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Deco: estas son las 5 señales que te demuestran que tenés que ordenar tu casa

Los espacios que habitamos influyen en nuestras emociones y nuestros estados de ánimo, por eso es importante ordenar nuestros espacios para tener tranquilidad, armonía y protección.


5 señales de que tenés que ordenar tu casa.

5 señales de que tenés que ordenar tu casa. - Créditos: Getty



Los espacios que habitamos influyen en nuestras emociones y nuestros estados de ánimo. Así, el hogar es nuestro espacio personal en el que buscamos tranquilidad, armonía y protección del mundo exterior. Cuando el desorden y la acumulación de objetos se apodera de nuestra casa, la armonía se rompe y nuestro bienestar se ve afectado.

Reconocer las señales que indican que tu casa necesita orden es el primer paso para lograr transformar tu espacio en ese oasis en el que puedas relajarte al final de cada día.

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    Falta de espacio y acumulación de objetos

    Si tus pertenencias ya no entran en tus lugares de guardado o tenés acumulación de objetos en diferentes partes de la casa generando incomodidad es una señal de que necesitás ordenar. Empezá por revisar todo lo que tenés y elegí lo que realmente merece ocupar un lugar en tu hogar, ya sea porque lo amás o porque te resuelve la vida por su funcionalidad. Todo lo que no cumple con estas premisas, si está en buen estado, donalo, regalalo o véndelo y, si no, descartalo. 

    En general, los problemas de espacio no se resuelven con más espacio sino con orden. Porque el espacio, independientemente de su tamaño, siempre tiene un límite. Nuestros deseos y necesidades, en cambio, pueden ser infinitos. Entonces, siempre tendremos la habilidad de llenar cualquier espacio de guardado que tengamos a disposición y de hacer que termine resultando insuficiente.

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    Pérdida de tiempo y productividad

    Si perdés mucho tiempo buscando cosas por no saber dónde están o decidiendo donde guardarlas, si el desorden te distrae y te hace perder el foco de tus tareas importantes es probable que necesites ordenar. Una vez que elegís cuáles son las cosas que te querés quedar es necesario asignarle un lugar fijo a cada una, para que el orden cotidiano sea más fácil y rápido.

    Al momento de decidir cuál es el mejor lugar para cada cosa, deberías clasificar las pertenencias y luego guardarlas por categorías es de gran ayuda. Esto es una de las claves para lograr una organización que sea fácil de mantener en el tiempo. Asegurarte de que las cosas queden a la vista y al alcance de la mano también te va a ayudar a optimizar tus tiempos, ya que será más fácil encontrarlas y volver a guardarlas después de usarlas.

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    Comprar cosas repetidas

    ¿Alguna vez te pasó comprarte ropa igual o muy parecida a otra que ya tenías simplemente porque no la encontrabas? ¿O volver del supermercado y darte cuenta de que tenés un cajón abarrotado de un producto que solo consumís de vez en cuando? Esta es otra clara señal de que necesitás ordenar tus cosas.

    El proceso de ordenar por categorías a consciencia y de forma integral, sacando, revisando y eligiendo te va a permitir saber realmente que es lo que tenés, que te sobra y que te falta. Poner tus cosas en orden, te va a evitar gastos innecesarios futuros y te va a ayudar a ser una mejor compradora, más consciente y organizada.

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    Dificultad para limpiar

    Cuando las tareas de limpieza se complican por la cantidad de cosas que hay sobre las superficies o en los ambientes es tiempo de ordenar. Los ambientes ordenados, livianos en los cuales cada cosa tiene su lugar facilitan mucho las tareas de limpieza. 

    Una vez que logres asignarle a cada cosa un lugar proponete mantener despejadas las superficies de apoyo como mesadas de baños y cocina, mesas de luz, cómodas y escritorios. En las superficies solamente deberían quedar las cosas que te resultan visualmente atractivas a modo decorativo. Liberar el piso y los espacios debajo de la cama de objetos en desuso o en exceso también facilita enormemente las tareas de limpieza.

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    Estrés y sensación de agobio

    Cuántas veces hemos escuchado: “¡No sabés lo que es mi casa!” o ¡No quiero ni pensar en volver a mi casa!” Cuando tu casa en lugar de ofrecerte un refugio agradable en el cual relajarte, disfrutar y recargar energía te genera estrés o sensación de agobio es necesario pensar en encarar un proceso de orden.

    Tené en cuenta que un proceso de orden es un proyecto que, para que dure para siempre, debe hacerse de forma planificada y consciente una vez. Si hace meses o hasta años que venís conviviendo con el desorden, tratar de resolver todo en un fin de semana te va a generar agotamiento y quizás más frustración por no poder terminar. Lo ideal es hacer un plan e ir avanzando por categorías a tu ritmo, pero siempre con continuidad para ir viendo resultados y entusiasmándote con cada logro. 

 

Reconocer las señales de que tu hogar necesita orden es el primer paso para transformar tu espacio en un lugar armonioso que juegue a tu favor. Ordenar tu casa a fondo y establecer un sistema de organización perdurable en el tiempo va a hacer que las rutinas diarias sean más sencillas y que ganes en bienestar físico y emocional.

Si no podés hacerlo sola, siempre podés pedir ayuda a una organizadora profesional. Lo importante es que tu hogar refleje lo mejor de vos. Después de todo, ¡tu hogar es tu santuario!

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