Tragedia en Barcelona: qué se sabe hasta ahora sobre el caso de las gemelas argentinas

Además de las dos sillas que habrían usado para tirarse, Alana y Leila dejaron dos cartas manuscritas en donde expresaban el malestar que sentían por el bullying que sufrían en la escuela. En ellas escribieron que, por ser extranjeras, por su acento argentino y por el reciente cambio de identidad de género de una de ellas, no podían seguir soportando tanto dolor. “Estoy cansada de que me hagan bullying en la escuela, no lo soporto. Yo quiero ser feliz, pero evidentemente yo esto lo voy a sufrir el resto de mi vida y tomé la decisión de no seguir”, escribió Alana.

Por su parte, Leila, plasmó su deseo de apoyar y seguir a su hermana en la decisión, y le pidió disculpas a su familia por quitarse la vida: “Disculpas a todos. Ustedes saben lo que yo amo a mi hermana. Yo vi todo el bullying que sufre ella. Voy a hacer lo que ella decida. La voy a acompañar a donde ella quiere”.

Las hermanas estaban cursando el primer año en el Instituto Llobregat de Sallent, una ciudad a 70 km del centro de Barcelona, donde la familia de argentinos se había instalado hacía un año y medio.

Los Mossos d´Esquadra, la policía autónoma catalana, entregó el viernes pasado la conclusión de sus investigaciones sobre la tentativa de suicidio de las gemelas. El informe policial confirma que las hermanas sufrían bullying escolar por parte de sus compañeros del Institut Llobregat de Sallent, donde las autoridades eran conscientes del acoso que sufrían las menores.

Hasta el momento sus papás, Maia y Lucas –quien se encontraba en el domicilio en el momento de la caída–, aún no hicieron declaraciones ni fueron interrogados. Tienen un tercer hijo varón, de 10 años.

Alana, o como prefería que la llamasen, Iván, recibía atención psicológica de parte de una profesional de la Fundació Althaia de Manresa, quien la estaba ayudando a comunicarle a sus padres su transición de género.

Los padres de las gemelas ya habían denunciado en la institución escolar que sus hijas eran objeto de burla por ser extranjeras y por su acento argentino.

Los abuelos, Fernanda Castagna y Gustavo Lima, viajaron desde Argentina para acompañar a sus hijos. “El bullying empezó porque eran argentinas, tenían acento argentino. Y eso se agravó cuando Alana quiso llamarse Iván y vestirse como varón", señaló Lima a los medios españoles.

Leila, la gemela que sobrevivió a la caída, permanece internada en terapia intensiva. El parte médico incluye fracturas en el cráneo, la mandíbula y en ambos brazos, más lesiones internas importantes en un pulmón e hígado. Pese a ello, habría mostrado una leve mejoría y los especialistas estarían evaluando la posibilidad de sacarla del coma farmacológico.

El Observatorio Contra la Homofobia de Cataluña calificó la muerte de Iván como un “asesinato social” y expresó: “Un niño trans de 12 años se suicida en Sallent, Cataluña. Un suicidio marcado por la intolerancia, el acoso escolar y la transfobia”.