Viajar en avión con personas con autismo: una mamá cuenta la experiencia con su hijo
Ludmila Gurchenco contó cómo fue el primer viaje en avión con su hijo Pedro. Brindó consejos a tener en cuenta para que la previa y el viaje en sí sean un momento de disfrute.
3 de marzo de 2023
Viajar en avión con un niño con autismo - Créditos: Getty
Viajar en avión es una situación que suele generar estrés en la mayoría de las personas. Pero es particularmente estresante para quienes tienen un trastorno del espectro autista.
Tener que hacer fila para hacer el check in, realizar los chequeos en migraciones, la espera en sala de embarque, la sobrecarga de estímulos sensoriales… Todo se vuelve un desafío que puede generar mucha ansiedad en quienes tienen autismo y deben viajar, o en sus acompañantes.
Ludmila Gurchenco publicó un hilo en Twitter contando cómo fue el primer viaje en avión con su hijo Pedro, algo que le generaba un miedo paralizante. Sin embargo, recibió la asistencia necesaria y logró viajar sin sobresaltos.
La mujer, locutora de radio, brinda consejos muy útiles para quienes tienen que viajar con personas con autismo.
Consejos a tener en cuenta
El primer dato que comparte es económico: para quienes cuenten con un certificado único de discapacidad (CUD) y vayan en auto el estacionamiento de larga estadía es sin cargo, si cuentan con el símbolo internacional de acceso. No es un dato menor, teniendo en cuenta que el estacionamiento puede llegar a costar $ 40.000.
En segundo lugar, Ludmila cuenta que existe un programa de acompañamiento a pasajeros que requieren asistencia, implementado por Aeropuertos Argentina 2000 y la Fundación Brincar.
Para hacer uso del servicio, hay que avisar a Aeropuertos Argentina 2000 unos días antes del viaje, indicando que hay un pasajero que necesita asistencia, junto con la fecha y la hora del vuelo. Inmediatamente la citaron para ese mismo día en el stand naranja del sector Arribos.
Cuando llegó, una persona los acompañó y asistió en todos los pasos previos a la subida al avión: check in, zona de control, trámites migratorios y sala de preembarque. Este acompañamiento tiene el objetivo de garantizar que se cumpla la prioridad y el trámite sea lo más rápido posible.
Pero además, su hijo recibió un kit con un pin distintivo, pictogramas para ir completando el paso a paso del proceso y una pelotita anti estrés para usar durante todo el tiempo.
La mujer destacó la atención y cordialidad de la tripulación de LATAM, la aerolínea por la que le tocó viajar. Y contó que a pesar de que uno de los vuelos se canceló por malas condiciones climáticas, desde la empresa hicieron todo para reducir la escala y que su hijo no tuviera que esperar tanto.
A la vuelta la gente de Aeropuertos Argentina 2000 los estaba esperando en la puerta del avión. Una muestra más de que la inclusión, además de necesaria, es posible.