Audioporno: qué es y cómo podés usar el sonido para potenciar el sexo
Puede que en el sexo lo hayas visto todo. Pero ahora te toca escuchar... Estimulá tus oídos para explorar otras formas de potenciar tu placer.
25 de noviembre de 2022
audioporno-principal.png - Créditos: Getty
Las sábanas se abren, los cierres bajan, la ropa se desliza. La cama hace algún ruido. Tu amante respira fuerte, aunque no tan fuerte como para tapar el tambor de tu corazón golpeando desde tus entrañas. ¿O es el suyo? En el aire flotan miles de chuics, mmms, roces y golpeteos entre cuerpos, pero en tu cabeza, con suerte, solo quedan ecos. Y es que, si los sentidos jugaran un "piedra, papel o tijera" durante el sexo, escuchar perdería contra todos los otros. La audición es lo más fácil de aturdir en todos los amantes del mundo. Bueno, no en todos. Por ejemplo, en las personas no videntes, cada ruidito es una joya, un posible disparador de placer. El audioporno, originalmente diseñado por y para ellos, está ahora en la web al alcance de cualquiera, listo para ayudarnos a expandir nuestra percepción sexual y, probablemente, también para demostrarnos todo lo que estamos desaprovechando en la era de los mensajes de audio. Oí bien esto...
¿A qué suena el sexo?
Si te preguntás qué es el audioporno, probablemente el usuario llamado "SomeAussieGuy" tenga la repuesta. Él es uno de los autores más populares de Literotica, una comunidad de porno amateur en todos los formatos, y también un gran exponente de este género de "audiopornos de autor". Para que te des una idea: en uno de sus archivos más populares, narra una visita a su amante en Francia. La cuenta desde el momento exacto en que aterriza, a medida que se dirige hacia ella, cuando repasa lo que lo atrae a esa mujer. Después, los detalles de su reacción al verla y el despertar de su cuerpo al sentirla. Para atraparte, todo lo expresa con la sensibilidad y confianza con la que se lo relataría a un terapeuta con quien lleva años, solo que la intensidad de sus descripciones crece tanto que SomeAussieGuy termina gimiendo a medida que la historia de ese reencuentro avanza. A esta altura, es probable que muchos de sus oyentes también.
Archivos picantes
Además del audioporno de autor, el mundo del porno para oídos ofrece grabaciones de encuentros reales (como si estuvieras escuchando a tus vecinos), de dirty-talks telefónicas, de orgasmos y de fetiches sonoros muy particulares, como ruidos de sexo oral (sí, de la boca, la baba, los chupeteos) y de masturbaciones intensas, por nombrar algunas. Se ofrecen también pequeñas píldoras de placer, grabaciones que van de 5 a 8 minutos con títulos que remiten a situaciones muy específicas como "Sexo rudo en el sofá", "Masturbación en el jacuzzi" o "Mi amante italiano". Y atenti, que hay formatos que invitan a la interacción. Sitios como el francés voxxx.org, tienen guías asistidas de masturbación y situaciones en calidad binaural, algo así como una tecnología de sonido 3D.
Querido audio
Hay quienes aseguran que el surgimiento del audioporno es la respuesta natural a la invasión de estímulos visuales con los que hemos sido apabullados en los últimos años. Algunas ramas del feminismo han abrazado su irrupción al considerarlo una alternativa menos susceptible de generar la explotación sexual que se da en el porno visual. Todos coinciden en que pensar el sexo de otra manera requiere "deconstruirse". Uno de los aspectos más interesantes del audioporno es cómo nos afecta descubrirlo. Después de un par de experiencias audioporno, es difícil no plantearte la forma en que te comunicás con tu amante. Después de todo, enviar audios hoy está al alcance de todos y, en general, lo que más hacemos es despotricar contra su uso casi siempre ordinario y trivial, sin darnos cuenta de que tal vez estemos desaprovechando la era con mayor cantidad de recursos para expresar amor (y cualquier cosa) que se haya vivido alguna vez. Si lo pensás, en el futuro será mucho más conmovedor recordar a un viejo amante escuchando sus audios amorosos que llorando sobre un viejo papel.
¿Querés hacer el tuyo?
+ Más que escote, pelá cuerdas vocales. Las armas de seducción más fuertes con las que contamos son imposibles de exhibir: el cerebro y las cuerdas vocales. Cuando ambos trabajan juntos, resultan implacables, solo que necesitamos ser un poquito más conscientes de conectarlos. Pensalo: no hablás igual cuando empezás a arder, en llamas o post. Y, definitivamente, no te dirigís de la misma forma a un amante que a tu mamá. En general, bajar el tono natural de la voz, ponerla más grave, da cierta aura de femme fatale. Y apenas subirlo un poquito transmite un estado más de picarona.
+ Usá tu "voz pijama". Hay personas que nos resultan estresantes. Nos transfieren tensión. Generalmente, sus voces están un poquito trepadas, es decir, empujadas para que resuenen más. Es el tipo de voz que usamos naturalmente para hablar en bares o en lugares donde hay ruido. Si te grabás en un momento así vas a oírte tensa, algo desafinada. La "voz pijama" es exactamente lo opuesto a eso.
+ Usá el aire. La voz "entera" mezclada con susurros es clave para la oratoria sexy. Probá susurrar solo una sílaba de algunas de las palabras que estás usando. En general, la primera y la última son las que mejor funcionan. Además, aprovechá los suspiros, las "aspiraditas" por la boca que producen un poquito de ruido. Se trata de invocar los ruidos del sexo que amamos: los gemidos y los entrecortes de respiración.
+ Onomatopeyeá. Los "mmm" de estar pensando, los "uf", los "ajá", los "oi", "oh", "uh", funcionan siempre muy bien.
+ Afilá el oído. Tal vez puedas capturar el roce de la piel, los sonidos de tu boca, el movimiento de tu lengua. Puede haber un contexto también. El ruido de la ducha, quizá tus tacos, su canción favorita.
+ Sé psicológica. No se trata solo de decir guarradas, se trata de crear intimidad, y para crear intimidad tenés que compartir mucho más que tus ruidos, también tus pensamientos y emociones.
+ ¿Qué decir? Contale, de vuelta, cómo fue la primera noche que estuvieron juntos. Describí por qué amás su cuerpo. Anotá las frases sueltas que te gustaría mandarle. Grabate "recordándolo". O incluso podés escribir y leerle el relato de una fantasía que te gustaría compartir.
Para escuchar e inspirarte
Expertos consultados: Silvina Valente, médica especialista en sexología clínica, ginecología y obstetricia, preside la Sociedad Argentina de Sexualidad Humana, Miguel Israilevich, director teatral. miguelisrailevich@gmail.com.