Visitar a mi hermana (vegetariana) en Londres fue el inicio de una inintencionada dieta veggie. Un pasaporte para conocer no solo nuevos sabores sino también otras formas de consumo. Y es que Londres lleva lo vegetariano a otro nivel. A continuación, un recorrido para descubrir los imperdibles de este movimiento en la capital inglesa. Y no, no se trata únicamente de comida.
Hasta no hace mucho ser veggie y comer en un restaurant era una apuesta arriesgada. La carta vegetariana quedaba reducida, en más de uno, a una desabrida ensalada mixta. Algo así como un rápido truco de magia entre el mozo y el cocinero ante la pregunta: ¿tienen algo vegetariano? Después de que el comensal en cuestión ha leído el menú varias veces. Pero esa escena, alguna vez tan familiar, amaga con extinguirse. Hoy, las opciones veggies proliferan y se extienden más allá de las fronteras de restaurantes especializados.
Pensar los platos sin carne como sinónimo de aburrido o insípido es tan demodé como chatear por hotmail. No lo digo yo, The Economist proclamó a 2019 como el año del veganismo. En Argentina, un país donde en promedio cada habitante come más de 50 kilos de carne al año, puede sonar (todavía) como una profecía alocada. Sin embargo, Londres es el mejor ejemplo de que lo veggie, más que una tendencia pasajera, llegó para quedarse. No es casualidad que la capital inglesa sea el epicentro de esta movida. Fue en Gran Bretaña donde en 1944, Donald Watson acuñó el término "vegano" para diferenciar a aquellos vegetarianos que no comen productos de origen animal como lácteos, huevos o miel.
Las razones para sumarse a este universo verde son variadas. Magdalena (35 años, paisajista) cuenta: "desde chica me dio impresión comer carne. Cuando hice el Camino de Santiago vi muchos tambos y lugares donde tenían animales encerrados. Me dio pena y ahí me decidí". Para Joaquín (30 años, relaciones internacionales) el sistema de producción de carne y el sufrimiento animal lo llevaron a decantarse por una dieta vegetariana. Mientras que Carolina (34 años, arquitecta) no se considera vegetariana pero prefiere las verduras a la carne. Cuestiones nutricionales, medioambientales, animales o políticas son algunas de las aristas que atraviesan a este movimiento.
Aunque la corriente cruelty free no se reduce solo a la gastronomía. Se extiende también a cosméticos e indumentaria, y plantea un nuevo panorama de producción y consumo. Después de todo, somos lo que comemos (y lo que compramos).
Fed by Water
- 100% vegano
- Precios: entre 13-25 £
- En español, el nombre de este restaurant italiano significa "alimentado por agua" y hace referencia a su propuesta 100% vegana. Lasagna, rissotto o pizza son algunas de sus opciones. En Fed by Water puede resignarse el uso de productos de origen animal (reemplazado con quesos de soja o anacardos) pero nunca...nunca el sabor. Sus spaghetti alla carbonara con cúrcuma y tofu seducen al carnívoro más acérrimo. Mientras que su pizza margherita con pesto de pistacho, mozzarella vegana y tomates cherrys también es la fórmula perfecta para pasarse al lado veggie.
- Ubicado en el barrio de Dalston (la próxima promesa de gentrificación de la ciudad), en 59 Kingsland High St., Fed by Water está abierto al mediodía y a la noche.
- Una curiosidad: entre sus clientes se encuentran personalidades inglesas de la talla de J.K. Rowling, autora de la célebre saga de Harry Potter y Maisie Williams ¿Les suena? Quizás la conozcan como Arya Stark de Game of Thrones.
- Más info: https://fedbywater.co.uk/
What the Pitta
- Veggie al paso
- Precios: entre 7-12 £
- Los creadores de esta franquicia dicen que What the Pitta nació como todas las buenas historias: una charla de amigos, cerveza mediante. Lo cierto es que su propuesta logró introducir sabrosos platos veggies a la comida callejera. Ya sea su plato insignia, el vegan döner (a base de trocitos de soja, ensalada, hummus y salsa chilli), el falafel wrap (croquetas de garbanzos envueltas en pan de pitta con ensalada y salsa) o la ensalada de couscous; What the Pitta deja en claro que comer saludable, rico y al paso es posible.
- Un tip: La sucursal en el Boxpark de Shoreditch (un mall hecho de containers donde proliferan las tiendas de diseño) es la posibilidad de pasear, además, por uno de los barrios más cool de Londres, allí donde la tendencia y lo hipster proliferan. Está en Boxpark Shoreditch, local 52.
- Más info: whatthepitta.com
Luminary Bakery
- Girl Power
- Luminary Bakery ostenta desayunos saludables, un carrot cake poético y, en especial, una filosofía empresarial cuya su sororidad enamora. Se trata de una pastelería regenteada y atendida solo por mujeres. Aunque su originalidad no se detiene ahí. Este coqueto café de Stoke Newington es un emprendimiento social que busca empoderar a mujeres que han sufrido desventajas sociales y económicas. Así, a partir de cursos y el trabajo que realizan en la pastelería aprenden herramientas para poder encarar, más tarde, sus propios proyectos laborales. ¿El objetivo? Ayudarlas a romper con círculos viciosos de abuso, violencia y pobreza.
- La atmósfera de Luminary es tranquila y distendida. Ellas cocinan, se encargan del servicio, hacen bromas y da la sensación, por momentos, de estar en una reunión de amigas ¡Puro girl power! El local está en 71-73 Allen Road, Stoke Newington.
- Para probar: el café como lo conocíamos hasta ahora también se ha transformado al ritmo de esta movida healthy. Reemplazar la leche de origen animal por leche de avena, soja o almendras es una tendencia que cada vez pisa más fuerte en Europa y Londres, por supuesto, no es ninguna excepción. Sin embargo, cuando se trata de bebidas calientes, el café y el té no son las únicas opciones. El turmeric latte, una leche tibia combinada con cúrcuma y rica en antioxidantes, es la nueva vedette de la mesa. Ideal si querés escapar a las bebidas con cafeína o teína.
- Más info: www.luminarybakery.com
Lush
- Cosmética y activismo
- Esta marca de cosméticos nacida décadas atrás en Poole (Inglaterra) tiene como bandera hacer del mundo un lugar mejor ¡Y no se trata de una ONG! Es una empresa en toda regla. Pero en Lush, ética y ganancias van de la mano. ¿Cómo? Sus productos no están testeados en animales y, además, están aprobados por la Vegan o Vegetarian Society; dependiendo de su composición. Y es que, los vegetales son la base de la mayoría de sus artículos que incluyen cremas, geles, shampoo, bálsamos, aceites y sus populares bombas de baño, entre otros. Sin embargo, su compromiso sigue…. Apoyan activamente el comercio justo, causas sociales (como la igualdad social, derecho de minorías, entre otras) y el medio ambiente. De hecho, muchos de sus artículos se venden "desnudos", es decir, carecen de envoltorio. En otros casos, los envases son de materiales reciclados y reutilizables: podés recargarlos en sus tiendas ¡Y a menor precio!
- Hoy Lush tiene más de 900 locales alrededor del mundo y pueden encontrarse en 49 países, incluidos Inglaterra, España, Italia, Estados Unidos y Chile. Un mensaje positivo que se esparce por el mundo.
- Sabías qué...: La tienda de Covent Garden es una de las locaciones de My Fair Lady, la película que protagonizó Audrey Hepburn y, en honor a ella, diseñaron la bomba de jabón "Luverly".
- Más info: www.lush.com 175-179 Oxford St, Soho.
The Third State
- Moda sostenible
- Dónde: en 27 Brecknock Road, Camden
- Ropa y zapatos cruelty free es la fórmula de The Third State, una tienda ubicada en Camden. Algodón orgánico, plásticos reciclados, bamboo, corcho, fibras naturales y sintéticas son algunos de los materiales que componen sus productos. Aquí no hay moda rápida al mejor estilo de Primark ¡Todo lo contrario! Piezas elaboradas con cuidado y producidas libres de explotación. Un claro ejemplo de que la moda también vira hacia lo sostenible.
- Abiertos desde 2005, sus dueños -James y Angela Corcoran- reconocen que ha habido un importante incremento en sus ventas en los últimos años, a medida que el consumo responsable se impone en la agenda social londinense.
- Más info: thethirdestate.co.uk
Josefina Cornejo Stewart