Calma: 5 estrategias para mantenerla en tiempos de incertidumbre. - Créditos: Getty
Una vez le pidieron a un pintor que exprese en un lienzo cómo entendía que era la paz. Esta persona dibujó un acantilado frente a un mar embravecido en medio de una enorme tormenta. Las personas se preguntaban dónde estaba la paz en esta pintura: pero el buen observador podía ver que, en una parte del acantilado, en un hueco había un nido, donde la madre pájara estaba cuidando con amor a sus pequeños pichones. Así es la calma: no depende de lo que suceda afuera, sino, más bien de cómo se está por dentro.
En momentos de crisis y situaciones inciertas es común experimentar la pérdida del control emocional. Puede resultar sencillo caer en la preocupación excesiva, experimentar temores, enojo, depresión y sentir que nada tiene sentido, que no hay esperanza de cambio, y que cualquier cambio posible solo podría ser para peor.
En medio de esto la verdadera paz es interior y se puede alcanzar. En el ritmo de la vida actual, donde las demandas y el estrés parecieran no ceden nunca, encontrar la calma interior se convirtió en una búsqueda cada vez más relevante para la propia calidad de vida y bienestar.
La calma interior es un estado de equilibrio emocional en el cual nos sentimos en paz con nosotros mismos y el entorno. No significa que no se enfrenten dificultades o que se ignoren los problemas; más bien, implica que se es capaz de afrontarlos con serenidad y resiliencia.
El camino hacia la calma interior comienza con el autoconocimiento. El psicólogo Carl Jung era reconocido, precisamente. por ayudar a las personas a reconocer su mundo interior. No solo pensar en qué te preocupa, cuáles son tus miedos y preocupaciones más profundos, sino también el tomarse un tiempo para reflexionar sobre los propios pensamientos y emociones.
La introspección permite identificar las fuentes del estrés y ansiedad, por un lado, pero además te va a ayudar en algo más trascendental, que es reconocer tus valores, que cosas te mueven, te hacen bien, te ayudan. Descubrir qué es valioso para vos es un primer paso a alcanzar calma, porque ese paso te va a guiar a reconocer en qué sentido querés llevar tu vida. Para alcanzar esta calma es importante tener en cuenta estos aspectos:
Qué tener en cuenta para alcanzar la calma
1
Observar tus emociones: para encontrar la calma es importante aprender a gestionar nuestras emociones. La práctica de la atención plena o mindfulness es una herramienta poderosa. Tomarnos el tiempo para estar presentes, observar nuestros pensamientos y emociones sin juzgarlos y respirar conscientemente nos ayuda a reducir la ansiedad y evitar la rumiación constante.
2
Las relaciones personales pueden ser una fuente importante de estrés, pero también pueden proporcionar apoyo emocional. Fomentá relaciones saludables, estableciendo límites y comunicándote de manera efectiva. La calidad de tus relaciones influirá en tu calma interior.
3
Establecer límites: muchas veces, la falta de límites personales favorece al estrés. Aprender a decir "no" cuando sea necesario y establecer límites saludables permite tener tiempo y energía para cuidar de sí mismo. Esto es esencial para encontrar la calma interior. Muchas veces, al decirle un “sí” a los otros, estamos diciendo un “no” a nuestra propia paz. Cuando nos decimos el sí a nosotros estamos poniendo límites y dando prioridad al autocuidado, y esto es esencial para mantener la calma. Es importante poder dedicar tiempo a actividades que te llenen, como el ejercicio, la meditación, la lectura o simplemente disfrutar de un buen baño.
4
Quienes realizan actividad física y tienen hobbies creativos están mucho más cerca de la paz interior: que tu vida no se convierta en una rutina de trabajo y responsabilidades. El tiempo libre es crucial para encontrar la calma. Conviene programar momentos de descanso y recreación en tu agenda y protegerlos como si fueran una actividad importante de tu día, porque la es.
5
Ser agradecido: la gratitud es una herramienta poderosa para encontrarte con la paz. Tomar un momento cada día para reflexionar sobre las cosas por las que agradecer. Este ejercicio te ayudará a mantener una perspectiva positiva y reducir el estrés, de hecho, es aconsejable tener un cuaderno de agradecimientos, al que podés volver cuantas veces sea necesario para sentirte bien al ver las cosas buenas que te suceden y poder conectar con la calma.
Es bueno recordar que el hecho de alcanzar la calma, la paz interior, es un proceso continuo. No esperar resultados instantáneos y aceptar que habrá altibajos en el viaje, y eso está bien. Ser perseverante y seguir adelante es la clave.
Por Dr. Flavio Calvo (MN: 66869), gentileza para OHLALÁ!. Calvo es Dr. en Psicología, docente, tallerista y autor. En Instagram lo encontrás en @calvoflavio.
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