Mon Laferte en el Movistar Arena: una artista pasional que emocionó a todos
Era un show esperado que resultó vibrante, estremecedor, por momentos. La artista dejó voz, cuerpo y alma para el público que –dijo– más ama.
5 de noviembre de 2022 • 01:33
Mon Laferte conmovió con un show en el Movistar Arena, en Buenos Aires. - Créditos: Getty
Sabíamos que el regreso a la Argentina de Mon Laferte sería especial: hacía 3 años que no venía a la Argentina. Y en el medio hubo una pandemia, que fue para Laferte, un tiempo de creaciones: fue mamá por primera vez y también dio a luz dos discos: Seis y 1940 Carmen.
Esta noche de viernes el Movistar Arena vibró para Mon: la cantante chilena radicada en México nunca había estado en Buenos Aires ante tanto público que la abrazara con sus coros, sus palabras de amor, sus celulares siempre en alto para llevarse una foto, un video, para iluminar y convertir el estadio en un mar de estrellas. "Es mi show más importante en Buenos Aires", dijo.
Bolero, pop, música regional, intimidad, juego, actuación, telenovela. La artista pasó por todo. Tiene 7 discos y el listado de temas fue variado: en más de dos horas hilvanó 26 temas. Arrancó a puro bolero, melancólica: “Aunque te mueras por volver”, “Tormento”, “Invéntame”, “Amor completo”, "Antes de ti”, “Si tú me quisieras”…. interpretados como si se le fuera la vida en ello. Sus letras la acompañan en esa representación trágica: “quiero comerte el corazón”, “quiero soñar con nuestro funeral”, “mi boca pintada de lamento” son algunas de las frases que reverberaban como desde las entrañas.
Laferte recorrió clásicos y también les hizo lugar a sus nuevos temas. Poco importaba si eran nuevos, porque su público ya se sabía todas las letras. Por momentos ella, casi incrédula, apagaba su voz para escuchar a su gente cantar. Sonreía al oír ese arrullo masivo de un público que la esperaba, porque la admira, la clama. “Te amo”, le llegaba a viva voz hasta el escenario. También le alcanzaban papelitos con mensajes, celulares para pedirle fotos.
Quizá el punto supremo fue, ya casi sobre el final, cuando sonó “Tu falta de querer”. El estadio se encendió y la homenajeó a Mon, delicada, apasionadamente, con su canción emblema. Ella escuchaba, sonreía y agradecía por la presencia, por ese coro, por el amor.
En un momento, sin detener el show, en medio de una canción empezó a referirse a una persona del público, le decía que ahora sí, que le preguntara a su enamorada si quería casarse con él. Iluminaron a una pareja, sonó una especie de acorde nupcial: “No saben lo que les espera”, bromeó, para seguir con sus desahogos amorosos. "Hagamos llorar esa guitarra", le propuso a uno de sus músicos. Siguió el concierto.
Las más de dos horas volaron, fue un tiempo de un ritmo propio, sin relojes. La marca del tiempo se vio, tal vez, en los cuatro cambios de vestuarios: arrancó con un vestido negro, que por momentos se volvía plateado, algo psicodélico; siguió con uno blanco corto; luego un traje negro clásico –¿tal vez le dio un aire tanguero?- para cerrar con un vestido colorado brillante escotado, como para una fiesta. Porque fue una fiesta.
Nos regaló el lujo de verla cantar y tocar la guitarra eléctrica y la criolla y la armónica…una maestra de la música y la diversidad. Dejó en claro que lo suyo es la búsqueda, la exploración, la actuación. Porque canta, toca instrumentos y también actúa: todo su show tuvo un tinte teatral.
Cazzu fue una de las invitadas de Mon Laferte: juntas interpretaron Fuiste, de Gilda. Nadie quedó sin bailar. - Créditos: Gentileza Alejandro Viedma
Tampoco faltaron los invitados, que le dieron al concierto dos momentos de renovada intensidad: Mateo, de Conociendo Rusia, con quien cantó Placer Hollywood, un “tema orgásmico”, definió Laferte; y Cazzu, que despertó el baile total en el estadio, cuando interpretaron juntas Fuiste, de Gilda.
La gira de Mon arrancó el 22 de junio pasado con entradas agotadas en el Auditorio Nacional de la Ciudad de México, estuvo en diversas ciudades de México y España, también en Santiago de Chile este jueves, justo antes de llegar a la Argentina.
Sin dejo de cansancio por la gira, Laferte estuvo radiante en un show en el que lo dejó todo: voz, cuerpo y alma. Dijo varias veces que no quería irse. Y al despedirse soltó: “Siguen siendo el mejor público. Te amo, Buenos Aires”. Es un amor correspondido, tal vez alcance para compensar tanto desamor volcado en las letras de sus canciones.
Mon Laferte hizo su show más numeroso en Buenos Aires: colmó el Movistar Arena. - Créditos: Gentileza Alejandro Viedma
Los discos de Mon Laferte: “Desechable” (2011), “Tornasol” (2013), “Volumen 1” (2015), “La Trenza” (2017), “Norma” (2018), “Seis” (2021) y “1940 Carmen” (2021).