El lugar poco conocido para guardar las bananas por mucho tiempo y evitar que se pudran
Las bananas, adoradas globalmente, esconden un desafío: su rápida maduración. Aprendé a vencer este obstáculo con técnicas simples y efectivas. Tu cocina nunca volverá a ser la misma.
18 de octubre de 2024 • 13:20
Para mantener las bananas en su punto exacto de maduración se deben colocar en un lugar fresco, lejos de la luz directa y por separado - Créditos: Getty
Las bananas, apreciadas mundialmente por su dulzura y su practicidad, presentan un desafío único en la cocina: su rápida maduración. Muchos se enfrentan a la frustración de ver cómo estas deliciosas frutas, casi golosinas saludables, se deterioran antes de poder disfrutarlas plenamente. Sin embargo, existe una solución simple que pocos conocen: el lugar donde las almacenamos.
El etileno: el enemigo silencioso de la frescura
Para comprender cómo preservar las bananas, es crucial conocer el papel del etileno. Este gas natural, producido por frutas climatéricas –que son las que continúan madurando luego de su cultivo- como las bananas, manzanas y tomates, es el responsable de acelerar la maduración. El etileno desencadena una serie de transformaciones en la fruta y modifica su textura, color y sabor.
A medida que la banana "respira", utiliza oxígeno para metabolizar azúcares y almidón, liberando dióxido de carbono, agua y energía. Este proceso biológico genera etileno, que a su vez estimula cambios en la fruta. La cáscara pasa del verde al amarillo y, eventualmente, al marrón, mientras que la pulpa se ablanda progresivamente.
El gas etileno es el culpable de la maduración acelerada de las bananas - Créditos: Getty
El lugar ideal: lejos de la luz y de otras frutas
Contrario a la creencia popular, la heladera no es el mejor lugar para guardar bananas. Aunque las bajas temperaturas ralentizan la maduración, también pueden dañar la textura de la fruta, haciéndola menos apetecible. La clave está en encontrar un espacio a temperatura ambiente, fresco y alejado de la luz solar directa.
Una despensa o un estante alto y bien ventilado son opciones ideales. Estos lugares permiten que las bananas maduren naturalmente sin exponerse a condiciones que aceleren el proceso. Además, es fundamental mantenerlas separadas de otras frutas para evitar la concentración de etileno.
Trucos adicionales para prolongar la frescura
Además de elegir el lugar adecuado, existen otras técnicas para conservar las bananas por más tiempo:
Priorizar el consumo: Comer primero las bananas más maduras evita que el proceso se extienda al resto.
Separar el pedúnculo: Algunos optan por cortar esta parte del tronco o envolverla en papel aluminio para prevenir la propagación del oscurecimiento.
Mantenerlas individuales: Si se compran en racimo, separarlas puede ralentizar la maduración conjunta.
Evitar golpes: Los impactos, por mínimos que sean, aceleran la podredumbre.
En el caso de que las bananas ya se hayan pasado de punto, se las puede utilizar para elaborar distintas recetas - Créditos: Getty
¿Cuándo desechar una banana?
Es importante saber distinguir entre una banana madura y una que ya no es apta para el consumo. A medida que maduran, las bananas se vuelven más dulces y su textura más suave. Sin embargo, si la piel está muy oscura, blanda al tacto y presenta manchas negras penetrantes, es mejor descartarla. En caso de manchas superficiales, se puede cortar la parte afectada y consumir el resto.
La versatilidad de la banana madura
Incluso cuando las bananas están un poco pasadas, no hay por qué desperdiciarlas. Estas son ideales para preparar deliciosos licuados, hornear pan de banana o incorporarlas en postres y tortas. Su dulzor intensificado y textura suave las convierten en ingredientes perfectos para múltiples recetas.
En esta nota: