Síndrome premenstrual: lo que tenés que saber sobre este trastorno

El Síndrome premenstrual (SPM) es un trastorno cíclico que se da durante la fase lútea, -o la segunda mitad del ciclo de la mujer- que generalmente sucede unos días antes del comienzo de la menstruación. Luego, tras la llegada de la menstruación, los síntomas empiezan a ceder.

Si bien no se conoce el origen exacto, esta patología que puede afectar entre un 20 al 40% de las mujeres. Sí se sabe que hay una cierta predisposición genética y está ligada a factores endocrinos, en la fluctuación de los niveles de estrógenos y progesterona en la mujer.

"Un patrón distintivo del síndrome es la disminución de los niveles de serotonina que se produce en la segunda mitad del ciclo menstrual. También se vinculó a la aparición del Síndrome premenstrual con deficiencia de ciertos minerales como el calcio o magnesio”, explica Lucio Ratto, Médico Especialista en Ginecología y Medicina Reproductiva, del staff de FERTILIS.

Cómo reconocer los síntomas del Síndrome Premenstrual  

Además de pasar por todos los estadios emocionales durante los días previos, este síndrome presenta síntomas que se dividen en:

 

Cuándo consultar a tu especialista

 

Entre el 3 a 5% de la población puede padecer una forma grave del Síndrome premestrual, que se llama Trastorno Disfórico Premenstrual (TDPM). Según el experto consultado acá las formas psíquicas incrementan su gravedad y genera desde incapacidad laboral, también influye en las relaciones sociales y, en casos severos, se manifiestan con ideación suicida y deterioro marcado de la calidad de vida de la paciente.  

De acuerdo al especialista, las formas graves se identifican con criterios clínicos y se manejan de manera multidisciplinaria en conjunto con un médico psiquiatra. A través del tratamiento, es importante garantizar, como primera medida, un reordenamiento de los hábitos de la paciente, tratando de generar hábitos saludables. La paciente debe poder conciliar el sueño, apoyar e indicar una dieta saludable para disminuir el consumo de azúcar y sal, reducir bebidas colas y café, incorporar fibras, frutas, etc.

Desde el punto de vista farmacológico existen tratamientos hormonales o se le indica a la paciente suplementar en la fase lútea –10 días antes de la menstruación - con progestágenos, que puede aliviar los síntomas del síndrome premenstrual.

Desde el punto de vista anímico, esta patología cobró mayor interés por el campo de la ginecología durante las últimas décadas. "Es importante como ginecólogos prestar atención a los síntomas que repercuten a nivel anímico de la paciente y no solo a los somáticos. Se suelen dejar de tener en cuentan y son los que mayor repercusión generan para la calidad de vida de estas pacientes”.  

Por último, el especialista nos acerca un mensaje esperanzador: “Si son correctamente diagnosticadas, las mujeres pueden revertir esta sintomatología con los tratamientos médicos. En aquellas mujeres en las cuales se sospecha que podrían estar padeciendo el Trastorno Disfórico Premenstrual (TDPM), en esos casos sí es importante realizar un abordaje multidisciplinario”, concluye.