Las tendencias de New York Fashion Week para este Otoño Invierno 2025

Pantone eligió el mocha mousse como color del año 2025 y en New York muchas de las colecciones lo tuvieron como protagonista. Es una tonalidad marrón cálida y suave que evoca a la crema de café o, porqué no, al mousse de chocolate. Se lleva a la perfección en sastrería pero también looks glam con pedrería, brillo satinado y hasta en pieles. Anna Sui lo lleva a su máxima expresión en un look que nos hace viajar a los años dorados de Hoolywood, Tory Burch en su sastrería XXL y Luar en un look drapeado con medias traslúcidas a tono.

La sastrería se lleva suelta y XXL. En las pasarelas de Tory Burch, Carolina Herrera, Prabal Gurung y Luar, entre otras, pudimos ver nuevas apuestas sastreras que funden lo mejor del lujo silencioso, sus géneros nobles y sus colores neutros, con lo original y divertido de la moldería no tradicional. Camisas o sacos con mangas extra grandes, faldas sobre pantalones (o skrousers), sacos oversize y pantalones baggy. La sastrería dejó de ser una cosa seria para convertirse en el outfit más canchero. Se habla también de “corp core” que propone convertir looks corporativos o de oficinista en apuestas sofisticadas y poderosas.

Bordeaux, granate, color vino (o merlot, como le dicen en inglés) es otro de los grandes tonos del año. Ya lo vimos en la Semana de la Alta Costura de Paris, el bordó y todas sus variantes se viene en total looks, prendas protagonistas y accesorios joya. En New York, se destacó en Carolina Herrera con un total look (cartera incluída), mientras que en Prabal Gurung y Sergio Hudson se combina con tonos cherry o rosa palo (otro color tendencia).

Los abrigos peludos y de grandes dimensiones están de vuelta. Y aunque hay de estilos variados, el gran protagonista es el que se parece al clásico tapado de piel marrón de la abuela como el que presentó Prabal Gurung. Muy old money, en looks súper glam, el abrigo de piel marrón de toda la vida is back (eso sí, la mayoría confeccionados con pieles sintéticas).

Christian Siriano, Ulla Johnson, Carolina Herrera y muchos, muchos más. Los naked dresses siguen vigentes este año y cada vez con más adeptas. Con top y bombachudo a la vista se llevan en tono nude, negro o incluso en colores pasteles. ¿Lo nuevo? El juego de tramas: redes, lunares o encaje con la transparencia necesaria para dejar ver ropa interior y mucha piel. En invierno el naked dress más glamoroso se combina con capas oversize como la que eligió Wes Gordon para cerrar el desfile de Carolina Herrera.

Guantes de ópera (hasta el codo), guantes cortos, de cuero, de gamuza, de piel, más o menos extravagantes, esta temporada se convierten en el accesorio estrella. ¿Nos animamos a adoptarlos? Eso todavía no lo sé pero tanto las pasarelas como el Street style de New York piden a gritos que lo hagamos.