toda la vida, un día crecés y te das cuenta de que, después de unos años, ese amor ya no está. Entonces, ahora… ¿qué se hace? ¿Cómo se rompen esos sueños? ¿Cómo se sale de esa creencia? ¿Cómo sigue la vida?
Cuando alguien decide separarse todo se transforma, algo se quiebra en la persona, su mundo se derrumba, todo deja de tener sentido. Es como si una nube medio gris te inundara, te convirtieras en una persona llena de preguntas e incertidumbre. ¿Y ahora por dónde se sigue? ¿Puedo aprender algo de esta experiencia?
Vienen días de dolor, angustia, duelo por la pérdida y decepción de lo que no fue. Los días oscuros y de llanto sin parar eran necesarios para luego sentir alivio, paz y esperanza.
Escuchar tu voz interior
En esos momentos de incertidumbre lo que más ayuda es confiar en uno mismo y en nuestro corazón, abrazar todas tus luces y tus sombras respetando tus momentos, tu cuerpo, lo que vas necesitando.
Escuchando, escuchando… ¿pero escuchando a quién? A vos misma, esa voz interna que te dice: ‘Todo va a estar bien, hay luz, se puede volver a creer en el amor, en las nuevas oportunidades’.
Perdonando, pero fundamentalmente perdonándote a vos misma, aceptando lo que la vida tiene preparado para vos. El perdón viene de la palabra. Perdonar y perdonarte es tan importante porque ayuda a sanar y mirar para adelante, sin rencor, simplemente aceptando lo que pasó.
Cuando empezás a pensar en vos
Cuando entrás en ese proceso de sanación, todo en tu vida empieza a tomar otro brillo. Cuando te encuentres ahí, vas a empezar a apoyarte en esas personas “mágicas”, entendiendo cómo “mágicas”, a esas que solo con su presencia y energía nos hacen sentir en armonía, que solo con un abrazo, una palabra o escuchando iluminan tu vida.
Comenzás a valorar y amar el tiempo para vos, para conocerte escuchando que necesitás. Volver a lo que te gusta para poder cumplir tus sueños y hacer lo que te hace feliz.
Para que, al final, te termines enamorando de vos misma, agradeciendo cada momento, entendiendo que todo es perfecto y armónico.
Una separación que por momentos parece un desgarro es el puntapié para el mejor cambio de tu vida. ¿Qué ayuda para estar y vibrar ahí? Amarse, conocerse, escucharse, disfrutar de las pequeñas cosas, viajar, leer, descansar, escuchar tu cuerpo, moverse, rodearse de personas que ames y agradecer todo lo que ya es en tu vida, cada logro y conquista que te hizo ser ese ser humano que sos, pero, sobre todo, también, siendo fiel a vos misma y confiando en la magia de la vida.
Este proceso y la sanación va a depender de vos y tus ganas de mirar el mundo con otros ojos.
Salir a brillar con otra luz potenciando tus habilidades, amándote primero para así poder confiar de nuevo en el amor. Recordando que sanando volverás a amar. Tu poder personal y confianza interior son claves para seguir adelante. Animate a encender tu potencial, esa luz que habita en vos. La vida te esperará…. con experiencias y amores mágicos.
Todo lo vivido ayuda a convertirte en esa persona que sos hoy.
EXPERTAS CONSULTADAS: Ana Inés Bruchmann, Delfina López Córdoba: IG: @demagias
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