El incómodo momento de Sol Pérez en una entrevista: ¿por qué no está buena la presión sobre la búsqueda de un embarazo?

Si bien en su momento la exchica del clima prefirió guardar silencio, fue en las últimas horas en su paso por Bondi Live; el streaming de Ángel De Brito que habló al respecto. “¿Estás embarazada, Sol Pérez?”, le preguntó el conductor fiel a su estilo. “Estoy buscando. Hace mucho tiempo que estoy buscando. Pero cuando suceda, voy a poder decirlo con toda la alegría de mi corazón”, reveló desmintiendo que esté en la dulce espera. 

Respecto a las especulaciones desatadas en la fiesta más importante de la televisión, lanzó: “Salí y estaba lleno de mensajes. La verdad que estoy buscando. Ojalá que en algún momento me suceda y cuando lo pueda decir, voy a estar muy contenta”.

Sol Pérez no es la única famosa que ha sido víctima de este acoso mediático en su búsqueda de ser madre. Antes de tener a Sarah, Barby Franco también habló de la presión que sufrió en su camino hacia la maternidad, definiéndola como “acoso en fertilidad”. “Cansada del acoso en fertilidad. Duele. Más que nada cuando uno está en lucha. Más de una me debe entender”, escribió -junto a un corazón partido- la mujer de Fernando Burlando en sus redes, abriendo así el debate.

En el plano internacional, fue Jennifer Aniston la que padeció estos comentarios o preguntas que muchas veces se convierten en dardos de angustia y dolor. “Lo estaba intentando. Pero fue un camino muy complicado para mí. Todos esos años de especulaciones... la pasé muy mal. Mientras decían esas cosas estaba haciendo tratamientos, intenté la fertilización in vitro, tomaba tés chinos, lo que fuera que me ayudara a quedar embarazada”, se sinceró la actriz de Friends en la revista Allure.

Mientras que, en algunos casos, la no concreción de un embarazo puede deberse a una decisión personal, en otros hay cuestiones médicas (diagnósticos de infertilidad, tratamientos fallidos, abortos espontáneos, entre otras cuestiones) que pueden estar demorando la llegada de un bebé. “La presión social agota y angustia”, afirma la psicóloga Martina Bottiroli al ser consultada por OHLALÁ!

Es que, si bien la mayoría de estos comentarios no tienen mala intención, "duelen", ya que entra en juego el dolor y la presión de tener que explicar lo que muchos prefieren transitar en silencio. “El otro no tiene idea de cuáles son los procesos internos de cada persona ni de cada pareja”, advierte la profesional de Talkit, invitándonos a repensar este tipo de actitudes.

Ojalá tuviésemos un impermeable invisible que nos permitiera que las opiniones de los otros no tuvieran impacto sobre nosotras… pero no. Por eso, es muy importante ser cuidadosos y respetuosos con nuestras opiniones y juicios sobre el otro porque eso “influye” y mucho. “Nos la pasamos escuchando a aquellas mujeres que cuentan haber quedado embarazadas al mes de iniciar una búsqueda. Y es cierto, esto pasa, y mucho. Pero también están aquellas que vienen atravesadas por largas búsquedas de, incluso, años. Estas mujeres están vulnerables a la opinión externa y están en todo su derecho a sentirse expuestas y vulnerables”, sostiene la profesional.

Abrazarlas, contenerlas, acompañarlas, brindarles herramientas y mucho trabajo autocompasivo es la propuesta mientras recordamos que la opinión externa se mide, en general, con nuestra “seguridad o inseguridad” frente a ciertas cosas. “Por eso, lo interesante es no quedarnos con la mirada o la opinión del otro, sino sintonizar con lo que realmente una desea. Y a partir de allí, hacer nuestro propio recorrido”, aconseja Bottiroli.