¿Por qué bailar le hace bien al cerebro?: esto es lo que dicen las neurociencias
Te contamos las evidencias y los beneficios de la relación entre la danza y la neurociencia. Cómo podemos comprender mejor la conexión entre el cuerpo y la mente en movimiento, y las nuevas perspectivas en la intersección de la ciencia y el arte.
18 de septiembre de 2024
Bailar hace bien al cuerpo y la mente. - Créditos: Canva
Si bien hay sobradas evidencias de los beneficios que supone el bailar y el caminar, se cree que la danza al ser una actividad principalmente social, de encuentro, de disfrute y que fomenta el componente lúdico y creativo, reduce en mayor medida el estrés y fomenta un mayor cuidado. La danza no es solo movimiento, sino que es también una experiencia multisensorial que engloba a todos los sentidos.
Hoy se sabe que el sedentarismo es la enfermedad carencial número uno del siglo XXI. Nuestro cuerpo está diseñado para el movimiento, y la mayoría de las personas trabajan todo el día sentadas, además de las horas sentados en transportes o vehículos y las que dedican a la conexión digital a las redes, pantallas y los maratones de Netflix.
El movimiento es fuente de colaboración ya que fomenta el trabajo y la influencia de la comunicación entre el cuerpo y el cerebro. Y bailar, ¿qué beneficios trae para el cuerpo y la mente? ¿Qué dice la ciencia médica y la neurociencia?
Los 8 beneficios de bailar
1
Bailar mejora la salud cardiovascular: hay estudios que demuestran como la danza de intensidad moderada reduce significativamente el número de muertes por accidentes cerebrovasculares. Y lo que es bueno para el corazón, también lo es para el cerebro.
2
Bailar nos proporciona mentes más agiles y rápidas, ya que la practica regular aumenta las conexiones cerebrales y la rapidez del procesamiento de la información.
3
Bailar ayuda a la conciencia emocional: en el movimiento ayudamos a equilibrar los neurotransmisores que potencian nuestro bienestar. El movimiento hace que pensemos mejor y que tengamos mayor apertura mental y la emoción es lo que sincroniza los cerebros y los cuerpos.
4
Bailar mejora la salud de los huesos: mejora la densidad ósea y promueve el equilibrio, lo que permite tener mayor reacción ante una caída o anticipar un movimiento de reajuste.
5
Bailar en compañía mejora la resistencia al dolor y produce bienestar. Las personas que bailan juntas en sincronía tienen una mayor resistencia al dolor porque se favorece la liberación de endorfinas, la molécula consideradas como los analgésicos naturales que ayuda a reducir el dolor, el estrés y el miedo.
6
Bailar fomenta los vínculos sociales, genera cercanía social, mejora la comunicación y hace a las personas más altruistas.
7
Bailar alivia el insomnio y el cansancio, lo que reduce la tensión y la fatiga, además de ser un gran protector de la salud mental. Por ejemplo, hay un estudio que demuestra como el tango alivia el estrés y mejora la calidad de vida.
8
Bailar potencia las conexiones entre los hemisferios cerebrales, lo que aumenta los puentes del cuerpo calloso y facilita un mejor flujo de información entre ambos hemisferios. Como consecuencia mejora la velocidad del procesamiento y la integración de la información.
No cabe duda de que hay que moverse, mantenerse activo, caminar, nunca dejar de aprender, buscar actividades que nos hagan fluir y llevar una alimentación saludable para promover nuestro bienestar integral. Y queda claro que el baile es un gran aliado para mantener el cuerpo flexible, una mente rápida y un óptimo sistema inmune.
Si no tenemos tiempo y estamos muy cansados, salir a caminar al menos 20 minutos es gratis y nos ayuda a reenergizarnos y poner a punto nuestro cerebro.
Podemos y tenemos que ser escultores de nuestro propio cerebro y custodios del cuidado de nuestro cuerpo: recordemos que los hábitos se forman a base de repetición. Somos lo que entrenamos todos los días.
Gaby Hostnik Facilita entrenamientos para las organizaciones, con alcance global y colabora en proyectos de neurociencia aplicada, reskilling, empleabilidad, nuevos liderazgos y bienestar organizacional.
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