Bruxismo: causas y tratamientos para la principal causa del desgaste de dientes

Qué es el desgaste dentario, cómo juega el bruxismo y qué consecuencias puede traer para tu salud. Además, te acercamos alternativas para corregirlo.

por

Ángela Márquez

27 de octubre de 2023 • 14:12

¿Qué es el bruxismo? - Créditos: Getty.

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A medida que pasan los años, nuestro cuerpo integralmente se va transformando de pies a cabeza. Seguramente reparaste en fotos donde inclusive tus dientes no son como los de antes: los notás desgastados, no tan parejos y hasta de distintos tamaños.

¿Por qué se desgastan los dientes? El desgaste dentario puede producirse por diferentes causas:

Bruxismo: rechinar o frotar los dientes involuntariamente por lo general de noche. Hacer movimientos parafuncionales.

Según datos de la Asociación Dental de Estados Unidos durante la pandemia se produjo un salto del 69% en la cantidad de pacientes que aprietan o entrechocan los dientes. El estrés es un desencadenante de este problema.

Hay profesionales que sostienen que todas las personas bruxamos y solo hay paliativos para reducir ese problema.

En un artículo reciente de The Washington Post se ofrecen como consejos:

- Usar una placa de descanso durante la noche, ya que si bien no elimina el bruxismo, previene un mayor daño a las piezas dentarias.

- Aplicarse botox: las inyecciones de toxina botulínica en los músculos de la mandíbula que controlan la masticación pueden reducir la presión que ejercemos sobre los dientes.

- Bajar el estrés: las actividades relajantes y descontracturantes, como el yoga y la meditación, también ayudan, al igual que una mayor consciencia de nuestros comportamientos diarios.

- Fisioterapia: un terapeuta físico o un osteópata que sepa tratar el bruxismo puede enseñarnos a elongar, fortalecer y relajar los músculos del cuello y la mandíbula, lo que reduce la tensión muscular que nos hace apretar y entrechocar los dientes.
Envejecimiento dental: los cambios por el envejecimiento ocurren en todas las células, tejidos y órganos del cuerpo y los dientes y las encías no están exentos.
Mala mordida o mala posición dentaria: altera el funcionamiento del aparato masticatorio y esto provoca dolores musculares, de cabeza y cuello, de oído y, con el tiempo, puede provocar problemas digestivos. Como consecuencia, termina afectando también a las piezas dentales, las encías y los huesos.
Cepillado dental con cepillos inadecuados: los cepillos tienen que ser suaves. Se debería realizar dos veces al día con un cepillo de dientes con cerdas suaves. Además, se debe cambiar el cepillo de dientes cada 2 o 3 meses. Un cepillo desgastado no es efectivo y, además, acumula demasiadas bacterias.
Trastornos alimenticios: el aumento de la acidez en la boca termina por abrasionar el esmalte y exponer la dentina, el tejido dentario que se sitúa bajo el esmalte. Es lo que se denomina erosión ácida, que activa un proceso de desmineralización del esmalte dentario, producido por sustancias ácidas

María Paula Roche, odontóloga especializada en Estética Dental, explica que “el esmalte dental no se regenera por sí mismo". De allí los tratamientos que, comenta, están enfocados en la causa principal de desgaste para procurar frenarlo. Los tratamientos y resultados van a depender de si el desgaste es leve, moderado o severo.

"Cuando hay desgaste dentario muy marcado trae consecuencias estéticas y funcionales", señala. Menciona que, en lo que se refiere a la estética, afecta la forma y color de los dientes, porque al desgastarse el esmalte se transluce la dentina, que es más amarillenta.

Más allá de lo estético, las consecuencias de tener tus dientes desgastados, repercuten en la sensibilidad dentaria, en problemas de mordida; también puede verse dolor dental, articular y muscular.

Cómo solucionar el desgaste de tus dientes

De acuerdo a la especialista, en el caso de pacientes con bruxismo coincide en la importancia de usar placas de acrílico miorrelajantes para la noche, que interfieren el rozamiento entre ambas arcadas.

Para los desgastes relacionados con malas posiciones dentarias o malas oclusiones pueden corregirse con tratamientos de ortodoncia, según su mirada.

Por último, en el caso de desgastes severos la solución va a apuntar a recuperar forma, altura de los dientes, con tratamientos protéticos (coronas, carillas), rehabilitación de las piezas dentarias, articulación témporo-mandibular y luego placa miorrelajante.

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