10 plantas ideales para balcones con sol

Los claveles prosperan en balcones soleados sin requerir demasiados cuidados. Se recomienda plantarlos en tierra suelta y porosa para evitar el encharcamiento, ya que el exceso de agua puede favorecer la aparición de plagas o enfermedades.

Estas plantas son ideales para espacios soleados ya que requieren luz directa para florecer abundantemente. Es importante regarlas con frecuencia sin encharcar la tierra. Protege las petunias del viento para evitar que sus delicadas flores se deterioren.

La lavanda es perfecta para crear un ambiente campestre en el balcón. Es resistente al frío y su característico aroma impregna el espacio. Necesita mucha luz y poco riego para mantenerse saludable.

Estas flores silvestres se desarrollan mejor bajo el sol directo. Se recomienda plantarlas a cierta profundidad y dejar unos 20 cm de separación entre cada ejemplar. El riego debe ser moderado: cada dos o tres días en verano y cada 15 en invierno.

Las dalias son plantas bulbosas que florecen en verano y llenan de color los balcones hasta el otoño. Necesitan abundante luz y riego frecuente, evitando mojar las hojas y las flores. El abonado con materia orgánica favorecerá su crecimiento.

Estas plantas bianuales florecen principalmente en otoño, aunque en climas cálidos pueden hacerlo hasta la primavera. Para que prosperen, requieren tierra rica en nutrientes y una exposición solar de entre 6 y 12 horas diarias.

El romero, el tomillo y el orégano son opciones ideales para balcones soleados. Estas plantas no solo aportan aroma, sino que también requieren poco mantenimiento. El romero destaca por su resistencia a la sequía, el tomillo crece rápidamente como planta tapizante y el orégano es compacto y robusto.

Los geranios son resistentes y florecen desde abril hasta noviembre. Aunque no exigen mucho riego, es importante evitar que la tierra se encharque. Su floración abundante y colorida los convierte en una opción popular para balcones soleados.

Esta planta trepadora ofrece una intensa floración desde la primavera hasta el otoño. Con los cuidados adecuados, puede durar años y cubrir paredes, pérgolas o estructuras divisorias. Requiere riegos moderados dos veces por semana.

Los rosales son una opción clásica que destaca por su aroma y belleza. Necesitan sol directo y riego diario. Eliminar las flores y hojas marchitas favorecerá una floración más prolongada y saludable.