Dólares en Qatar: ¿cómo asegurarte que tus dólares no sean rechazados?

¿Cuáles son los billetes de dólar rechazados? El “dólar cara chica”, emitido en 1914, así conocido dado que el rostro del prócer impreso, Benjamin Franklin, se muestra en un tamaño más reducido que en los billetes más modernos.

Si bien en Argentina la mayor parte de las casas de cambio por el momento no se niegan rotundamente a aceptar este tipo de dólares, como sí pareciera estar sucediendo en la sede del Mundial, ofrecen un precio diferencial, más bajo que el “cara grande”, en caso de que uno quiera venderlos. La justificación detrás nunca quedó del todo clara.

La diferencia de precio, que es de aproximadamente un 4%, aunque puede llegar a ser de hasta el 7%, podría no parecer abismal, pero va cobrando peso y dolor en el bolsillo a medida que aumenta el monto a intercambiar.

Pero incluso esta segunda versión está enfrentando dificultades a la hora de la transacción. Esto se debe a que, si bien fue emitida mucho más recientemente, en 1996, 17 años más tarde apareció un nuevo tipo de billete, que parece ser el único indiscutiblemente aceptado en cualquier país: el “dólar azul”. Es fácilmente reconocible debido a la banda de dicho color que lo atraviesa, diseñada como medida de seguridad para dificultar las falsificaciones, además de que el rostro de Franklin no aparece enmarcado en un óvalo, a diferencia de los dos casos anteriores.

En caso de tener billetes de versiones anteriores y querer evitar inconvenientes futuros, efectivamente existe una forma de canjearlos por los más modernos. Se trata de depositarlos en el banco y luego retirarlos.

Como comentamos antes, de acuerdo a la FED, las tres ediciones en circulación del papel de 100 dólares se encuentran vigentes y son aceptadas como moneda de curso legal. Si bien en las casas de cambio se vive otra realidad, lo cierto es que los bancos tienen que acatar la ley.

Por eso no pueden negarse a tomarnos las versiones más antiguas y, luego de depositar los billetes viejos, cuando volvemos para retirarlos tenemos muy altas probabilidades de recibir los nuevos, aunque puede que no en su totalidad. En todo caso, esta operación puede repetirse cuantas veces sea necesario hasta lograr obtener el 100% de los billetes en su versión más reciente.

Para realizar esta operación, debemos tener el recaudo de asegurarnos de poder justificar la fuente de los fondos. En otras palabras, esto significa que podría encenderse una alarma en caso de que nunca hayamos hecho una compra de dólares de forma legal, ya sea por home banking o a través de la bolsa (el tan conocido dólar MEP), y luego aparezcamos en el banco con billetes cuyo origen no podamos explicar.

IG de la autora: @modofinanzas