Barra da Tijuca: shoppings y palmeras
A pocos kilómetros de las más famosas playas de Río de Janeiro, la llaman la Miami carioca por su mezcla de arena y centros comerciales
11 de marzo de 2007
RIO DE JANEIRO.- Extensas playas, edificios impactantes, innumerables shoppings, palmeras y mucha seguridad. Así se compone la propuesta de Barra da Tijuca, el barrio diseñado por el renombrado urbanista Lucio Costa, el mismo que tuvo a su cargo el trazado de la mítica Brasilia.
Al oeste de Río de Janeiro, la Barra tiene un acceso muy fácil -se puede llegar en taxi o mediante una combinación de bus y subte- y cuenta con dos polos de atracción bien diferenciados: por un lado, la avenida Sernambetiba, que divide en una exacta línea recta el mar de las altas torres, y por el otro, la Avenida de las Américas, la zona de los centros de compras.
Es sobre esa avenida donde se encuentra la enorme réplica de la Estatua de la Libertad y se acomoda una decena de malls, supermercados, cines, restaurantes de comida rápida, laboratorios y compañías de telecomunicaciones, entre otros.
Explosión demográfica
Hasta finales de los años setenta, la zona era tierra de pescadores. Pero luego comenzaron a llegar las empresas, especialmente de capital extranjero, y poco a poco la Barra fue convirtiéndose en un sector comercial y económico muy pujante, a tal punto que las estadísticas muestran que el área, de clase media alta, recibió unos 125.000 nuevos residentes durante la última década.
Esta explosión demográfica no es casual, sino que tiene que ver con que Barra da Tijuca tiene morros, bosques, palmeras y clima tropical, además de su propio autódromo. Y a tal punto llega el atractivo de la zona, que la cadena hotelera Sheraton la eligió para ubicar su segundo edificio en Río, y desde hace unos años es la principal atracción inmobiliaria de los sectores de mayor poder adquisitivo. No por nada fue bautizada como la Miami carioca ...
Otro elemento fundamental que ayuda al avance de la zona es la laguna de Marapendi, dos espejos de agua de similar extensión unidos por una decena de canales a muy pocos metros del mar.
Barra da Tijuca tiene 18 kilómetros de playa, que son muy buscados por quienes prefieren playas con poca gente y también por los amantes del surf, ya que aquí se dan buenas olas para correr .
Leonardo, un carioca de 27 años, vive en Recreio, localidad próxima, pero todos los días llega a Tijuca: "Este es el lugar perfecto para hacer surf porque hay muy poca gente en el mar. A pesar de que no tenemos demasiados vínculos con los residentes de la zona, nos sentimos como en casa", asegura.
Pero el fuerte movimiento del mar también tiene un lado negativo: durante los días ventosos, que en realidad son muy pocos en las costas brasileñas, no es simple sobrevivir a las rompientes de esa inmensa masa de agua. Por eso un cartel señala que está prohibido nadar en tales condiciones. Sin embargo, eso no es impedimento para que muchas familias se acerquen a pasar el día. Como explica Daniela: "Aquí se puede jugar con los chicos en un espacio amplio, sin molestar demasiado a otra gente y con plena seguridad". Es que en la zona se unen la labor de la Prefectura y el refuerzo de la seguridad privada de los barrios cerrados, lo que inspira cierta confianza en el contexto de una ciudad con problemas de violencia como Río.
Durante la semana reina la tranquilidad, con un puñado de extranjeros y mayoría de locales que disfrutan de una calma que la diferencia notoriamente. Sin embargo, sábados y domingos son miles los visitantes que llegan para vivir al menos por un rato la experiencia de la Barra, con su suave vida de playa y a la vez su compulsión por el shopping. Todo un estilo.
Datos útiles
Cómo llegar
GOL Linhas Aereas y TAM tienen vuelos diarios, sin escalas, entre Buenos Aires y Río de Janeiro con tarifas que van desde los 300 dólares, con impuestos.
Un taxi desde el aeropuerto hasta Barra de Tijuca cuesta unos 70 dólares. Desde las playas de Copacabana e Ipanema el recorrido puede realizarse mediante el MetroBarra, la combinación entre subte y colectivo, por sólo 3 dólares.
Hoteles
Para hospedarse se puede elegir el confortable Sheraton Río, donde la habitación doble básica cuesta unos 250 dólares. También existen opciones más económicas, como el Windsor Barra Hotel, que ofrece la suite doble por 210 dólares la noche. Para más información, se puede ingresar en www.barraleme.com , que publica datos y links con hoteles en Río de Janeiro .
Más información
Embajada de Brasil en Buenos Aires, Comité Visite Brasil. Cerrito 1350, 4515-2403. Horario: 9 a 12.30.