¿Tenés la vista cansada? Consejos y ejercicios para sentirte mejor

Nuestros ojos están forzados a fijar la vista de cerca casi todo el día, y no están preparados para esto; algunos consejos para amortiguar los problemas que se generan

22 de febrero de 2022 • 00:03

El cansancio desmedido es una de las claves para identificar las fallas en el metabolismo.

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Los ojos no están pensados para ver de cerca constantemente, sino más bien para cambiar de distancia focal todo el tiempo. Esto último es lo que mantiene el músculo de la acomodación en constante movimiento. Pero en este tiempo en que somos tan dependientes de la tecnología estamos casi todo el día fijando nuestra vista de cerca, cuando no es en el celular es en la computadora o en algún otro aparato electrónico.

¿Cuál es el impacto para nuestra vista? Justamente, la sensación de tener la vista cansada, ver borroso, tener una molestia como de una basura en el ojo.

El médico oftalmólogo Tomás Jaeschke precisa que tener la vista fija durante tanto tiempo fuerza el músculo de la acomodación y eso genera el cansancio visual. La concentración requerida para leer y la disminución propia del parpadeo en ese momento, tampoco contribuyen.

El parpadeo normal de alrededor de 20 veces por minuto disminuye 6 veces en promedio lo cual si lo sumamos a la cantidad de horas que estamos expuestos a una pantalla hace que al final del día le debamos mucha lubricación a los ojos.

Jaeschke y su colega el médico oftalmólogo Nicolás Becerra, también consultado por OHLALÁ! para esta nota, listaron una serie de consejos a tener en cuenta.

Tips y ejercicios para aliviar el cansancio visual

Implementar la regla del 20-20-20, que consiste en que cada 20 minutos miremos un objeto lejano durante 20 segundos y parpadeemos 20 veces. Esto tiene una doble función: una es relajar el músculo que estaba haciendo fuerza para ver de cerca y la segunda es lubricar el ojo. Es decir, esto les ofrece a los ojos la posibilidad de reiniciarse y recargar energías.
Mirar la punta de la nariz y mantener la vista entre 10 y 15 segundos.
Otro ejercicio básico es hacer círculos con la vista para que trabajen varios músculos de los ojos. Los círculos deben hacerse para un lado y luego hacia el otro.
También se puede practicar el control del movimiento de ojos dibujando el número 8 en el suelo con la mirada.
Usar lágrimas artificiales para lubricar los ojos si los siente secos y/o irritados. La irritación se da, en general, porque se seca, por lo que deberíamos usar lágrimas y no descongestivos.
Mantener la distancia de los aparatos móviles. Se recomienda sentarse a unos 60 centímetros o a un brazo de distancia de la pantalla, y colocarla a una altura tal que la vista vaya levemente hacia abajo para mirarla.
Disminuir el resplandor y el brillo. Los dispositivos con pantallas de vidrio pueden provocar resplandor. Para disminuirlo, se puede colocar un filtro de pantalla mate en el dispositivo. Ajustar el brillo y el contraste de la pantalla, y bajar las luces que estén cerca de la pantalla para aliviar el cansancio visual.
Cambiar la configuración de la pantalla con fondo negro y letras blancas disminuye la fatiga y tiene menor efecto miopizante en los niños.
Si se usan lentes de contacto, hay que saber que aumentan la resequedad y la irritación. Para aliviar estos síntomas, conviene usar anteojos en lugar de lentes de contacto cuando estamos con la computadora durante períodos largos. Una ventaja es que a los anteojos se les puede agregar un filtro de luz azul. Esto puede: mejoran el sueño, disminuyen el cansancio visual provocado por los dispositivos electrónicos y previenen enfermedades oculares.
Una regla muy importante es no usar dispositivos electrónicos al menos dos horas antes de dormir. Nuestro cuerpo detecta la luz azul como luz del día y estos dispositivos emiten esta luz (por esto también afectan el sueño). Pasar los dispositivos a modo noche atenúa un poco estos efectos.

Los efectos de la presbicia

“La presbicia es el normal envejecimiento del ojo y la disminución en la capacidad de acomodar la visión que se produce entre los 38 y los 50 años”. Así la define Jaeschke, y agrega que, si nosotros cambiamos las distancias entre lejos/intermedia y cerca, hacemos trabajar ese músculo y así ayudamos a que la presbicia no sea tan brusca.

“Si nos ponemos enseguida un anteojo que relaje este músculo y nos ayude a ver de cerca, o si la corrección no es la indicada y simplemente compramos un anteojo que nos queda cómodo podemos empeorar esta presbicia y generar una dependencia de los anteojos”, alerta el experto.

Ratifica que el cansancio visual tan padecido por todos es multifactorial. Y enumera: la disminución de la frecuencia del parpadeo, el exceso en el uso de las pantallas, el descanso insuficiente, la no lubricación de la superficie ocular adecuadamente hacen que los ojos se vean rojos y cansados e, incluso, puede generarnos dolores de cabeza.

“Lo principal para evitar todo esto es una consulta regular con el oftalmólogo. Esto es a partir de los 30 una vez cada dos o 3 años y, a partir de los 40, todos los años”, recomienda.

El tiempo de los niños frente a la pantalla

La mayoría de los padres y madres de bebés recién nacidos y niños pequeños no saben cuánto tiempo frente a la pantalla deberían permitirles a sus hijos. Hay muchos motivos válidos para limitar este tiempo. Becerra hace hincapié en la importancia de acotar el uso de pantallas por considerarlo “fundamental para la socialización y formación de vínculos, imprescindible para el normal desarrollo”.

Existen investigaciones que relacionan un mayor tiempo de pantalla en los niños pequeños con problemas de salud. - Créditos: Shutterstock

Además de esto, si bien no hay evidencia que demuestre que el uso de la pantalla dañe los ojos de los niños o el sistema visual en desarrollo, sí existen investigaciones que relacionan un mayor tiempo de pantalla en los niños pequeños con problemas de salud, como los siguientes:

Trastornos relacionados con la atención. Un estudio realizado en Canadá -que cita Jaeschke- demostró que los niños que pasan más de dos horas por día frente a una pantalla son ocho veces más propensos a tener Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) que aquellos que tienen un menor tiempo de pantalla.
Obesidad. Pasar demasiado tiempo frente a una pantalla implica que el niño dedica menos tiempo a actividades más saludables al aire libre, lo cual puede aumentar el riesgo de obesidad infantil.
Miopía (cortedad de vista). Desde la década de 1970 aumentó drásticamente la cantidad de personas con miopía en EE. UU. y en Asia. Las investigaciones sugieren que existe una relación entre pasar más tiempo frente a la pantalla y en el interior, en general. El estudio demostró que, cuanto más tiempo estamos al aire libre durante la primera infancia, más lenta avanza la miopía.

Oficialmente no se publicaron pautas específicas sobre el tiempo de pantalla en los niños, pero la Academia Estadounidense de Pediatría recomienda:

No permitir que los niños usen pantallas hasta los 2 años (salvo en videollamadas con aplicaciones como FaceTime o Skype).
Limitar el tiempo de pantalla a una hora en los niños de entre 2 y 5 años. Esto permite dedicar más tiempo a otras actividades con mayor movimiento corporal e interactividad, lo que es fundamental para el desarrollo físico e intelectual en la infancia.

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