¿Molestias de garganta por el frío?: los beneficios del té de manzanilla

Se fue pasando de generación en generación y hoy se rescata como un clásico con beneficios que no pasan de moda, el té de manzanilla ofrece un abanico de bondades a un par de sorbos de distancia.

por

Ezequiel Brahim

10 de julio de 2024

Los beneficios de tomar té de manzanilla. - Créditos: Getty

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En el vasto mundo de la naturaleza, la manzanilla se alza como un tesoro antiguo, apreciado por sus virtudes terapéuticas desde tiempos inmemoriales. Con su aroma evocador de la manzana, esta hierba ha dejado su huella en civilizaciones pasadas, desde la antigua Grecia hasta el Imperio romano. Como un vínculo entre la antigüedad y el presente, la manzanilla perduró gracias a su valor terapéutico.

La manzanilla despliega sus virtudes en múltiples formas. Su fragancia floral y sabor delicado hacen de su infusión una elección reconfortante. Pero su versatilidad no se limita a las tazas; la manzanilla cruzó los límites de la cocina y encontró su lugar en la cosmética. Desde champús aclaradores de cabello hasta lociones que enfrentan el acné, su presencia en el cuidado corporal abarca diversas presentaciones.

En formato de infusión, la manzanilla alberga una cantidad de beneficios: facilita la digestión, alivia inflamaciones, calma el estrés. Su papel en la promoción del bienestar es innegable. Con propiedades antiinflamatorias y una capacidad relajante del sistema nervioso, esta hierba se convierte en una aliada para los estímulos negativos cotidianos.

Beneficios del té de manzanilla para el descanso y el mejor horario para beberlo

Té de manzanilla: los beneficios de un clásico que vuelve. - Créditos: Getty

La manzanilla tiene más en su repertorio que su sabor y aroma agradables. Estudios descubrieron su capacidad para mejorar el sueño, ya que brinda un descanso reparador en las horas nocturnas. Esto se complementa con su aporte de quercetina, un pigmento vegetal que controla el azúcar en sangre, lo que colabora en facilitar digestiones pesadas. Esta doble función fomenta un mejor descanso.

Por esto, un buen momento para beber el té de manzanilla es antes de irse a dormir, como antesala un sueño reparador.

Cómo preparar el té de manzanilla

La receta para el té de manzanilla es sencilla y delicada. Con solo unas cucharaditas de flores secas de manzanilla y agua caliente como ingredientes principales. Cinco minutos de espera y la infusión está lista para endulzar y calmar. Se puede endulzar con lo que guste. Una opción que también alivia el dolor de garganta es combinarlo con miel.

A pesar de sus dones, la manzanilla tiene sus limitaciones. Para aquellos propensos a reacciones alérgicas o bajo tratamientos anticoagulantes, es esencial ejercer precaución y prever que no genere reacciones adversas. Además, las etapas del embarazo exigen consulta médica antes de incorporar la manzanilla en la rutina.

En una taza de té de manzanilla podemos encontrar más que una bebida. Podemos descubrir un vínculo con la historia, nuestro pasado y una puerta abierta a la salud. Desde la antigüedad hasta el presente, la manzanilla sigue siendo un regalo de la naturaleza.

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